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  • Florece la verdad del Reino en Sri Lanka
  • La Atalaya. Anunciando el Reino de Jehová 1988
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La Atalaya. Anunciando el Reino de Jehová 1988
w88 1/6 pág. 21

Los proclamadores del Reino informan

Florece la verdad del Reino en Sri Lanka

SRI LANKA, que significa “Tierra Resplandeciente”, es el nombre antiguo que se le ha restaurado a la hermosa isla conocida todavía por muchos por su nombre colonial, “Ceilán”. Por su ubicación en el océano Índico también la han llamado la Lágrima de la India, pero las lágrimas que se han derramado últimamente no han sido todas de gozo, pues por todo el mundo las noticias han informado de la violencia étnica que ha estallado allí.

Pero en Sri Lanka también florece la verdad del Reino. Budistas, hindúes, musulmanes, parsis y cristianos nominales están aprendiendo que solo el Reino de Jehová por Cristo Jesús puede en verdad sanar las heridas étnicas y políticas que dividen a las comunidades. Las siguientes experiencias muestran cómo florece la verdad del Reino en esta “Tierra Resplandeciente”.

◻ Desde pequeño, Salimoon creía que el Corán era la Palabra de Dios. Sin embargo, se le hacía difícil creer que un Dios tan misericordioso torturara a ciertas personas en un infierno ardiente. Un día los testigos de Jehová lo invitaron a una reunión. Él reconoció la verdad inmediatamente, y nunca ha mirado atrás, y ahora sirve gozosamente como anciano en la congregación cristiana.

◻ Harry, un budista de toda la vida que había demostrado su fe religiosa andando sobre brasas ardientes, no podía seguir los principios de la enseñanza budista de una senda de ocho aspectos: 1) entendimiento correcto; 2) pensamiento correcto; 3) habla correcta; 4) acción correcta; 5) ganarse la vida de manera correcta; 6) esfuerzo correcto; 7) mentalidad correcta y 8) concentración correcta. Estos deberían llenar toda la vida de él. Aunque creía que era buen budista, él fumaba, bebía y participaba en comportamiento impropio, todo lo cual le creaba problemas con su familia. Finalmente decidió estudiar la Biblia. Pero nadie le ofreció ayuda. Oyó que quizás los testigos de Jehová le ayudarían, de modo que asistió a una reunión en el Salón del Reino y concertó un estudio con ellos. Uno de los Testigos, que había sido musulmán, le ayudó a aprender lo que la Biblia enseña. Por fin ha hallado la fortaleza que Jehová da para seguir con éxito una senda de principios correctos. Se regocija de servir como siervo ministerial y está organizando sus asuntos para emprender el ministerio de precursor.

De modo que la verdad del Reino florece en Sri Lanka, y ahora hay 1.086 Testigos en este hermoso país. Este crecimiento significa que se necesitan mayores instalaciones para la sucursal, y se están haciendo esfuerzos por hallar un lugar adecuado. Los hermanos también están ocupados construyendo nuevos Salones del Reino. En Puttalam una congregación de 10 familias decidió construir un Salón del Reino, y hacerlo lo suficientemente grande como para tener asambleas de circuito allí. Terminaron el salón a tiempo para celebrar una asamblea de circuito a la cual concurrieron 107 personas. Ahora la congregación tiene casi el doble de la cantidad anterior de Testigos, pues más de 75 asisten a las reuniones en tamil y cingalés. Y todavía tienen espacio para aumento futuro.

Las profecías bíblicas cumplidas indican que muy pronto toda lágrima de tristeza será limpiada de los ojos, como Dios ha prometido. Ni siquiera subirán al corazón pensamientos de violencia étnica entonces. (Revelación 21:4; Isaías 65:17.) Y en esta hermosa “lágrima” isleña se derramarán lágrimas de gozo mientras se siga disfrutando para siempre de los efectos de la paz que es fruto del Reino de Dios.

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