Una nueva mirada a Fundy
Por el corresponsal de “¡Despertad!” en el Canadá
MI ANTERIOR visita a la bahía de Fundy fue en la niñez, pero permaneció la misma primera impresión: una de incredulidad. El muelle tenía unos nueve metros de alto pero el barco atado a él estaba varado en seco, o, dicho más exactamente, asentado sobre un mar de lodo.
“¿Quién tiró del tapón?” comenté en son de broma a un pescador que trabajaba en su aparejo. Ocultando una mirada de resignación, declaró en voz baja: “La marea salió. Volverá a las 2:30 esta tarde.” Esta fue mi reintroducción a Fundy, que cuenta con las mareas más gigantescas del mundo.
La bahía de Fundy, una proyección parecida a espuela del Atlántico del Norte, está ubicada entre las provincias marítimas del Canadá de Nueva Escocia y Nuevo Brunswick. El extremo de tierra adentro, o “cabecera,” está dividido por una cuña de tierra en dos bahías más pequeñas, el golfo de Minas y la bahía de Chignecto. Es aquí que la bahía de Fundy encorva sus músculos con formalidad, desplegando mareas de un alcance cercano a los quince metros.
Mareas, sus causas
Las mareas avanzan y las mareas retroceden: marea creciente, entonces marea menguante. Fundy, como la mayoría de las zonas costeras del Atlántico, ve repetirse este modelo dos veces cada día lunar, o período de 24 horas y 50 minutos. Día tras día continúa este ciclo sin fin, como lo ha hecho desde los días de Noé. ¿Por qué? ¿Qué causa este ritmo pulsátil predecible?
Básicamente, la respuesta estriba en la ley de la gravedad. El Sol y la Luna ejercen una poderosa atracción gravitatoria sobre la Tierra y sus océanos. Debido a su inmensa distancia el Sol tiene, con mucho, la más débil fuerza de atracción de los dos. Debido a que la distancia entre la Tierra y estos astros varía de día en día, de igual modo varían sus fuerzas de atracción. Además, debido a que la declinación de la Luna, al norte o al sur del ecuador de la Tierra, se altera continuamente, esto tiene un efecto sobre el horario de las mareas en varias partes del globo terráqueo. Sin embargo, estos fundamentos de ninguna manera completan el cuadro, porque los científicos pueden enumerar una multitud de factores contribuyentes, aunque éstos mayormente son de una naturaleza geográfica local.
Pero, ¿por qué experimenta Fundy dos juegos de mareas altas y bajas por día lunar? Recuerde que la atracción gravitatoria afecta tanto a la tierra como al agua, pero el efecto sobre el agua es mayor puesto que ésta no es rígida. El tiempo de la marea alta para cualquier localidad determinada ocurre cierto intervalo de tiempo después de que la Luna pasa por sobre el meridiano para esa localidad, lo cual tiende a separar el océano de la tierra sólida y resulta en una marea “directa” en el lado de la Tierra donde está la Luna. Pero, del lado diametralmente opuesto de la Tierra, también ocurre una acumulación de agua. Uno pudiera decir que aquí la Tierra es atraída hacia abajo y separada del agua, produciendo una marea “opuesta.”
No obstante, es interesante notar que no todas las zonas costeras del globo comparten el modelo de mareas semidiurnas (dos veces al día) de Fundy. Aunque éste es con mucho el tipo más común de modelo, lugares esparcidos alrededor de la Tierra experimentan un ritmo “diurno” de un flujo y un reflujo en un día lunar. Esto no tiene una explicación sencilla, pero, según los oceanógrafos, se considera básicamente, como el resultado de varias fuerzas de mareas y rasgos geográficos locales que se combinan con un efecto neutralizador.
La diferencia entre la marea alta y la baja se denomina la “amplitud” de las mareas. Esta amplitud llega a su máximo durante el tiempo de la Luna llena y la Luna nueva. Las resultantes “mareas vivas” se deben al hecho de que el Sol y la Luna están en línea directa con la Tierra, así produciendo la mayor fuerza combinada de atracción. Durante el primer y el último cuarto de la Luna, ocurren las “mareas muertas,” o mareas de menor amplitud. La razón: la Luna se ha colocado a 90 grados del Sol, lo cual resulta en una atracción gravitatoria que aproximadamente tiene solo la mitad de la fuerza lunar. Punta Economy, en el golfo de Minas, ha registrado mareas vivas de casi dieciséis metros, que contrasta con las mareas muertas que tienen una extensión mucho menor aunque todavía impresionante de casi siete metros.
