Observando el mundo
Erratas en la Biblia
“En los siglos XVII y XVIII era bastante común que las Biblias tuvieran errores de imprenta —comenta la revista Bible Review—, pero eso no significa que tales errores se tomaran a la ligera.” Por ejemplo, durante el reinado de Carlos I de Inglaterra se publicó una Biblia que llegó a conocerse por el nombre de Biblia del Necio. En el Salmo 14, los impresores cambiaron por equivocación una palabra, de modo que el primer versículo decía algo así como: “Dijo el necio en su corazón: Hay Dios”. Por dicha errata hubo que pagar una multa de 3.000 libras. La compañía Barker and Lucas quebró en 1631 tras aplicársele una multa de 300 libras por omitir una palabra en su versión de la Biblia, la llamada Biblia Adúltera, pues esta decía: “Cometerás adulterio”. Algo similar sucedió con la Biblia de Pecar Más, de 1716. Debido a una transposición de letras en el pasaje donde Jesús sana a un hombre y le dice que no peque más, esa Biblia le presenta diciéndole que debe pecar más. Luego está la Biblia del Vinagre, publicada en 1717. El encabezamiento del capítulo 20 de Lucas dice: “La parábola del vinagre”, en lugar de: “La parábola de la viña”.
Policías en patines
A fin de ponerse más en contacto con la gente de su vecindario, algunos policías de Norteamérica utilizan patines en línea. También se está generalizando el patrullar a pie, a caballo y en bicicleta, informa The Toronto Star. Chicago, Miami y Montreal son algunas de las grandes ciudades en las que se puede ver a policías en patines. Uno de los primeros en utilizar este medio de locomoción, el sargento Bill Johnston, de la policía de Fort Lauderdale (Florida, E.U.A.), dice: “Ha recibido una total aceptación desde el mismo principio. El ir en patines hace que uno se sienta más orientado hacia el público, lo hace más abordable”. The Toronto Star señala que “desplazarse en patines tiene sus ventajas, como por ejemplo, la de sorprender a los ladrones de automóviles en los estacionamientos”.
Peces con brújula
¿Cómo se orienta la trucha arco iris? Unos biólogos neozelandeses han descubierto que tiene “una brújula magnética en el hocico”, dice la revista New Scientist. Un buen número de aves y reptiles, así como algunos mamíferos, pueden orientarse con el campo magnético terrestre. Pero los científicos nunca habían localizado células que detectaran el norte, células que, a su entender, contienen un mineral magnético denominado magnetita. En el caso de la trucha arco iris, los investigadores de la Universidad de Auckland descubrieron en la cara del pez una fibra nerviosa que emite impulsos al verse expuesta a un campo magnético. Siguiendo la trayectoria de dicha fibra, llegaron al hocico del pez, donde encontraron células nerviosas que contienen magnetita.
Violencia futbolística
La intensa rivalidad entre los diversos equipos que participaron el año pasado en el Campeonato Mundial de Fútbol motivó celebraciones que con frecuencia terminaron de forma violenta. En México se necesitaron más de mil quinientos policías para controlar a los hinchas del equipo nacional y, según informes de El Universal, periódico de dicho país, se llevaron a cabo más de doscientas detenciones. Un petardo lanzado durante el tumulto explotó en la cara de un joven hincha y le destrozó parte del cráneo. En la Argentina, Bélgica y Brasil, las celebraciones también han degenerado y, como consecuencia, se han producido lesiones y arrestos. El periódico Excelsior, de Ciudad de México, dice que en Francia se arrestó a unas mil personas por actos relacionados con las competiciones del Mundial, y a 1.586 se les prohibió entrar de nuevo en el país.
Las manos y la salud
“Cuando una persona estornuda y se cubre la boca con la mano o se suena la nariz, debe lavarse las manos antes de tocar un teléfono o el pomo de una puerta”, dice el periódico canadiense The Medical Post. El mencionado rotativo citó de la Asociación Estadounidense para Profesionales en Control de Infecciones y Epidemiología, la cual dice que “el 80% de las infecciones comunes se transmiten directamente por las manos y el contacto físico, no por el aire”. La doctora Audrey Karlinsky, de la Universidad de Toronto (Canadá), recomienda lavarse las manos con frecuencia y enjabonárselas “durante diez o quince segundos, sin olvidarse de frotar entre los dedos y debajo de las uñas”. Después aconseja que se enjuaguen las manos con agua caliente y se utilice una toalla de papel para cerrar el grifo. ¿Cómo conseguir que los niños dediquen todo ese tiempo? Hágales recitar el alfabeto entero mientras se enjabonan, sugiere la doctora Karlinsky.
