Busca la naturaleza; halla el paraíso
Un joven que se especializaba en el estudio de la filosofía y la religión en la Universidad Pacific de Oregón llegó a estar muy envuelto en el uso y venta de drogas. También relata lo siguiente: “Hasta donde llegué en mis estudios de la religión quedé convencido de que no quería tener nada que ver con la religión.” Desilusionado, abandonó la escuela y se fue a vivir en el bosque. “Me puse a trabajar en el bosque,” explica él, “porque no me sería posible acercarme más a Dios que simplemente estando cerca de la naturaleza.” Pero siguió tomando drogas y bebidas alcohólicas.
“Cuando iba a la oficina de correos para conseguir mi correspondencia,” dice él, la señora que estaba encargada de la oficina “me decía que debería dejar de hacer las cosas que había estado haciendo; que Dios tenía el propósito de establecer un ‘paraíso’ aquí en la Tierra . . . Para mí la idea de que la gente viviera en la Tierra en un paraíso era nueva.” De modo que este joven empezó a estudiar la Biblia con el hijo de la administradora de correos. Respecto a eso, el joven hace el siguiente comentario: “El hecho de que tendríamos la oportunidad de vivir en un hermoso planeta en el bosque y al lado de arroyos o lo que prefiriéramos... estas cosas realmente hicieron llamamiento al amor que le tengo a la naturaleza. De modo que realmente empecé a tomarlo en serio y traté de cambiar mis hábitos.” Andando el tiempo, la esperanza del paraíso basada en la Biblia ayudó a este joven a limpiar su vida.