Donde ella halla refrigerio
✔ En una carta “A los directores” publicada recientemente por la revista Commonweal, una señora dijo: “¿Qué hay de los testigos de Jehová como un ejemplo de iglesia vigorosa y creciente? Se dice que 80 por ciento de sus miembros eran católicos.
“Gran parte del secreto de su buen éxito puede hallarse leyendo sus publicaciones humildes, La Atalaya y ¡Despertad! La primera estudia y considera la Biblia, y la segunda presenta temas de interés general.
“¿A qué se debe pues que, después de leer esas revistas, con sus dibujos algo anticuados y su papel barato, siento refrigerio, me siento estimulada y de nuevo capaz de hacerle frente a la vida (en mi caso, la crianza de siete hijos y dos hijas)?
“¿A qué se debe que después de leer ciertas publicaciones católicas me siento cansada, abatida y un poco aburrida con la religión? Después de desenredar la telaraña de palabras eruditas que algunos escritores tejen en torno de un pensamiento insignificante, solo quisiera haber empleado mi energía en alguna tarea útil de la casa.
“Creo que la respuesta se halla en Mateo, capítulo 18. ‘A menos que cambien y se hagan como niñitos, no entrarán en el reino de los cielos.’
“Los escritores anónimos de las revistas de los Testigos escriben de una manera clara y sencilla. Su objetivo es compartir la buena palabra del Evangelio y estimularlo a uno a recurrir a la fuente de su sabiduría. Esto estimula, instruye y consuela. Está libre de afectación.
“Yo misma no soy testigo de Jehová, pero es de admirar el que los católicos están comenzando a mirar cara a cara a sus compañeros creyentes en Cristo y están viendo unas cuantas virtudes allí.”
Como Jesucristo mismo dijo: ‘Vengan a mí, todos los que se afanan y están cargados, . . . y hallarán refrigerio para sus almas. Porque mi yugo es suave y mi carga ligera.”—Mat. 11:28-30.