BIBLIOTECA EN LÍNEA Watchtower
Watchtower
BIBLIOTECA EN LÍNEA
Español
  • BIBLIA
  • PUBLICACIONES
  • REUNIONES
  • g88 22/8 págs. 16-20
  • ¿Es posible atravesar la brecha cultural?

No hay ningún video disponible para este elemento seleccionado.

Lo sentimos, hubo un error al cargar el video.

  • ¿Es posible atravesar la brecha cultural?
  • ¡Despertad! 1988
  • Subtítulos
  • Información relacionada
  • Matrimonios entre personas de culturas diferentes
  • Fuentes de irritación
  • Evite ser un motivo de irritación
  • Cómo atravesar la brecha cultural
  • La importancia de una actitud apropiada
  • El matrimonio es un regalo de Dios
    Continúe en el amor de Dios
  • ¿Podrá salvarse su matrimonio?
    La Atalaya. Anunciando el Reino de Jehová 1970
  • Ayuda de la Biblia para su matrimonio
    La Atalaya. Anunciando el Reino de Jehová 1976
  • La vida familiar... cómo usted puede tener éxito
    La felicidad... cómo hallarla
Ver más
¡Despertad! 1988
g88 22/8 págs. 16-20

¿Es posible atravesar la brecha cultural?

“Nos han concedido los visados. Emigraremos a Canadá el mes que viene.”

“¿Lo sabía? Mi esposo ha sido destinado a los estados del golfo Pérsico. Nos trasladaremos pronto.”

“Le presento a mi prometido. Sí, es del Oriente Medio. Pensamos vivir en su país cuando nos casemos.”

¿SE HA fijado en lo que estas tres parejas tienen en común? Las tres están a punto de enfrentarse a una brecha cultural que quizás resulte ser mayor que la distancia que van a viajar.

Ese problema casi no existía en los días de nuestros abuelos, pues solo una pequeña parte de la población mundial emprendía algún viaje largo desde su lugar de origen. Pero hoy día son muchos los que atraviesan continentes y océanos con regularidad, y tan solo en cuestión de horas. Cada vez hay más personas que dejan su casa para siempre.

Las razones son muchas. Un buen número de compañías occidentales han enviado especialistas a trabajar en países en desarrollo, lo que ha supuesto el traslado de familias enteras, pues los contratos son a largo plazo. Estudiantes procedentes de países en desarrollo han buscado adiestramiento especializado en las universidades europeas y americanas. Y en años recientes, las guerras civiles, los conflictos nacionales y la persecución racial o religiosa han hecho que muchos busquen refugio en países como Australia, Canadá y Estados Unidos.

Sea cual sea la razón del traslado, los recién llegados tendrán que poner mucho empeño en atravesar la brecha entre su propia cultura y la del lugar donde van a vivir.

Matrimonios entre personas de culturas diferentes

Muchos conocen a la persona que llegará a ser su cónyuge mientras terminan su educación universitaria en el extranjero, y cuando se casan, regresan con su cónyuge a su país. Incluso en las mejores circunstancias, adaptarse al matrimonio requiere comprensión, paciencia, abnegación y un esfuerzo consciente. De modo que cuando los cónyuges proceden de diferentes culturas, esas cualidades tienen que desarrollarse a un grado todavía mayor a fin de que el matrimonio perdure. Sin embargo, muchos matrimonios de ese tipo están destinados al fracaso desde su mismo comienzo. ¿Por qué? Veamos un ejemplo típico:

A la romántica estudiante americana le resulta muy fácil enamorarse de Sami. Él es muy complaciente, y la trata como a una princesa. Ningún muchacho de la localidad había sido jamás tan respetuoso. Y esos ojos oscuros... ¡cómo la cautivan! La idea de aceptar su proposición de matrimonio e irse a vivir con él al exótico Oriente Medio le parece muy atractiva.

¿Qué posibilidades de éxito tiene ese matrimonio? Aunque quizás su marido le haya descrito un poco su país, es posible que la novia no tenga ninguna idea de la verdadera situación que existe en la tierra de su marido. Nunca lo ha visto en su ambiente o con su familia. Aunque es probable que haya ido una o dos veces al extranjero, es algo muy distinto vivir diariamente en un país que no es el suyo.

Fuentes de irritación

Muy probablemente, una de las mayores fuentes de irritación para la recién casada sea la falta de intimidad, algo que quizás se respete mucho en su país natal. Aprenderá que el casarse con alguien de Oriente Medio significa aceptar a toda una familia de parientes políticos —compuesta de tías, tíos, primos carnales, primos segundos y hasta primos terceros— llenos de una gran curiosidad. Tanto estos como los vecinos pueden hacer preguntas muy directas y personales, algo que en otros países sería considerado una falta de educación. Sin embargo, en esos países, las personas no se ofenden ante esas preguntas; al contrario, es posible que sean ellas las que se sientan heridas si usted no les hace preguntas tan personales como las suyas. Como opinan que los matrimonios deben ser fructíferos, cabe esperar constantes indagaciones para saber si van a tener descendencia.