De vez en cuando el pulso de la Tierra verdaderamente se hace sentir, cuando un viento fuerte o una tormenta de mar refuerza una marea alta. Esa “marejada” tiene un terrible potencial para el desastre.
Por qué son tan sobresalientes la mareas de Fundy
Pero, ¿por qué es que las mareas de Fundy sobresalen tanto de las de otras zonas del mundo? Una mirada al mapa suministra parte de la respuesta.
¡Un enorme cucharón formado por las curvas líneas de la costa de los vecinos estados de Maine, New Hampshire y Massachusetts de los Estados Unidos encauza el agua hacia la boca de forma de embudo de Fundy! A medida que la crecida de agua entra en la bahía de Fundy, se lleva a cabo una compresión, debido al canal que constantemente se va estrechando y al gradual declive del fondo. El resultado: la suave crecida se convierte en una impetuosa montaña de agua que choca contra el extremo de la bahía. Esto explica las grandes variaciones de amplitud de la marea a través de toda la bahía de Fundy. La bahía de Sta. María, cerca de la boca de Fundy, registra una amplitud de 6 metros, mientras que la bahía de Chignecto y el golfo de Minas tienen las monstrosas amplitudes de 14 y 16 metros respectivamente.
Otra cosa que contribuye a las mareas de Fundy es un factor que se conoce como resonancia. Para ilustrarlo sencillamente, si uno remueve el agua en un recipiente, ésta tiende a oscilar o a moverse con un movimiento de hamaca, frecuentemente salpicando por sobre los bordes. Los océanos contienen muchos recipientes naturales de esa clase, uno de los cuales es la cuenca de Fundy. Cada una de estas cuencas tiene su propio período de oscilación, que se determina por su largo y su profundidad. A medida que las mareas de Fundy van y vuelven dos veces por día (cada 12 horas y 25 minutos) el largo de su cuenca es prácticamente ideal para dar una resonancia perfecta con los ritmos solares y lunares. Esta es una de las razones básicas por las que las mareas de Fundy son gigantes entre gigantes, cuando salpican contra los extremos de la bahía.
Oleadas de la marea
El silencio del muelle fue roto inesperadamente por mi pescador conocido: “Si quiere ver la oleada, es mejor que se apresure.” Casi me había olvidado. La oleada de la marea no es algo que un visitante a Fundy debe perderse. De hecho, se publican horarios para el beneficio de los que desean ver este fenómeno natural.
Una “oleada” se produce cuando las poderosas aguas de la marea ascendente chocan con la corriente de un río que se descarga. Dentro de los confines de las márgenes del río se produce una pared de agua que parece abrirse paso luchando río arriba. Ha de notarse que no todos los ríos costeros experimentan esta maravilla, pero por lo general se le asocia con profundidades relativamente bajas y aumentos repentinos en la pendiente del lecho del río.
Varios de los ríos de Fundy presentan este despliegue; algunos con oleadas de solo pocos centímetros y otros con oleadas mucho más grandes. En la ciudad de Moncton, treinta y dos kilómetros tierra adentro de la bahía de Chignecto, los turistas se detienen con regularidad para ver la oleada de noventa a ciento veinte centímetros en el río Petitcodiac. Sin embargo, a pesar de lo impresionantes que son, las oleadas de la marea de Fundy son empequeñecidas por las del río Fuchun en la China y las del río Amazonas de la América del Sur. En el Amazonas, un observador puede ver una aparente catarata, de un kilómetro y medio de ancho y de casi cinco metros de alto, moviéndose río arriba a más de veinte kilómetros por hora. Sí, las mareas de la Tierra son ciertamente una fuerza poderosa con la cual contender.
Viviendo con las mareas
Por siglos el “reloj de las mareas” ha dirigido el pulso de la vida marítima. Tanto el movimiento de las flotas pesqueras, como el de los navíos comerciales y bélicos por igual fueron afectados. Los astilleros de Nueva Escocia, en un tiempo entre los más ocupados en el mundo de los veleros, vivían según las mareas. Los buques del siglo veinte todavía lo hacen en Fundy.
