De nuestros lectores

Ayuda contra el herpe

Mi familia y yo estamos muy agradecidos por el artículo “¿Asoma ya el fin de las enfermedades?” en la edición en francés (22 de enero de 1984, en español). El mismísimo día en que llevamos a nuestro hijito de un año de edad al hospital debido a que tenía una seria infección de los ojos, la revista de ustedes nos llegó por correo y nos la llevamos con nosotros. ¡Qué contentos nos sentimos de haber acabado de leer la información sobre el herpe tipo I cuando se diagnosticó que precisamente eso era lo que tenía nuestro hijo! Inmediatamente comenzamos a tratarle los ojos con una solución de agua tibia y sal de Epsom, como sugería el artículo (página 9). En dos días la hinchazón había bajado y había salido mucho del veneno. Durante el examen médico que le hicieron, el director de personal del departamento dijo que aquello fue lo mejor que pudimos haber hecho. Sin las excelentes instrucciones de ustedes, estamos seguros de que se hubieran desarrollado graves complicaciones.

R. B., Canadá

Las drogas y las bebidas alcohólicas

Soy un juez jubilado y opino que debo decirles que su revista me fue muy útil mientras ejercía mi profesión. En cierto caso criminal que tenía que ver con el tráfico y uso de drogas, los datos que presentaron en la revista que publican me fueron de gran ayuda para tomar mi decisión, y me permitieron sentenciar al vendedor de drogas y mandarlo a internar para que recibiera tratamiento. En otra ocasión las revistas me fueron de gran ayuda al preparar un discurso que había de pronunciar para Alcohólicos Anónimos de mi ciudad, en favor de una campaña para la recuperación de alcohólicos. Muchas gracias.

J. A., Brasil

Proyectos escolares

En mi último año de estudios de contabilidad se me notificó que, debido a mis bajas calificaciones, tendría que recibir por lo menos una calificación de 90 en una investigación sobre el tema de la crisis económica mundial, si es que yo quería graduarme. Decidí usar como base para mi investigación la serie de artículos sobre “La economía mundial... ¿en qué parará” (22 de octubre de 1983). Imagínense mi alegría y sorpresa cuando la profesora alabó muchísimo la investigación que yo había efectuado. Dijo que era contrario a la norma dar una calificación perfecta, así que de 10 me daría 9,8... ¡más que suficiente para graduarme!

P. R., Brasil

Gracias por el artículo “Los jóvenes preguntan... ¿Qué futuro puede tener cualquiera de nosotros?” (8 de marzo de 1983). Varios días antes de que nos dieran los exámenes, nuestra maestra nos dijo que en la prueba final de alemán podríamos escoger de entre tres temas para escribir una composición. Uno de ellos —dijo ella— tendría que ver con nuestro futuro. La noche antes de los exámenes, leí de principio a fin el artículo mencionado. La siguiente mañana se nos dio a escoger entre tres temas. El tercero de ellos no pudo haber sido mejor: “Ningún futuro... ¿es así como opinas?”. Tres semanas más tarde me enteré de la calificación que había obtenido. Mi maestra me dijo que era la primera vez en la vida que había dado una calificación de “A” en una prueba final de alemán. También se hizo circular mi composición entre los demás maestros. Por favor, sigan publicando en el futuro artículos excelentes como éste.

M. H., República Federal de Alemania