Suele decirse que el casado casa quiere, pero en el Oriente Medio, más que una casa, lo que tiene es un hotel. En cualquier momento aparecen amigos y parientes sin previo aviso, y muchas veces pasan la noche en la casa. Si la alacena no está suficientemente abastecida, hará falta bastante ingenio a fin de que la comida llegue para todos.

En el Oriente Medio, el lugar de la mujer está en la casa. Es cierto que en algunos de estos países orientales las mujeres quizás trabajen fuera de casa, pero todavía se espera que además hagan todos los quehaceres domésticos. El hombre es, sin ninguna duda, el cabeza de familia, y su palabra es ley. En algunos estados del golfo Pérsico, a las mujeres ni siquiera se les permite salir solas de casa. Si salen, tienen que cubrirse de pies a cabeza, incluso el rostro.

Algo que puede frustrar a la persona que no está familiarizada con esta forma de vida oriental es la falta de organización y los alborotos que se forman en las colas de los autobuses, a la hora de pagar en los supermercados, al conducir en medio de un tráfico denso y al tratar con los que ocupan puestos gubernamentales. La persona que está acostumbrada a que el primero que llega es el primero en ser servido sufrirá muchos desengaños en un sistema donde el tener influencias es de principal importancia.

Otras posibles fuentes de irritación tienen que ver con el diferente sentido del humor, la rápida manifestación de emociones —sea cólera o simpatía— y el volumen generalmente más elevado al que se mantienen las conversaciones cotidianas.

Evite ser un motivo de irritación

Por otro lado, la propia recién casada puede ser una fuente de irritación para las personas de su nuevo país si no sigue las costumbres locales. En estos países orientales se espera que las mujeres se vistan con modestia. No está bien visto llevar la espalda descubierta. En los países o comunidades musulmanes están prohibidas las bebidas alcohólicas.

Cuando una persona entra en una habitación, todos los presentes se ponen de pie para saludarla y le dan la mano. Un simple saludo con la cabeza equivaldría a una bofetada. También es costumbre invitar a todos los visitantes, hasta a los más inesperados, a que tomen algo. De modo que sería descortés preguntar primero a la visita si desea una taza de café; la persona siempre dirá que no, sin importar cuánto le apetezca. Y aun cuando la invitación para tomar algo se extienda de manera espontánea, es posible que el visitante rehúse aceptar y haya que insistir para que diga que sí, ya que no desea parecer un aprovechado. Pero si no se le insiste, entonces se considera que el anfitrión es un tacaño.

Estas son solo unas cuantas de las nuevas costumbres a las que la recién casada tendrá que enfrentarse al trasladarse al Oriente Medio. Otros países tienen costumbres diferentes.

Cómo atravesar la brecha cultural

Una buena sugerencia para las personas que piensan trasladarse a otro país cuando contraigan matrimonio es aprender de antemano con qué se van a encontrar. En primer lugar, lea tanto como pueda sobre el país, su historia y sus costumbres. Visítelo y observe a su prometido con su familia. Una persona a la que haya conocido en un ambiente familiar para usted puede parecer totalmente distinta en su propia comunidad. ¿Es ese pretendiente tan educado y complaciente igual de complaciente y educado con todos los miembros de su familia?

Es vital que exista una completa franqueza entre ambos. Las fuentes de irritación deben ventilarse antes de que adquieran mayores proporciones. Vea lo que se puede lograr. Hay personas que después de hacer todo lo posible quizás descubran que sus estilos de vida son demasiado diferentes y sencillamente no pueden hacer los cambios que se requieren. En ese caso, es mejor darse cuenta de ello antes de entrar en una relación para toda la vida que haría desgraciados a ambos.

Para los que deciden contraer matrimonio, las siguientes sugerencias serán de ayuda: Esfuércese por aprender el idioma de sus parientes políticos. El que siempre converse en su propio idioma en presencia de los que no lo entienden puede hacerles sospechar que se habla de ellos. No necesita esperar hasta que conozca perfectamente la gramática de ese idioma para hablar con ellos. Utilice lo que sabe y descubrirá que las personas le irán ayudando con gusto.

No haga constantes comparaciones entre su nueva situación y la vida que dejó atrás. Acepte el hecho de que su manera anterior de hacer las cosas no es la única. Quizás resulte más familiar y cómoda para usted, pero todos los que le rodean están acostumbrados a hacer las cosas de una forma diferente. Por ejemplo: en el Oriente Medio la comida principal se hace al mediodía, mientras que en su país quizás la comida principal sea la cena. De modo que en lugar de dejar que el marido se coma un bocadillo por su cuenta al mediodía, se espera que una esposa prepare una comida caliente, y por lo general el marido quiere que la coman juntos. Todo lo que se necesita es adaptabilidad por parte de los dos cónyuges.

