BIBLIOTECA EN LÍNEA Watchtower
Watchtower
BIBLIOTECA EN LÍNEA
español
  • BIBLIA
  • PUBLICACIONES
  • REUNIONES
  • w79 15/12 págs. 26-27
  • Jehová bendice a los que se esfuerzan vigorosamente

No hay ningún video disponible para este elemento seleccionado.

Lo sentimos, hubo un error al cargar el video.

  • Jehová bendice a los que se esfuerzan vigorosamente
  • La Atalaya. Anunciando el Reino de Jehová 1979
  • Información relacionada
  • “Esfuércense vigorosamente”
    La Atalaya. Anunciando el Reino de Jehová 1986
  • Ella quiso ayudar
    La Atalaya. Anunciando el Reino de Jehová 2008
  • “Cíñanse con humildad de mente”
    La Atalaya. Anunciando el Reino de Jehová 1974
  • El guerrero y la niña
    Lecciones que aprendo de la Biblia
Ver más
La Atalaya. Anunciando el Reino de Jehová 1979
w79 15/12 págs. 26-27

Jehová bendice a los que se esfuerzan vigorosamente

“Esfuércense vigorosamente por entrar por la puerta angosta, porque muchos. . .tratarán de entrar mas no podrán.”—Lucas 13:24.

LA TENDENCIA de los humanos imperfectos es seguir el proceder más fácil. A menudo la gente desea mucho de la vida, pero nunca realiza sus deseos debido a que no esta dispuesta a hacer el esfuerzo necesario. Algunos quedan satisfechos con simplemente soñar y quizás de vez en cuando jugar a la lotería, con la esperanza de obtener el medio de hacer realidad sus sueños. Muchos obreros se envuelven en campañas para obtener mayor sueldo y una semana de trabajo más corta. Más dinero por menos esfuerzo es el ideal de la mayor parte de la gente hoy. Pero algunas personas comprenden que hay algo de mucho más valor que la riqueza material. ¿Qué es?

¿Qué pudiera ser de mayor valor para cualquiera de nosotros que la aprobación divina, que conduce a la salvación? ¿Pudiera esperarse que obtuviéramos esa aprobación sin esfuerzo alguno? Aunque Dios ha hecho todo lo necesario para salvar a la humanidad, ¿significa esto que los hombres recibirán automáticamente la salvación, sin esfuerzo alguno por parte de ellos? (Tito 3:4-7) Jesucristo proveyó la respuesta cuando contestó la pregunta: “¿Son pocos los que se salvan?” Dijo: “Esfuércense vigorosamente por entrar por la puerta angosta, porque muchos, les digo, tratarán de entrar mas no podrán.”—Luc. 13:23, 24.

Por eso, ¿está usted dispuesto a esforzarse por vivir en el justo nuevo orden de Dios? Muchas personas disfrutarían de la vida en una Tierra que estuviera libre de enfermedades y muerte. Pero cuando se anima a esas mismas personas a estudiar la Biblia, a menudo rehúsan hacerlo y dan excusas poco convincentes. Y el que continuaran renuentes a esforzarse genuinamente por llegar a conocer a Dios pudiera impedir que obtuvieran la aprobación divina. Todos los que desean la aprobación de Jehová Dios deben estar dispuestos a ‘esforzarse vigorosamente’ por progresar como siervos de Dios, llegar a conocer mejor al Creador y vivir en armonía con el conocimiento que tienen de él. Él, por supuesto, los ayudará por medio de su espíritu, siempre y cuando se dejen guiar por él.

En realidad, si la persona no se esfuerza pudiera perder muchas oportunidades en muchas situaciones de la vida. Proverbios 26:15 nos da un ejemplo extremo de esto, al decir: “El perezoso ha escondido su mano en el tazón de banquete; se ha fatigado demasiado para volver a llevarla a su boca.” En lo que se refiere a alimento espiritual, a menudo la situación es muy parecida a la que describe este proverbio. Mucha gente que tiene la Biblia en su hogar se encuentra espiritualmente hambrienta simplemente porque no hace el esfuerzo de sacar la Biblia del estante y leerla.

