página 134? Es fácil de observar que no solamente los hermanos que están hablando desde la plataforma sino que todos los que están presentes consideran, por su conducta y su modo de vestir, que las reuniones son ocasiones especiales.

Reuniones de servicio adecuadas para su congregación

¹ Isaías 54:13 promete: “Y todos tus hijos serán personas enseñadas por Jehová, y la paz de tus hijos será abundante.” La reunión de servicio es uno de los arreglos por medio de los cuales recibimos esta enseñanza. Todos en la congregación pueden contribuir a hacer de la hora dedicada para la reunión de servicio una hora deleitable y provechosa, un buen éxito.

² Casi todas las reuniones de servicio se apegan al tiempo programado y al material que se bosqueja en el Ministerio del Reino. No obstante, de vez en cuando esa información pudiera aplicar diferentemente en varias congregaciones y por eso los ancianos y los siervos ministeriales que presentan la información deben hacerlo con flexibilidad. Por ejemplo, el artículo intitulado “Territorio desafiante, pero remunerador” en el Ministerio del Reino de agosto de 1973 aplicaba principalmente a las grandes ciudades. Por lo tanto, los hermanos en pueblos pequeños y zonas rurales, aunque aplicaron esas sugerencias a sus zonas locales, no necesitaron dedicar tanto tiempo para abarcar el material.

³ Cuando la información en un artículo del Ministerio del Reino sí aplica directamente a la congregación, entonces la persona responsable por la presentación debe preparar el material cabalmente para que el auditorio entienda plenamente y aprecie cómo éste aplica en la localidad. Evidentemente en algunos casos la persona asignada llega a la conclusión de que todos en la congregación han leído la información y están cabalmente familiarizados con ella y por eso busca material adicional a fin de presentar su propio material “fresco” y no “recomponer” lo que está en el Ministerio del Reino. De vez en cuando esto se hace por medio de ‘estirar’ la introducción. Pero sería más provechoso si uno dedica el tiempo para considerar el artículo asignado en sí y para ayudar a la congregación a ver cómo éste le aplica.

⁴ Algunos han hecho preguntas con respecto a cuál es el mejor modo de conducir las consideraciones de los temas bíblicos que de vez en cuando se bosquejan bajo “Sus reuniones de servicio.” Han pensado que hay demasiado material y en algunos casos solamente han podido abarcar la mitad. Por ejemplo, en el bosquejo “¿Cuán bien conoce usted la organización?” en el Ministerio del Reino de noviembre hay unas quince referencias bíblicas además de referencias a publicaciones. En realidad el presidente debe hacer arreglos para una consideración cabal de todo el tema. No es preciso buscar todos los textos y leerlos durante la consideración. Lo mismo es cierto de las referencias a las publicaciones. Estas se incluyen para que los publicadores puedan buscarlas en el hogar a medida que se preparan y así puedan presentar estas ideas en la discusión, solamente de un modo breve. Así es que por lo general se puede asignar algún tiempo para cada pregunta, escoger textos claves por adelantado y leerlos, manteniendo a buen paso la consideración a fin de que la congregación se beneficie debido a que todos los puntos se abarcan en una consideración equilibrada.

⁵ Se ha hecho la pregunta en cuanto a cómo un hermano asignado puede concluir adecuadamente la reunión de servicio cuando solo se apartan diez minutos para tanto los “Comentarios de conclusión” como “La carta de la Sucursal.” Él tiene que decidir cómo distribuir el tiempo, pero en este caso probablemente se harían solo unas pocas declaraciones breves de “La carta de la Sucursal.” Él es responsable de asegurarse de que la reunión de servicio se termine a tiempo.

⁶ ¿Quién debe elegirse para demostrar las diferentes presentaciones bíblicas y las ofertas de literatura o de otro modo mostrar cómo se pudiera presentar las buenas nuevas? Por lo general debe pedirse a los publicadores más experimentados y capacitados que hagan esto. Además, el presidente debe instruirlos en cuanto a su asignación y debe ensayar con ellos. Por lo general, aunque algunos pueden usarse como amos de casa, lo mejor es no hacer que publicadores nuevos y sin experiencia demuestren cómo debe hacerse la obra sencillamente porque deseamos que tengan oportunidades de estar en la plataforma. Ellos tendrán muchas oportunidades de obtener experiencia por medio de comentar en las reuniones, pronunciar discursos estudiantiles en la escuela del ministerio y participar en el servicio del campo.

⁷ Si de vez en cuando las reuniones de servicio no parecen ser tan interesantes e instructivas como pudieran serlo, sería bueno que el superintendente presidente y, de hecho, el cuerpo de ancianos, consideraran el asunto para ver si sería útil aplicar algunas de la ideas susodichas. Tanto los que están en el auditorio como los que están en la plataforma, con previsión y preparación, pueden contribuir a hacer de las reuniones de servicio ocasiones edificantes y gozosas.

La caja de preguntas

● ¿Quién puede celebrar bodas y pronunciar discursos de funeral?

Cualquier hermano dedicado puede conducir bodas y funerales según lo permita la ley. Si la ley local pone alguna restricción o exige que se llenen algunos requisitos, éstos deben observarse cuidadosamente. En lo que toca a elegir a alguien para conducir en una boda o funeral, esto es un asunto personal que los individuos o la familia envuelta deben determinar. Puesto que las bodas y los funerales no se consideran como discursos públicos, el nombramiento como anciano o siervo ministerial no sería un requisito para desempeñar esos servicios. Si la ceremonia va a efectuarse en un Salón del Reino, entonces, por supuesto, debe obtenerse permiso del comité de servicio de la congregación. Se pudiera permitir que un hermano dedicado de otra congregación pronunciara el discurso de bodas o el de funeral en el Salón del Reino de otra congregación con la aprobación del comité y en armonía con las leyes locales.

El comité puede permitir que las parejas dedicadas de buena reputación en la congregación usen el Salón del Reino para una boda. A una persona dedicada que tiene planes para casarse con una persona no dedicada se le debe aconsejar que se case “en el Señor.” (1 Cor. 7:39) Si la persona dedicada insiste en casarse, y lo hace, eso es responsabilidad personal. Puede que el comité decida dejarles usar el Salón, o no, pero aun si lo permite esto no significa que ellos aprueban el matrimonio. A dos personas no dedicadas también se les puede permitir usar el Salón del Reino para una boda si el comité da permiso, pero estos individuos no dedicados deben tener buena reputación en la comunidad. Queda a la conciencia del hermano que está autorizado para celebrar bodas en cuanto a si servirá en el caso en que haya individuos no dedicados envueltos. Todas las bodas y los funerales que se celebran en el Salón del Reino deben ser dignos y deben llenar los requisitos de las leyes locales. (Vea “La Atalaya” del 1/11/72, 15/6/69, 1/2/66, 1/6/61.)

Informe del servicio para septiembre

Prom. Prom. Prom. Prom.

Pubs. Horas Revi. Est. Revistas

Precs. Esp. 807 145,8 45,9 4,0 133,4

Precs. 17.010 96,8 31,0 2,7 76,3

Precs. Temp. 30.000 77,2 18,6 1,1 59,8

Pubs. 464.921 12,6 3,6 0,4 9,9

TOTAL 512.738

Recién dedicados que se han bautizado: 4.319

META DE LOS ESTADOS UNIDOS PARA 1974: 483.438 publicadores