Presentando las buenas nuevas... usando la Biblia en nuestras introducciones
1 Al predicar de casa en casa, ¿cuál es la impresión principal que le gustaría causar? ¿No sería la impresión de que usted es un discípulo de Jesús, debido a que al hablar usa la Palabra de Dios? Pero, para que una persona sea reconocida como discípulo de Jesucristo, es razonable que esté equipada y lista para usar la Biblia en su actividad de predicar y enseñar. Por supuesto, para usar la Biblia eficazmente se requiere preparación, pero es sorprendente que no es más difícil que el ir a las puertas y solamente hacer una breve presentación de las revistas. Por ejemplo: ¿Ha pensado usted alguna vez en ir a una puerta, con la Biblia en la mano, y decir algo así?
2 “Hola, me gustaría compartir con usted un pensamiento bíblico acerca de la promesa de tiempos mejores para la gente. Está tomado del libro de Revelación (21:4), que dice de Dios: ‘Él limpiará toda lágrima de sus ojos y la muerte no será más.’” Ahí tiene una introducción breve, pero directa, y usted ha leído de la Palabra de Dios para el provecho del amo de casa. De ahí usted puede proceder directamente a presentar su oferta, sea ésta revistas, libros o la Biblia, o usted puede pasar a una presentación más larga si el amo de casa lo permite. La cosa principal es que usted se está dando a conocer claramente ante el amo de casa como un discípulo de Jesús debido a que usa la Biblia al hablar.
3 Esta es otra introducción breve que quizás le parezca eficaz: “Buenos días, me alegro de hallarlo en casa, pues le traigo un mensaje breve de su propia Biblia, que sé que le traerá consuelo en estos tiempos angustiosos. Está aquí en Proverbios 29:2.” Entonces lea este texto breve y prosiga a hacer su oferta o continúe con su sermón. No es necesario leer un texto bíblico largo. A veces solamente una parte de un versículo —la parte que usted desea grabar en la mente del amo de casa— es todo lo que se necesita, y entonces prosiga a presentar su oferta.
4 ¡Cuán refrescante puede ser esto para los que escuchen a las puertas! Y cuando usted se marche ellos recordarán que un discípulo del Señor Jesús estuvo en su hogar predicando de la Palabra de Dios, la Biblia. Si pone en práctica este método, estamos seguros de que lo disfrutará cabalmente.
Exprese amor a sus hermanos de maneras prácticas.