EL SIDS... temor diario de los padres
“La muerte inesperada y repentina de un niño que parece saludable es, probablemente, lo más patético y devastador que le puede acaecer a una pareja joven. En la sociedad occidental es la causa más común de muerte infantil después de la primera semana de vida.” (Profesor Bernard Knight, “Sudden Death in Infancy—The ‘Cot Death’ Syndrome”.)
ERAN las cuatro de la mañana del 22 de diciembre de 1984. Ken Eberline asomó la cabeza al dormitorio para ver cómo estaba su hijita, Katie, de siete meses. Katie era el orgullo y el gozo de Ken y Tottie, quienes tenían poco más de treinta años de edad. La niña estaba durmiendo plácidamente. Ken se fue de la casa. Tenía un largo trayecto hasta Las Cruces, Nuevo México, donde daba clases.
Tottie se levantó a las siete y media, y fue a ver cómo se encontraba Katie. La niña estaba extrañamente silenciosa. Tottie miró de nuevo, la tocó e inmediatamente se dio cuenta de lo peor. Estaba muerta. Había sufrido la “muerte de cuna” o SIDS (síndrome de muerte infantil repentina). Esta muerte súbita y silenciosa azota a miles de familias cada año.
Un médico forense compasivo
¿Cómo reaccionaron Tottie y Ken ante esta pérdida? Tottie dijo a ¡Despertad!: “Tan pronto como me di cuenta de lo que había pasado, llamé al 911, los servicios de emergencia. Los paramédicos y la policía llegaron inmediatamente, junto con un médico forense. Fueron muy amables y compasivos. Por supuesto, en seguida me asaltaron ciertas dudas: ¿Qué hice o dejé de hacer para que hubiera ocurrido esto?
”El médico forense calmó mis temores. Me explicó que él había perdido a un hijo en las mismas circunstancias hacía nueve años. ‘No había nada que usted hubiera podido hacer para evitarlo —afirmó—. Aunque hubiera estado al lado de la cuna con un monitor, no habría podido salvarla —añadió—. No se puede ni prever ni evitar. En algunos casos, todo acaba de golpe, y por el momento no hay manera de saber la causa.’ Estoy segura de que sus observaciones evitaron que desarrollara un sentimiento de culpabilidad.”
¿Cómo superaron Ken y Tottie esta pérdida? Otro artículo contestará esta pregunta. Pero los padres de niños pequeños esperan respuesta a otras preguntas: ¿Qué causa el SIDS? ¿Hay algunas señales de advertencia? ¿Se puede prevenir?