Un nuevo virus en la sangre
Tras el descubrimiento de un nuevo virus en la sangre de donantes europeos, las autoridades sanitarias de Francia han decidido establecer una “vigilancia científica permanente”, informa el periódico francés Le Monde. La primera vez que se identificó el agente infeccioso, conocido como virus de transmisión sanguínea (TTV, por sus siglas en inglés), fue en 1997, en Japón, donde el 10% de los donantes de sangre están infectados. Los médicos todavía desconocen la función patológica exacta de dicho virus, pero unos estudios llevados a cabo en Gran Bretaña revelaron la presencia del TTV en el 25% de un grupo de enfermos que padecían graves infecciones hepáticas de causa desconocida. De momento, no existe ningún proceso de detección estandarizado para este virus, declara Le Monde.
Primera medición de un sismo solar
Al analizar las imágenes tomadas por el observatorio espacial Soho, de la Agencia Europea del Espacio, los investigadores Valentina Zharkova (de la Universidad de Glasgow [Escocia, Gran Bretaña]) y Alexander Kosovichev (de la Universidad de Stanford [California, E.U.A.]) detectaron por vez primera un sismo solar. “Se produjo tras una moderada erupción —una explosión de hidrógeno y helio por encima de la superficie solar— detectada en julio de 1996”, informa el periódico londinense The Daily Telegraph. El sismo, con una magnitud de 11,3, produjo ondas de tres kilómetros de altura y ondulaciones similares a las que se observan cuando se arroja una piedra a un estanque. Dichas ondulaciones se desplazaron hasta 120.000 kilómetros por la superficie solar alcanzando una velocidad de 400.000 kilómetros por hora. El sismo solar liberó aproximadamente la misma cantidad de energía que consume Estados Unidos en veinte años y 40.000 veces la energía sísmica del terremoto de San Francisco de 1906, que midió 8,3 en la escala de Richter.
La alegría de la casa, pero mucho trabajo
“Muchas parejas jóvenes subestiman la carga de trabajo adicional que conlleva un niño, lo que a menudo produce riñas matrimoniales tras el nacimiento de la criatura”, dice el periódico alemán Nassauische Neue Presse. Un estudio llevado a cabo en la Universidad de Groninga (Países Bajos), indicó que las madres jóvenes suelen sentirse insatisfechas debido a los cambios radicales que ocasiona el nacimiento de un hijo. Como promedio, las madres necesitan para el niño cuarenta horas más cada semana; de estas, seis corresponden a las tareas añadidas de limpiar, lavar la ropa y cocinar, y treinta y cuatro a la atención directa de la criatura. En el caso del padre, las únicas actividades adicionales fueron las diecisiete horas dedicadas directamente al niño. Según el informe, la tensión matrimonial “no es tanto una cuestión de quién cambia los pañales o se levanta por la noche para dar el biberón a la criatura, sino, más bien, de cómo repartirse las tareas domésticas”.
Televisión y accidentes
Los niños que pasan mucho tiempo mirando la televisión pueden sentirse inclinados a tratar de imitar las peligrosas proezas que ven en ella. Según un estudio realizado por el doctor e investigador español José Umberos Fernández, las probabilidades de lesionarse aumentaban con cada hora que el niño pasaba frente al televisor. Fernández opina que esto se debe a que la televisión presenta la realidad de una forma distorsionada. ¿Qué pueden hacer los padres para contrarrestar tal efecto? El periódico griego To Vima dice que los padres deberían escoger los programas que ven sus hijos y ayudarles a tener un “ojo crítico y exigente”, en lugar de aceptar como realidad todo lo que ven.
Los niños y la cafeína
Aunque los niños no tomen café ni té, las bebidas carbonatadas y de chocolate que muchos consumen les aportan suficiente cafeína como para experimentar síndrome de abstinencia cuando dejan de tomarlas, dice The New York Times. Un equipo de psiquiatras encabezado por la doctora Gail A. Bernstein, de la Facultad de Medicina de la Universidad de Minnesota, se centró en los efectos de la cafeína en la capacidad de concentración de treinta niños en edad escolar. Se aumentó el consumo de cafeína al equivalente de beber tres latas de refresco de cola diarias. Al cabo de una semana, los niños no tomaron cafeína durante un día entero. En ese día y durante la semana que le siguió, la capacidad de concentración de los alumnos disminuyó drásticamente. “La mejor manera de evitar semejante fenómeno —comentaron los investigadores— es no permitir que los niños consuman demasiadas bebidas con cafeína.”