El reflujo y el flujo todavía gobiernan a los muchos pescadores a lo largo de la costa de Fundy. Un método que utiliza trampas “de presa,” que consisten en estacas altas unidas con redes, verdaderamente deja que la marea misma haga la pesca. Cuando la marea está alta, solo son visibles fuera del agua los extremos superiores de las estacas. A medida que la marea baja, las aguas descendientes dejan a los peces encallados en la barrera de redes. Prontamente con la marea baja, el pescador conduce su camión o furgón por el lodo hasta las trampas y recoge sus pescados. Las siempre presentes bandadas de hambrientas gaviotas de mar tratan de adelantarse a los pescadores en su cosecha. Sin embargo, hay una razón más seria por la cual no se debe perder tiempo; la marea ascendiente no es selectiva en cuanto a qué o a quién atrapa.
El utilizar el agitado mar como una fuente de energía no es nada nuevo. En la ciudad de Londres, Inglaterra, la primera estación bombeadora de agua que fue accionada por una rueda hidráulica impelida por la marea se construyó en el viejo Puente de Londres. Una instalación accionada por la marea para bombear aguas de albañal todavía se hallaba en uso en Hamburgo, Alemania, en 1880. Y las mareas de Fundy también han estado trabajando, accionando molinos. Uno de esos aserraderos accionados por la marea evidentemente todavía funcionaba en Maine tan recientemente como hace veinte años.
Pero el perfeccionar energía en gran escala en Fundy era harina de otro costal. En este siglo se han realizado varios estudios en cuanto a su posibilidad, y el esfuerzo más extenso se encuentra en la bahía de Passamaquoddy, en la frontera entre Nuevo Brunswick y Maine. En cada caso, el hombre no había tenido lo que se necesitaba para domar al inquieto gigante. Careció de cooperación, tecnología y financiación.
Una nueva mirada a Fundy
Una vez más Fundy es un centro de interés. ¿Por qué esta nueva mirada a Fundy?
La confianza por medio de la experiencia técnica ha sacado el represar la energía de la marea del reino de la fantasía y lo ha hecho una modesta realidad. La investigación internacional ha estado aumentando hasta el grado de que dos de esas centrales que utilizan la marea ya son esa realidad. Una es un pequeño proyecto experimental en la bahía de Kislaya, un lugar a 965 kilómetros al norte de Murmansk en la U. R. S. S. La otra es una explotación de energía de gran tamaño sobre el río Rance en Francia, que actualmente produce 544 millones de kilovatios-hora de electricidad al año. “¡Así es que se puede hacer!” dicen los ingenieros, ansiosos de poner a competir sus habilidades en contra del gigante, Fundy.
Otra razón está relacionada con nuevas soluciones para un problema fundamental de la energía de la marea: el hecho de que los máximos de producción de energía dependían, hasta recientemente, del ritmo natural de las mareas, y por lo tanto no necesariamente coincidían con los períodos en que se necesitaba la energía. La producción de nuevas unidades de generadores de turbinas de flujo reversible y nuevos conceptos de diseño para proveer energía en cantidades más uniformes diariamente han estimulado una nueva mirada a lo práctico de la energía de la marea.
Y ahora, quizás el principal catalizador para dirigir la atención hacia Fundy: ¡la crisis de energía! Relacionado con esto está la creciente preocupación acerca de la contaminación. La energía de la marea es esencialmente energía “limpia,” sin los conocidos serios problemas de contaminar la atmósfera, el terreno o el agua. Lo que es más, la energía de la marea no está limitada como los recursos minerales, sino que es tan confiable como las incesantes mareas.
Así es que existe la necesidad de energía; el suministro de energía está disponible; la mayoría de los problemas técnicos, aunque difíciles y complejos, ahora se pueden resolver. ¿Qué impide que las mareas de Fundy beneficien más plenamente al hombre? ¡Dinero! ¡El financiar un proyecto tan colosal, con su alto costo de construcción, aunado con altos porcentajes de interés y la creciente inflación monetaria, ciertamente es un obstáculo! En un sistema de cosas mundial en el que las prioridades se rigen mayormente por la ventaja financiera, esto quizás resulte ser la barrera que por el presente impida que las gigantescas mareas de Fundy sean represadas.
[Mapa de la página 8]
(Para ver el texto en su formato original, consulte la publicación)
NUEVO BRUNSWICK
BAHÍA DE CHIGNECTO
BAHÍA DE PASSAMAQUODDY
MAINE
N.H.
OCÉANO ATLÁNTICO
BAHÍA DE FUNDY
GOLFO DE MINAS
NUEVA ESCOCIA
BAHÍA DE STA. MARÍA