Además de luchar con la tendencia a la pereza, si la persona quiere esforzarse tiene que combatir el pensar negativo. Por ejemplo, si la persona piensa que es demasiado difícil visitar a la gente en sus hogares para compartir con la gente el mensaje de la Biblia, esto la disuade hasta de tratar. Sin embargo, frecuentemente pudiera suceder que, si la persona lo intentara, se diera cuenta de que podría realizar tal tarea, con la ayuda del espíritu de Dios.

Por otra parte, a veces la sencillez misma de una recomendación hace que la gente dude de su valor. Pudiera ser que sencillamente no puedan ver que tenga sentido. Naamán fue un hombre que casi cayó en esa trampa. Había bajado a Israel con la esperanza de ser curado de lepra. Puesto que era un hombre prominente, esperaba que el profeta Eliseo lo tratara con consideración especial. Pero Eliseo ni siquiera lo vio en persona; simplemente dio a su siervo la instrucción de decirle a Naamán que se bañara siete veces en el río Jordán. Para Naamán era cosa que estaba por debajo de su dignidad el bañarse en el fangoso Jordán. Él había esperado una curación espectacular. Si Naamán no hubiera escuchado el consejo de sus siervos, hubiera vuelto a Damasco leproso como estaba. Pero cumplió con las instrucciones sencillas de Eliseo y fue sanado.—2 Rey. 5:9-14.

Por otra parte, puede que el temor a desagradar a alguien o a recibir una respuesta negativa de personas que están en autoridad impida que la gente actúe positivamente. Nehemías, que vivió para el quinto siglo a. de la E.C., es excelente ejemplo de alguien que no permitió que el temor lo restringiera. Aunque ocupaba la posición de confianza de copero en la corte del rey Artajerjes, Nehemías no permitió que pensamientos en el sentido de que era posible que el rey rechazara su petición o que ésta le desagradara le impusieran silencio. Cuando surgió la oportunidad, Nehemías oro a Jehová y luego respetuosamente dio a conocer su petición. El rey no solo otorgó lo que se le pidió, sino que también suministró a Nehemías cartas que autorizaban el viaje de vuelta de Nehemías a Jerusalén y el uso de maderos del bosque real para reconstruir los muros y las puertas de Jerusalén.—Neh. 2:1-8.

¿Qué hay de nosotros? Puede que haya cristianos que teman pedir tiempo libre del trabajo para asistir a asambleas donde se reunirían con sus compañeros de creencia. Aunque quizás obtendrían las vacaciones si las pidieran, el temor a que se rechace su petición hace que salgan perdiendo en cuanto a recibir excelente instrucción espiritual. A veces ciertas cristianas disfrutan solamente de la mitad de las reuniones de la congregación porque piensan que sus esposos incrédulos no aprobarían el- que ellas asistieran a todas. Sin embargo, puede ser que algunas nunca hayan preguntado acerca de esto a sus esposos. Pero otras cristianas en circunstancias similares pueden relatar muchas experiencias animadoras porque sí preguntaron. En realidad, en diversos asuntos de la vida, si no pedimos, no recibimos.—Compare con Mateo 7:7-11.

Sí, si queremos la bendición de Jehová, es necesario que nos esforcemos vigorosamente. Con este fin, resista toda tendencia a la pereza, no permita que la magnitud o dificultad de una tarea, o la aparente sencillez de ésta, lo desanimen, y no se refrene de pedir algo por temor a recibir una respuesta negativa. En lo que toca a la actividad que se relaciona con la adoración verdadera, usted puede tener éxito con la ayuda del espíritu de Dios.

    Publicaciones en español (1950-2025)
    Cerrar sesión
    Iniciar sesión
    • español
    • Compartir
    • Configuración
    • Copyright © 2025 Watch Tower Bible and Tract Society of Pennsylvania
    • Condiciones de uso
    • Política de privacidad
    • Configuración de privacidad
    • JW.ORG
    • Iniciar sesión
    Compartir