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  • “No es más que un pájaro que trata de ganarse

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  • “No es más que un pájaro que trata de ganarse
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¡Despertad! 1988
g88 22/5 pág. 31

“No es más que un pájaro que trata de ganarse la vida”

ES UN trabajador infatigable, defiende a los suyos, desempeña sus tareas, empolla los huevos, cuida y alimenta a los polluelos y se afana durante meses sin un solo día de descanso. Hace honor a su nombre de carpintero ocotero, pues horada agujeros en los árboles y los atiborra de ocotes (una especie de bellota), de los que se alimentará durante el invierno. Se calcula que, en cierto pino de gran tamaño, había escondidos unos cincuenta mil ocotes.

Todo eso está muy bien. El problema surge cuando comienza a utilizar los postes de electricidad como despensa. Los acribilla de agujeros, lo que hace que los postes se estropeen; algunos han de reemplazarse, y eso cuesta entre 800 y 1.300 dólares por poste. Eso significa que este pájaro carpintero está empezando a resultar bastante molesto para algunas personas... ¡y para sus bolsillos!

Uno de los responsables del Departamento de Caza y Pesca de Arizona se muestra bastante comprensivo al respecto: “No es más que un pájaro que trata de ganarse la vida”, dice. Hasta ahora, incluso la compañía eléctrica ha sido comprensiva, aunque firme. Definitivamente, la electricidad tiene que llegar a su destino, así que se han probado postes de metal, hormigón y fibra de vidrio, pero resultan demasiado caros. Se han protegido algunos postes con una red metálica fina, pero eso también resulta muy costoso. Una red de polietileno se estropeó con el calor del Sol. Se probó a fijar serpientes de goma a los postes, pero no tardaron mucho en acostumbrarse a ellas. También se han rociado algunos postes con un producto químico preparado especialmente para repeler a los pájaros carpinteros. Los resultados obtenidos fueron bastante buenos en Texas, pero no tanto en Arizona.

Los últimos informes sobre la guerra contra los pájaros carpinteros son que esta aún continúa, pero que el carpintero ocotero todavía se las arregla para ganarse la vida. Y es que, a pesar de todo, ¡es un pájaro tan hermoso!

[Reconocimiento en la página 31]

Foto de G. C Kelly

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