La escuela bíblica que realmente le ayuda
¿QUISIERA usted aumentar su conocimiento y entendimiento de la Palabra de Dios, la Biblia? ¿Tiene usted preguntas sobre la Biblia que quisiera que se le contestaran? ¿Quisiera usted mejorar en su habilidad de comunicarse con otros? Si así es, entonces usted merece encomio.
Para satisfacer su deseo de entender las Escrituras, es posible que haya asistido a una escuela bíblica eclesiástica. Pero ésa quizás fue de corta duración, solo de unas cuantas semanas, como ha sucedido con muchas de tales clases. O quizás en la actualidad usted esté estudiando la Biblia con un testigo de Jehová en su propio hogar, pero nunca haya asistido a las reuniones que celebran en el Salón del Reino. En cualquier caso usted se beneficiaría mucho de asistir a la Escuela del Ministerio Teocrático. ¿Qué es esta escuela?
En los países de habla inglesa esta escuela ha estado en operación por más de veinticinco años, y ahora suministra sesiones regulares en más de 25.000 congregaciones de los testigos de Jehová a través del mundo. Es una escuela en la que cualquiera que asiste, varón o hembra, puede matricularse sin costo alguno. Singularmente, sus estudiantes jamás se gradúan, ni desean graduarse. Disfrutan a grado cabal del programa de la escuela y, siendo de punto de vista progresivo, comprenden la necesidad de seguir mejorando sus habilidades.
El programa docente
Cada año se prepara un nuevo horario docente. El horario para 1970 presenta el programa más interesante y provechoso que jamás se ha arreglado.
Todos los que asistan a la escuela en inglés leerán las Escrituras Griegas Cristianas (“Nuevo Testamento”) usando una traducción en lenguaje moderno que les ayudará a familiarizarse con el sentido del texto bíblico griego. En la columna de la izquierda de la Biblia que se estará usando, está el mejor texto griego disponible, el de Westcott y Hort, en el griego koiní en el cual se escribieron originalmente estas Escrituras. Bajo cada palabra griega aparece el significado básico de la palabra en inglés. Luego en la columna derecha hay una traducción en inglés moderno. Así cada lector, aunque no haya tenido ningún conocimiento previo del griego, puede llegar a conocer por sí mismo el sabor y fuerza de esa lengua bíblica original. Cada semana se considerarán de tres a siete capítulos de esta traducción llamada Kingdom Interlinear Translation of the Greek Scriptures.
También se pronunciarán discursos breves cada semana para familiarizar a los presentes con información esclarecedora y fascinante acerca de personas, lugares, plantas, animales y muchos sucesos significativos que se mencionan en la Biblia. Estas presentaciones ayudarán a hacer que los relatos bíblicos cobren vida para los que los oigan. Sin embargo, el propósito de los discursos no es solo aumentar el conocimiento y entendimiento bíblicos de uno, sino también ensanchar el aprecio de corazón de uno al Autor de la Biblia, Jehová Dios.
También serán muy útiles los discursos basados en el tema ‘La Biblia realmente es la Palabra de Dios.’ ¡A cuántas personas les gustaría tener prueba de eso! Cada semana habrá un discurso sobre este tema general. Entre los temas que se discutirán están “El relato de Génesis sobre la creación... ¿hecho o ficción?”, “¿Hubo un diluvio de alcance global?” y “¿Es práctica la Biblia para nuestro día?” ¡Cuán fortalecedor para la fe en la Biblia como la Palabra de Dios resultarán las respuestas a esas preguntas!
En la escuela en español se considera información sobre cada uno de los libros de la Biblia, con resúmenes de su contenido, y se pronuncian discursos basados en la lectura y estudio de porciones de la Biblia en español moderno Traducción del Nuevo Mundo de las Santas Escrituras, explicando su significado y aspecto práctico.
El programa de la escuela, tanto en inglés como en español, incluye un repaso de cinco minutos sobre el discurso principal de la semana anterior, seguido de un discurso principal de quince minutos sobre algún tema bíblico fundamental, presentado por un ministro cristiano bien capacitado. A esto siguen entonces cuatro discursos estudiantiles basados en materia de la clase descrita antes.
Al asistir y prestar atención cuidadosa usted conseguirá mucho conocimiento exacto basado en la Biblia y encontrará respuestas a muchas preguntas acerca de la Biblia que quizás haya tenido. Por supuesto, usted obtendrá mucho más de la escuela si se prepara con anticipación repasando las asignaciones en casa, en particular asegurándose de leer los capítulos bíblicos asignados cada semana.
Para que usted recuerde mejor lo que haya aprendido, cada cuatro o cinco semanas se apartará una noche para un repaso escrito. Esto hará posible que usted siga examinando lo que ha aprendido. No titubee en cuanto a tomar este repaso por temor de obtener una calificación baja, pues usted corregirá su propia hoja y no se le pedirá que la entregue. De modo que las otras personas no sabrán cómo le fue a menos que usted opte por decírselo.
