Mejoremos nuestra aptitud docente... mediante el llegar al corazón de los estudiantes
1 Jesús enseñó de tal modo que llegaba al corazón de aquellos a quienes instruía. Al explicar la parábola del sembrador, mostró que solo los que ‘captan el sentido de la palabra’ se sienten movidos a obrar. (Lea Mateo 13:18, 23, 51, 52.) Por eso, a medida que enseñamos, debemos interesarnos en llegar al corazón de los estudiantes. Queremos edificar en ellos aprecio por Jehová, su Hijo y la organización cristiana. Cuando enseñamos, tenemos que imitar los métodos docentes de Jesús. Esto exige que, al conducir estudios bíblicos, tomemos el tiempo necesario para ayudar a los estudiantes a reflexionar sobre los puntos que se consideran.
2 En el día del Pentecostés de 33 E.C., la enseñanza del apóstol Pedro llegó al corazón de las 3.000 personas que se bautizaron entonces. Él los ayudó a razonar sobre las profecías bíblicas que tenían que ver con la muerte y resurrección de Jesús, para que pudieran apreciar los papeles que Jehová y Jesucristo desempeñaban en lo que había sucedido (Hech. 2:1-36). La Biblia nos informa que los que creyeron se sintieron “heridos en el corazón” y que “abrazaron su palabra de buena gana” (Hech. 2:37, 41). ¿Cómo podemos enseñar hoy día de modo que lleguemos al corazón de la gente y la ayudemos a desarrollar semejante amor a la verdad?
TÓMESE EL TIEMPO PARA LLEGAR AL CORAZÓN
3 Las personas con quienes conducimos estudios bíblicos deben adquirir más que solo datos acerca de la Biblia y de los acontecimientos mundiales. Es necesario que sientan algo por lo que están aprendiendo. Es preciso que las ayudemos a razonar sobre lo que aprenden (Hech. 17:2, 3). Es preciso ayudarlas a que entiendan cómo son Jehová y Jesús, y lo que ellos han hecho por nosotros. Tienen que entender que Jehová ha mostrado amor, paciencia y misericordia en todos sus tratos con la humanidad. Es imprescindible que comprendan y respeten Su poder y que estén de acuerdo con sus justos requisitos. Es necesario que reconozcan el valor del grandioso sacrificio de Jesús y que se den cuenta de lo sabio del proceder que él siguió. Así podrán llegar a tener una relación íntima y personal con Jehová y con Jesús.
4 Los libros Vivir para siempre y Unidos en la adoración tienen el propósito de ayudarnos a llegar al corazón de nuestros estudiantes y edificar en ellos aprecio de corazón. Note cómo los párrafos 9 y 10 de la página 10 del libro Vivir para siempre ayudan al estudiante a razonar sobre el hecho de que un Dios amoroso no crearía a los humanos con el deseo de vivir para siempre y entonces les negaría la realización de ese deseo. Por todo el capítulo 4 del libro Vivir para siempre hay ejemplos que edifican aprecio de corazón. Note particularmente los ejemplos que se dan en los párrafos 5, 12 y 13.
5 Por todo el libro Unidos en la adoración hallamos preguntas que van dirigidas al corazón del estudiante. Muy buenos ejemplos de esto se hallan en las páginas 32 y 33. Estas preguntas inducen al estudiante a pensar y a examinar cuidadosamente los motivos de su corazón. Lo ayudan a reflexionar sobre sus sentimientos para con Jehová, Jesús y la organización. Poco a poco el estudiante se va dando cuenta de cuál es el camino que debe seguir para agradar a Jehová y obtener bendiciones procedentes de Él.
PREPÁRESE BIEN
6 Así, a medida que conducimos nuestros estudios bíblicos, preparémonos bien y dediquemos suficiente tiempo a razonar con nuestros estudiantes sobre la información que se presenta. De esta manera edificaremos en el corazón de ellos un sentimiento de afecto para con Jehová, Jesús y la organización. Si tenemos éxito en llegar al corazón de nuestros estudiantes, ellos se sentirán movidos a tomar una línea de acción semejante a la que tomaron las 3.000 personas que se bautizaron el día del Pentecostés del 33 E.C. (Hech. 2:41-46). Así se los ayudará a resistir la influencia de Satanás y los esfuerzos de éste por extraviarlos. (Mat. 7:24-27.)