Ponderando las noticias
Predicciones del fin
Algo que es muy común por toda Francia últimamente es otro libro acerca de las predicciones sobre el día del fin hechas por Nostradamus... una nueva traducción del francés del siglo dieciséis al francés moderno hecha con la ayuda de un ordenador o computadora. Para mediados del verano pasado se habían vendido 232.000 ejemplares de este libro de 565 páginas.
¿Por qué este súbito oleaje de interés? Una de las predicciones dice que un papa sería asesinado “cuando florezca la rosa.” Se dio la interpretación de que esto se cumplió cuando ocurrió el atentado contra la vida del papa Juan Pablo II en mayo pasado después que el Partido Socialista, simbolizado por la rosa, entró en el poder en Francia.
La revista Time explica: “Las predicciones de Nostradamus . . . tienden a ser redescubiertas durante eras históricas caracterizadas por turbulencia... como ahora, cuando muchos europeos occidentales se preocupan por las economías vacilantes y el conflicto entre superpotencias.” Y el semanario francés Le Point dijo: “El temor se está convirtiendo en un mercado. Cien días después de haber llevado al poder a Mitterrand, nuestros ciudadanos están pagando 20 dólares por ejemplar para temblar de horror.”
Este “temor,” sin embargo, es precisamente lo que Jesucristo predijo como parte de la ‘señal de la conclusión del sistema de cosas,’ al decir: “Sobre la tierra angustia de naciones, no conociendo la salida . . . mientras que los hombres desmayan por el temor y la expectativa de las cosas que vienen sobre la tierra habitada.” (Mateo 24:3; Lucas 21:25, 26) Pero añadió: “Mas al comenzar a suceder estas cosas, levántense erguidos y alcen sus cabezas, porque su liberación se acerca.”—Lucas 21:28
“Cómo matar,” en seis tomos
“El hacer muchos libros no tiene fin, y el aplicarse mucho a ellos le es fatigoso a la carne,” escribió el sabio rey Salomón en Eclesiastés 12:12. Lo último en la lista sin fin de libros que fatigan parece ser un juego de seis tomos intitulado “Cómo matar.” En estos tomos se dan detalles en cuanto a cómo matar con garrotes, hachas, cuchillos, veneno, fuego, electricidad, explosivos y armas de fuego, junto con diagramas y dibujos precisos. En la introducción, el escritor dice: “El objeto de este estudio es instruir al lector en las técnicas de quitar otra vida humana, de cerca, y hacerlo bien. Bien puede ser que este libro le sea ofensivo, repugnante, brutal y cruel. Así se supone que sea. Desprecia completamente la vida humana, y mi único consejo al que quiera asesinar es: Mate sin gozo.”
El publicador describe los libros como estrictamente “técnicos. No estimulan la emoción. . . . Es un ejercicio intelectual, una fantasía, un escape.” Cuando se le preguntó si la venta de esta clase de material lo perturba, respondió: “De ninguna manera. Yo no creo que se pudiera probar que estos libros hagan que la gente mate. . . . En nuestra sociedad, nadie puede proscribir la publicación de estos libros, y así exactamente es como debe ser.” Hasta ahora se han vendido entre 30.000 y 40.000 ejemplares.
Censura de seminarios
Recientemente el Vaticano pidió “un estudio o revisión de la condición actual de la formación sacerdotal en los seminarios estadounidenses.” En un informe sobre lo que aparentemente es la primera investigación de esa índole en los E.U.A., el Times de Nueva York dice: el plan “ya ha alarmado a algunos directores de seminarios que creen que el estudio pudiera resultar en un intento por desarraigar el disentimiento y reprimir la libertad académica. . . . El director de un seminario dijo que el esfuerzo era ‘una persecución de brujas.’ . . . Otro educador dijo que aquello era un insulto a la integridad de la educación seminarista estadounidense.”
Según cifras del “Directorio Católico Oficial,” la matrícula en los seminarios católicos estadounidenses ha menguado de 49.000 estudiantes en 1965 al nivel actual de 12.000. Pero el interés principal del Vaticano es “la necesidad de conformidad doctrinal” y “demasiado liberalismo entre algunos teólogos,” señala el informe.
La oposición de los seminaristas y educadores a la investigación es señal reveladora de que la Iglesia Católica, aunque alega para sí sucesión apostólica, no ha dado atención al mandato apostólico que dice: “Que todos hablen de acuerdo, y que no haya divisiones entre ustedes, sino que estén aptamente unidos en la misma mente y en la misma forma de pensar.” (1 Corintios 1:10) La constante mengua en las filas sacerdotales refleja lo que Jesucristo dijo: “Si una casa llega a estar dividida contra sí misma, esa casa no podrá estar en pie.”—Marcos 3:25.