Ponderando las noticias
Las iglesias de Nueva York en dificultad
● Por mucho tiempo se conoció a Brooklyn como la “ciudad de las iglesias.” Sin embargo, a principios del año pasado “representantes de 30 iglesias de Brooklyn se reunieron para una conferencia sobre supervivencia,” según el “Times” de Nueva York. Las estrategias de supervivencia que se propusieron fueron: Primero, fusiones eclesiásticas dentro de la misma confesión religiosa; segundo, fusiones entre confesiones; y, como “recurso final,” cerrar las iglesias. Al otro lado del río, en Manhattan, la Iglesia Presbiteriana Central, en otro tiempo un próspero centro del protestantismo, decidió adoptar el “recurso final.” El número de miembros había disminuido hasta solo 33 personas.
En las comunidades de personas de color e hispánicas de Nueva York, a las iglesias les va algo mejor, pero no sin que tengan sus problemas. El pastor de una de las más grandes iglesias protestantes de personas de color dijo: “Existimos en una comunidad en crisis.” Aunque la mayoría de las iglesias de personas de color son bautistas, se reconoce que la cooperación entre ellas no es óptima. Como lo expresa el artículo del “Times,” la iglesia protestante de término medio de personas de color es “ferozmente independiente, y a veces hasta compite con otras de la misma zona por miembros y posición.” El pastor de la “Iglesia del Maestro” de Harlem señala a una debilidad principal en las iglesias de Nueva York cuando dice: “En el pasado, la iglesia se ha . . . identificado demasiado con el mundo. La iglesia no le ha demostrado su importancia a la ciudad... si todas las iglesias desaparecieran, ¿le importaría a alguien?”
Un “amortiguador” contra el deterioro
● En contraste con lo susodicho, “The Search,” un periódico publicado para abogados por una compañía de seguros de los EE. UU., tiene unos comentarios interesantes sobre la compra, por los testigos de Jehová, del Hotel Towers, una estructura de quince pisos en Brooklyn. Este edificio fue comprado a principios del año pasado debido a necesidades que surgieron por la expansión que ha sido resultado del aumento mundial de los testigos de Jehová. “The Search” hace notar primero el deterioro gradual que se ve en la zona de Brooklyn Heights, en la cual algunos hoteles han llegado a ser asilos para viciosos y holgazanes sin rumbo. La nueva tenencia del Hotel Towers ha “infundido una nueva calidad,” dijo. “El local ha sido reparado y conservado por obreros peritos, con nitidez, orden y dignidad.”
Los nuevos residentes del edificio, los testigos de Jehová, también han “contribuido una nueva dimensión a la seguridad y el bienestar de la comunidad,” continúa el artículo. “La prensa pública y otros voceros se han expresado en cuanto a la presencia de ‘estas personas de apariencia saludable, decentes, morales, de altos valores,’ señalando que obran como amortiguador contra las indeseables condiciones de cambio que van desarrollándose en el vecindario. Además, personas de edad avanzada han indicado que su presencia les comunica un sentimiento de seguridad.”
La iglesia hundiéndose en Francia
● En Francia, donde el 85 por ciento de la gente son católicos, una nueva encuesta revela que desde 1971 el asistir con regularidad a la misa ha menguado en más de una cuarta parte. En ese año un 22 por ciento dijo que asistía con regularidad; solo el 16 por ciento dice que asiste ahora. La encuesta también revela que solo aproximadamente la tercera parte de los católicos franceses concordó en que Jesús “realmente está vivo” hoy día, mientras que las otras dos terceras partes o no concordaron en ello o se abstuvieron de opinar. Llamando “perturbadores” los resultados de la encuesta, el arzobispo Robert Coffy, presidente del comité de obispos franceses sobre el curato sacramental, señaló a una fuente principal del problema, al decir: “Se tiene que reconocer que nosotros sin duda somos responsables... nosotros los obispos, los sacerdotes y también los activistas (religiosos).” Cristo Jesús dijo que al árbol se le conoce por sus frutos... si los frutos no son buenos, tampoco puede serlo el árbol. (Mat. 7:16-20) ¿Qué muestra el fruto de la Iglesia en Francia?