De nuestros lectores

Hablar de otros Gracias por sus oportunos artículos sobre la costumbre de hablar de otros (8 de junio de 1991). Hace poco fui víctima del chisme malicioso, y gracias a aplicar el principio bíblico registrado en Mateo 18:15-17, pude aclarar la situación con la persona que me ofendió.

B. C., Australia

Los artículos me parecieron informativos y bien redactados. Pero me llamaron la atención las fotografías que utilizaron. En cuatro de ellas quienes hablan de otros son mujeres, lo que da a entender que esa es una costumbre característica de las mujeres.

H. W., Estados Unidos

No era nuestra intención atribuir malas cualidades a nadie, ni a las mujeres ni a los hombres. En dos de las fotografías eran hombres los que hablaban de otros. Otra foto mostraba a dos mujeres participando en una conversación edificante. También se publicó una foto en la que se veía a una mujer que rehusaba escuchar habla perjudicial.—La dirección.

Pandillas Acabo de recibir el número del 8 de junio de 1991 que contiene el artículo “Los jóvenes preguntan... ¿Debo unirme a alguna pandilla?”. Mi marido y yo estuvimos muy preocupados por nuestra hija menor debido a lo mucho que le atraían las pandillas. Empezó a vestir como esas jovencitas y copiaba su forma de maquillarse y de peinarse. No nos dimos cuenta de lo serio de la situación hasta que casi fue demasiado tarde. Afortunadamente pudimos apartarla a tiempo de esas malas influencias. Espero que su artículo sea de utilidad. ¿Piensan publicar más información sobre este tema?

D. N., Estados Unidos

Véase la revista “¡Despertad!” del 22 de julio de 1991.—La dirección.

Los pulmones Tengo que darles las gracias por el artículo “Los pulmones. Prodigio de diseño” (8 de junio de 1991). Me hizo sentir una gran admiración por las maravillosas obras de Jehová Dios. El artículo estaba muy bien redactado y me ayudó de una manera increíblemente sencilla a comprender asuntos muy complejos.

B. T. A., Brasil

La fiebre de la lotería Sus artículos sobre ‘La fiebre de la lotería’ (8 de mayo de 1991) me hicieron recordar a algunos amigos aficionados a los juegos de azar que tuve antes de ser cristiano. Uno acabó en prisión por culpa del juego acusado de falsificación, y al otro le dieron tal paliza unos estafadores por no pagar un préstamo, que se quedó paralítico. Desde luego, los juegos de azar arruinan la vida de la gente.

R. B., Estados Unidos

Cámaras No hace mucho compré una cámara fotográfica con varias prestaciones, como la de poder ajustar la abertura del objetivo y cambiar las velocidades de obturación, pero me costaba entender el manual de instrucciones. Su artículo “Hermosos recuerdos con solo pulsar un botón” (8 de julio de 1991) contestó mis preguntas. Gracias por explicar temas técnicos de una forma tan fácil de entender.

S. H., Japón

Hospitalidad japonesa Me encantó el artículo “Una velada en un hogar japonés” (22 de abril de 1991). Me da mucho miedo volar y eso me impide que haga viajes. Pero su artículo estaba redactado de una forma tan agradable y vívida, que me permitió viajar en mi imaginación sin tener que volar.

K. R., Estados Unidos

Conjuntos de rock Les escribo con respecto a su artículo “Ponen música a las obscenidades” (8 de marzo de 1991). La primera frase dice que “la sagrada misión de los conjuntos de rock [es] ofender a [los] padres”. Conozco muchos conjuntos populares de rock que tocan música buena y positiva. Quizás debieron aclarar que se referían a “ciertos” conjuntos de rock.

L. H., Estados Unidos

En el artículo no condenábamos toda la música moderna. La frase en cuestión era una cita directa de la revista “U.S.News & World Report”. Unas líneas más adelante se dijo que esos conjuntos en particular estaban “lejos de ser famosos”. También dijimos que “parte” de la música de hoy —no toda— era censurable.—La dirección.