Beneficios obtenidos de la escuela
Muchos son los beneficios que usted y su familia obtendrán al asistir a esta escuela. Por ejemplo, el Times de Nueva York del 28 de septiembre de 1969 llamó atención a la seriedad de la situación de la lectura en los Estados Unidos. Informó que, según James E. Allen, Jr., el nuevo Comisionado de Educación de los Estados Unidos, una tercera parte de los niños de edad escolar en los Estados Unidos leen a un nivel inferior al de su año. Pero, ¿existe esta situación entre los Testigos? No. ¿Por qué no? Principalmente debido al programa de lectura bíblica de su Escuela del Ministerio Teocrático. En consecuencia, una madre de Ottumwa, Iowa, dijo que su hijo que estaba en cuarto año o cuarto grado de escuela elemental leía como uno del segundo año hasta que participó en el programa de lectura bíblica de la Escuela del Ministerio Teocrático como se efectuó en casa. Entonces en el transcurso de tres meses alcanzó el nivel de lectura de cuarto grado, asombrando a su maestro.
En la Escuela del Ministerio Teocrático, además de aprender a leer bien, los estudiantes también aprenden a comunicarse claramente con otros. Vez tras vez sus estudiantes jóvenes han sido sumamente elogiados por sus maestros seglares debido a la manera en que pueden presentar materia interesante de manera eficaz. Así pues, un maestro de la isla de Granada, en el Caribe, le preguntó a un Testigo joven si alguna vez había oído su voz en un magnetófono. Cuando el joven contestó que no, el maestro le pidió que dijera algo. El joven pronunció un sermón sobre el tema “Vida en el nuevo orden de Dios.” El maestro quedó visiblemente impresionado. “¡Me sorprendes, jovencito! Hablas con mucho significado y de manera muy coherente para tu edad. Serás un buen orador en el futuro.” El joven atribuyó su habilidad al entrenamiento recibido en la Escuela del Ministerio Teocrático.
También da testimonio del valor de esta escuela el incidente que tuvo lugar en una población de Luzón, en las Filipinas. Allí los oficiales escolares pidieron a líderes religiosos locales que suministraran un orador para un programa de aniversario. Rehusaron hacerlo porque no habían recibido aviso con bastante anticipación para prepararse apropiadamente. Finalmente, en el mismo día de la celebración los oficiales escolares decidieron pedir a los Testigos que suministraran un orador, y un ministro Testigo joven respondió. Como ya había comenzado el programa, inmediatamente se cambió de la ropa de trabajo y los acompañó. Habló durante cuarenta minutos sobre el tema “Enfrentándose a los problemas de los jóvenes del día presente.” Más tarde, cuando el principal orador invitado, el oficial escolar en jefe de la entera provincia, se levantó para hablar, dio encomio al joven Testigo y dijo: “Si yo pronunciara el discurso que había preparado solo estaría repitiendo lo que ha dicho este joven, y probablemente no lo haría tan bien.”
La asombrada facultad de la escuela más tarde preguntó cómo este Testigo, un obrero común, podía hablar tan bien ante un auditorio distinguido. Sí, se debía a que había asistido a la Escuela del Ministerio Teocrático en el Salón del Reino de los Testigos de Jehová. Como los apóstoles habían aprendido de Jesús, él había aprendido en esta escuela.—Hech. 4:13.
Matriculándose como estudiante
Por supuesto, si usted se matricula como estudiante y pronuncia discursos con regularidad usted se beneficiará en sumo grado. Se le invita a que haga usted esto si asiste con regularidad a estas reuniones. Al prepararse y pronunciar discursos no solo conseguirá mucha información bíblica, sino que también recibirá entrenamiento en composición y en hablar delante de otras personas.
En consecuencia, después que usted haya preparado y presentado su discurso, el encargado de la escuela, o su auxiliar, bondadosamente le dará consejo en cuanto a su discurso. Él considerará aspectos como la manera en que usted abarcó el tema y si se desarrolló lógica y coherentemente. También, ¿tuvo usted una introducción apropiada y una conclusión adecuada? ¿Usó usted bien su tiempo, de modo que no le sobrara tiempo ni se pasara del tiempo?
Usted también recibirá excelente consejo sobre su manera de hablar. Este abarcará factores como entusiasmo, modulación de tono, velocidad y volumen, énfasis que comunique sentido y pronunciación. Bondadosa y edificantemente se le mostrará a usted cómo puede mejorar.
Si quiere ayuda para preparar sus discursos, siéntase libre para pedirla. Esta la puede recibir en el mismo Salón del Reino al terminarse las reuniones o en su propio hogar, si usted prefiere, a una hora conveniente. Esta ayuda es gratis, en armonía con el mandato de Jesús: “Recibieron gratis, den gratis.”—Mat. 10:8.
Así que, si usted quisiera aumentar su entendimiento de la Palabra de Dios, si quisiera mejorar en su habilidad de comunicar a otros lo que usted ha aprendido, si usted está consciente de su necesidad espiritual, entonces asista a la Escuela del Ministerio Teocrático en el Salón del Reino local de los Testigos de Jehová. Usted será bienvenido allí, como lo son todos los que buscan sinceramente la verdad y la justicia.