De nuestros lectores
La vida homosexual
Me interesó su artículo “La vida homosexual... ¿cuán remuneradora es?” (22 de marzo de 1986). Sin embargo, ustedes dan a entender que el SIDA es el juicio de Jehová sobre los homosexuales. ¿Creen ustedes que la anemia causada por la célula falciforme, la cual afecta principalmente a los negros, sea el castigo de Jehová para los negros? Además, el SIDA no ha afectado a las lesbianas. ¿Significa esto que Jehová desaprueba a los hombres homosexuales, pero está a favor de las lesbianas? Es conveniente para aquellos que tienen aversión a los homosexuales hacer una conexión entre la homosexualidad y el SIDA, pero esto refleja una actitud muy irresponsable.
M. D., Estados Unidos
Nosotros no declaramos ni sugerimos que el SIDA sea el juicio de Dios sobre los homosexuales. Las enfermedades son parte de las consecuencias del pecado y la imperfección que todos heredamos de Adán. (Romanos 5:12.) Pero no se puede negar que ciertas acciones traen inevitablemente ciertas consecuencias. El fumador de tabaco se expone a mayor riesgo de contraer cáncer en los pulmones. El que abusa del alcohol se expone a un mayor riesgo de desarrollar una enfermedad del hígado. El glotón se expone a peligros relacionados con la obesidad. La conexión entre la homosexualidad y el SIDA no la hemos hecho nosotros, sino que es un hecho establecido por la ciencia médica. Aunque no son expresiones de los juicios de Dios, las consecuencias específicas están enlazadas con la violación de las leyes de Dios. En Gálatas 6:7 se declara: “No se extravíen: de Dios uno no se puede mofar. Porque cualquier cosa que el hombre esté sembrando, esto también segará”.—La dirección.
Resistiendo la violación
Gracias por su artículo “¡Ahora vas a morir!” (22 de mayo de 1986). Sin embargo, quisiera comentar algo en cuanto al consejo que se dio. Cuando se acercan a su víctima, algunos violadores vienen llenos de ira y son muy sádicos, y están resueltos a usar su arma ante la más mínima provocación. Nuestra Organización Metropolitana Contra el Ultraje Sexual sugiere que se ofrezca resistencia, pero si una mujer se paraliza debido al temor o su instinto le dice que no resista, entonces reconocemos esto como lo apropiado. Preferimos que alguien pase por tal experiencia a que sea asesinada o seriamente mutilada.
P. R., Estados Unidos
La Biblia sí apoya el pensamiento de que una mujer que se halle bajo el ataque de un violador debe gritar y resistir. Es cierto, la mujer tiene que tomar acción de acuerdo con el grado de peligro en que se halle su vida, y nos parece que esto se abarcó en el consejo dado en el recuadro de la página 23. (22 de mayo de 1986.) Se debe tener presente que el someterse a la violación no garantiza que la víctima no será golpeada o asesinada después del acto. Véase el artículo “They Resisted Rapists” (Resistieron a los violadores) en nuestro número del 22 de febrero de 1984, en inglés.—La dirección.
La bomba y el futuro del hombre
Disfruté mucho de la lectura de los artículos que publicaron sobre “La bomba y el futuro del hombre” (22 de mayo de 1986). No obstante, opino que el artículo no fue lo suficientemente lejos, como por medio de exhortar a los lectores (cristianos) a oponerse a las armas nucleares mediante votar y escribir cartas a sus legisladores. Aloha.
J. G. B., Hawai
El votar y escribir cartas a los legisladores sugiere que el hombre tiene una solución al problema. Nuestros artículos mostraron claramente que sólo el Reino de Dios traerá paz y seguridad duraderas a los que aman la paz en todas partes. Los testigos de Jehová oran por ese Reino, viven en armonía con sus principios de paz y dedican tiempo a enseñar esto a otras personas.—La dirección.