Sirviendo de buena gana
1 En profecía se describe a los siervos de Jehová en este tiempo del fin como personas que se ofrecerían de buena gana. (Sal. 110:3) Sabemos que Jehová siempre se ha sentido complacido con un servicio de toda alma, de buena gana.—2 Cor. 9:7.
2 Pero pudiera preguntarse: ¿Cómo podía Pablo decir: ‘Ay de mí, si no declaro las buenas nuevas,’ y al mismo tiempo llevar a cabo su servicio de buena voluntad?” (1 Cor. 9:16) Pablo sabía lo que Ezequiel 3:18 declara acerca de la seriedad de la responsabilidad de dar advertencia al inicuo. Él sabía que Jehová, por amor a la gente, deseaba que ellos recibieran una advertencia. Pablo ciertamente tenía amor por la gente también, ¿no es cierto? Y de buena gana aceptó el punto de vista de Jehová acerca de predicar las buenas nuevas al mundo de la humanidad pecaminosa.
3 Es estimulador saber que tantos de nuestros hermanos de buena gana han arreglado sus asuntos para servir como precursores temporeros y regulares. Durante el primer mes del año de servicio, 17.010 pudieron servir como precursores regulares; para octubre, 17.824; y para noviembre, 18.687. Es digno de encomio el que más de 30.000 hayan servido como precursores temporeros durante septiembre. ¿Se mencionan estas cifras con la idea de hacerle sentir bajo cierta clase de “compulsión” para servir como precursor aun si sus circunstancias no le permiten hacerlo? No, más bien, como un estímulo, a fin de mostrar lo que otros han podido hacer para aumentar su contribución a la obra de predicar el Reino y hacer discípulos. Apreciamos que muchos tienen familia y otras responsabilidades que atender que tal vez les impidan por ahora servir como precursores temporeros o regulares. (Gál. 6:4; 1 Tim. 5:8) Sin embargo, ¿no es animador saber que tantos de nuestros hermanos han podido aumentar sus privilegios de servicio? ¿Puede usted hacerlo?
4 El ser impulsados por la misma “palabra de Dios” nos hace pensar en modos de poder aumentar nuestros privilegios en el servicio del campo. (Heb. 4:12) Los jovencitos quizás puedan servir como precursores temporeros durante los períodos de las vacaciones escolares. Los cabezas de familia pudieran conseguir tiempo libre del trabajo o usar las noches o los fines de semana para servir como precursores temporeros. El hacer esto exigiría hacer ajustes en el programa normal, como puede apreciarse. Algunos de la familia quizás puedan ayudar a otros miembros de la familia a servir como precursores temporeros durante el mes de abril. Cuando los ancianos y los siervos ministeriales pueden tomar la delantera en el servicio de precursor temporero o regular, la entera congregación se beneficia.
5 Algunos han podido usar el servicio de precursor temporero como un escabel para alcanzar la meta de servir como precursor regular. Si usted va a servir como precursor temporero por varios meses consecutivos, esfuércese por dedicar 100 horas cada mes. (Libro Organización, pág. 139) Esto será útil para determinar si usted puede alcanzar el requisito de horas establecido para los precursores regulares.
6 Durante abril muchos de los que están estudiando habrán progresado hasta el punto en que se les podrá invitar a participar en el ministerio del campo por primera vez. Es posible que los ancianos le pidan que amorosamente ayude a algunos de estos nuevos.
7 A medida que continuamos ‘recibiendo’ tan abundantemente del alimento espiritual que Jehová suministra por medio de su organización, nos sentimos impulsados a compartir estas buenas cosas con otros, ¿no es cierto? (2 Ped. 1:8) De nuestra propia experiencia personal hemos hallado que el dar de buena gana nos trae gran gozo, tal como Jesús dijo que lo haría.—Hech. 20:35.