Hablando de comidas, también es útil cultivar el gusto por los platos locales. El intentar cocinar un nuevo plato “solo una vez” para agradar a su cónyuge puede producirle una satisfacción inesperada. El perfeccionarlo y añadirlo a la lista de platos que prepara regularmente ayudará a que se consolide el matrimonio. Lo mismo puede decirse de cultivar el oído por la música de Oriente.

Además, invierta tiempo en aprender las costumbres sociales de la localidad. Algunas se pueden aprender en seguida con solo observar. En el Oriente Medio, por ejemplo, es costumbre conversar cortésmente hasta con los repartidores que vienen a la casa, ofrecer una taza de café o una bebida fresca incluso a los visitantes desconocidos y levantarse para saludar a las visitas con un fuerte apretón de manos y a los parientes, con un beso en la mejilla.

Pregunte a su cónyuge lo que se espera de usted en cualquier nueva situación. A una recién casada su marido le dijo que es costumbre que los hijos, aunque ya sean adultos, besen la mano de sus padres y suegros cuando los saludan. En esa zona se considera una señal de respeto. Las primeras veces que ella llevó a cabo esa práctica no le salía con mucha naturalidad, pero después llegó a acostumbrarse, y aparte de agradar mucho a sus suegros, contribuyó a unas buenas relaciones familiares.

La importancia de una actitud apropiada

El que sus vecinos quizás demuestren más interés en sus asuntos personales de lo que tal vez le parezca apropiado tiene su lado positivo, y es que siempre están a mano en momentos de necesidad. Por ejemplo: un día una americana casada con un libanés llegó a casa después de hacer las compras y se la encontró llena de vecinos. Lo que había ocurrido es que su marido se había puesto enfermo en el trabajo; apenas había conseguido llegar a la puerta, cuando un vecino notó que se encontraba mal y le ayudó a entrar en casa y acostarse. El vecino corrió la voz por todo el vecindario, y mientras algunos fueron a buscar al médico, otros atendieron al marido y después fueron a comprar los medicamentos recetados. ¡Qué contenta estaba esa mujer de tener unos vecinos tan atentos!

De modo que reconozca el derecho que tienen los demás de hacer las cosas de manera diferente. Recuerde: el mero hecho de ser diferente no hace que una manera de hacer las cosas sea buena o mala, propia o impropia.

El vivir en armonía con los consejos de la Biblia ha resultado ser una extraordinaria ayuda para atravesar la brecha cultural. Cuando la esposa respeta a su marido como su cabeza y el marido ama a su esposa como a su propio cuerpo, tendrán un matrimonio de éxito. (1 Corintios 11:3; Efesios 5:21-33.) Siempre estarán muy dispuestos a mostrar paciencia y comprensión durante el período de adaptación a su nueva forma de vida.

Es cierto que habrá ocasiones en las que surgirán diferencias de opinión en cuanto a cuáles son las costumbres que deberían seguirse en diversas circunstancias. Pero los matrimonios que respetan la Palabra de Dios buscarán en la Biblia el principio pertinente y procurarán seguirlo. Si resulta que el asunto es cuestión de preferencia personal, se puede aplicar el principio bíblico registrado en 1 Corintios 13:4, 5, donde dice: “El amor [...] no busca sus propios intereses”. (Véase también 1 Corintios 10:23, 24.)

No obstante, recuerde siempre que si se ha trasladado a otro país, usted es la persona extranjera, y la mayoría de los cambios los tendrá que hacer usted. No puede esperar que todos los demás se adapten a sus normas o a su forma de vida, aunque eso no significa que no pueda compartir rasgos de su cultura con sus nuevos amigos.

Entonces, ¿puede atravesarse la brecha cultural? El ejemplo de muchos que lo han hecho y que han enriquecido su vida al combinar lo mejor de dos culturas hace que la respuesta sea sí.

[Fotografía en la página 17]

Cuando los cónyuges proceden de diferentes culturas, hay que poner mucho empeño para que el matrimonio tenga éxito

[Fotografía en la página 18]

En el Oriente Medio es costumbre invitar a todos los visitantes, hasta a los más inesperados, a que tomen algo

[Recuadro en la página 19]

Cómo adaptarse

✔ Hable el idioma nativo

✔ Aprenda las costumbres locales

✔ Intente cocinar nuevas comidas

✔ Evite las comparaciones con su anterior forma de vida

✔ Ajuste su actitud mental y piense de manera positiva

✔ Aplique los principios bíblicos

    Publicaciones en español (1950-2025)
    Cerrar sesión
    Iniciar sesión
    • Español
    • Compartir
    • Configuración
    • Copyright © 2025 Watch Tower Bible and Tract Society of Pennsylvania
    • Condiciones de uso
    • Política de privacidad
    • Configuración de privacidad
    • JW.ORG
    • Iniciar sesión
    Compartir