El libro de mayor venta del mundo... su lucha por vivir
DE CADA mil libros que se publican, solo unos cincuenta continúan en uso popular por lo menos por siete años. Debido a que la gente pronto pierde el interés, un libro “vive” una muy corta existencia.
¿Qué pensaría usted, entonces, de un libro que se ha continuado usando popularmente por más de 3.000 años? Añada a esto el hecho de que ha sobrevivido a la más fiera oposición que haya afrontado libro alguno en la historia del mundo. Tiranos, reyes, príncipes, sí, hasta imperios completos, se han esforzado por destruirlo. Sin embargo, ¡hoy día ha llegado a ser el libro de mayor venta del mundo!
A veces a los opositores les pareció que la destrucción de la Biblia era segura. Gobernantes poderosos emitieron decretos y prohibiciones que la condenaron al fuego, pero en vano anunciaron su fin. El libro sobrevivió. Su preservación a través de ola tras ola de ataque a través de los siglos ha sido llamada “un milagro de la historia.”
¡Imagínese! ¿No es un hecho muy extraño el que un libro tan antiguo como la Biblia, y al que se ha sometido a tal oposición, haya llegado a ser el mejor éxito de librería, el libro de mayor venta, de todos los tiempos? En ciertos respectos, los libros son como los seres humanos. Tienen un principio, quizás un aumento en popularidad, y generalmente envejecen y mueren. A menudo las bibliotecas son cementerios de millones de libros muertos.
Sin embargo, la Biblia, cuyos orígenes como escritura se remontan a 35 siglos, está muy viva y se puede leer en un 97 por ciento de los idiomas de la población terrestre. Tan asombrosa es su distribución que hasta antes de que se creara el término “libro de mayor venta” la Biblia era el libro más solicitado del mundo.
Se necesita más que la supervivencia del libro mismo
La Biblia alega que contiene las palabras de Dios, en el sentido de que sus escritos fueron inspirados directamente por el espíritu de Dios. (2 Tim. 3:16; 2 Ped. 1:20, 21) Dios dijo respecto a su palabra: “La hierba se seca, la flor se marchita, mas la palabra de nuestro Dios permanece por siempre.” (Isa. 40:8, Biblia de Jerusalén) Pero su ‘permanecer por siempre’ significaría más que el que la palabra de Dios simplemente hubiera de existir en un libro por largo tiempo.
En realidad hoy existen “libros” que en forma escrita parecen ser más antiguos que la Biblia. Por ejemplo, existen tablas o tabletas de arcilla y otras obras de literatura de los antiguos babilonios y egipcios de las cuales se cree que fueron escritas siglos antes de que Moisés comenzara a compilar la Biblia en el año 1513 a. de la E.C. Pero estos documentos antiguos están escritos en lenguas muertas y consideran asuntos que son de poco interés a las masas de la gente de hoy día. En lo referente a valor práctico, esos “libros” están muertos.
Por el contrario, la Biblia dice que la Palabra de Dios continuaría “obrando en . . . los creyentes.” (1 Tes. 2:13) El poder de su mensaje influiría en la vida de los que la usaran. Al verter ese mismo versículo, la Santa Biblia (Ediciones Paulinas) dice de “la palabra de Dios” [o “el mensaje de Dios,” según la Versión Popular]: “Permanece vitalmente activa en vosotros, los creyentes.”
Un reto colosal
¿Podría Dios preservar “vitalmente activa” su palabra para siempre? Si así fuera, ello significaría vencer enormes obstáculos. Además de los impedimentos naturales, habría un ataque que finalmente casi destruiría a la Biblia como fuerza viva entre los creyentes.
Es absorbente considerar la manera en que la Biblia se sobrepuso a toda esta oposición. Por siglos los hombres han tratado de quemarla y enterrarla. Reyes y emperadores poderosos han levantado contra ella el poder de imperios enteros. Y sin embargo la Biblia permanece indestructible hasta este día.
Uno quizás se pregunte: ‘¿Por qué, precisamente, se ha hecho tal esfuerzo por conservarla y preservarla? ¿Será sencillamente para que la Biblia tenga buen efecto en mi vida? ¿Pudiera haber una razón mucho más poderosa y profunda?’ Sí, ¿por qué se hicieron intensos esfuerzos en el pasado, y todavía se siguen haciendo, para que toda persona pudiera tener la Biblia y leerla?
La información que sigue le suministrará una respuesta muy alegradora. También realzará genuinamente su propio aprecio del hecho de que la Biblia haya sido preservada hasta nuestro día.