Aprenden de las arañas
¿SE ESTREMECE usted al ver una araña? Hasta los que reaccionamos así probablemente nos habremos maravillado alguna vez —si bien a pesar nuestro— de la elegante simetría de una tela de araña. La mayoría habremos oído decir también que la tela de araña es una maravilla de la ingeniería. Pero ¿qué puede decirse de la seda con que se elabora?
Las sedas que producen los gusanos de seda y algunos arácnidos e insectos han intrigado por tiempo a científicos e ingenieros. Christopher Viney, profesor adjunto de bioingeniería y metalúrgico de la universidad de Washington (E.U.A.), ha efectuado un estudio detallado sobre la araña tejedora Nephila clavipes. Según el periódico The Globe and Mail de Toronto (Canadá), ha descubierto que uno de los cinco tipos de seda que produce dicha araña es más fuerte que el acero; de hecho, es diez veces más resistente que una fortísima fibra sintética llamada Kevlar que se utiliza para chalecos antibalas, cascos de barcos y vehículos blindados.
Unos científicos militares estadounidenses han conseguido reproducir la composición química de la fibroína, la proteína de la que está hecha la seda de esta araña. Pero descubrieron que lo que confiere a dicha seda sus sobresalientes propiedades no es tan solo su composición química, sino la forma en que la araña hila esa sustancia. Por lo visto, cuando está en las hileras de la araña, la seda se encuentra en estado de cristal líquido. Sus moléculas forman largas cadenas llamadas polímeros que poseen una gran resistencia a la tracción. Aun así, Christopher Viney confía en que, con un equipo especial para elaborar la fibra, en un futuro los científicos también aprenderán a imitar esta obra maestra.
“La arañas todavía nos aventajan”, dijo Viney a The Globe and Mail, pero añadió: “¿Quién sabe? Tal vez podamos mejorar su técnica”. Tal vez, o tal vez no. De todas formas, el crédito por haber diseñado el modelo original siempre lo tendrá una única Fuente, Aquel que creó todas las cosas: Jehová. (Revelación 4:11.)