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  • Motivo correcto al servir a Dios
    La Atalaya 1964 | 15 de octubre
    • firme y su deseo de ser fiel bajo toda circunstancia también se fundaron en amor, como él dijo: “Para que el mundo conozca que yo amo al Padre.” Hoy en día tal amor nos ayuda a testificar a todos los que encontramos con perfecta libertad de palabra, no retrayéndonos de explicar la verdad a otros. Como dijo el apóstol Juan: “No hay temor en el amor.” Y, ¿por qué tienen los cristianos este amor resuelto? ‘Porque Dios nos amó primero.’—Juan 14:31; 1 Juan 4:17-19.

      SIRVIENDO POR AMOR A DIOS

      15. ¿Por qué sirvieron a Dios Jesús y los apóstoles?

      15 Si alguien le preguntara a usted por qué el cristiano debe servir a Dios, ¿cómo contestaría usted? A una publicadora joven de las buenas nuevas que ofrecía alguna literatura bíblica a un amo de casa se le preguntó qué obtendría por su trabajo. Ella contestó: “¡Vida eterna!” Tenía fe en la promesa de Jehová. ¿Qué razón daría usted por servir a Dios que pudiera ayudar a estimular a otra persona a servir? Pudiéramos preguntar: ¿Por qué sirvió Jesús a Jehová? Porque su amor al Padre le impulsó a hacer la voluntad de su Padre y dar testimonio a la verdad. (Juan 18:37) ¿Por qué sirvió Pablo a Dios? Porque sabía que esto significaba vida para él y para los que escuchaban el mensaje. Por eso sirvió como embajador de las buenas nuevas, prosiguiendo con la obra que Cristo comenzó.—2 Cor. 5:20.

      16. ¿Cuáles son algunas de las razones fuertes para servir?

      16 Por eso, podemos decir que nuestro servicio se basa en amor a Dios y al prójimo, que es conforme a las propias instrucciones de Jesús, y que significa salvación el llevarlo a cabo. (Mat. 22:37-39; 28:19; 1 Tim. 4:16) El servir a Dios proporciona una verdadera razón para vivir, no solo para la supervivencia personal, sino para contribuir algo edificante a otros, dándoles esperanza de vida conforme al propósito de Dios.—Rom. 8:28.

      17. ¿En qué debe fundarse nuestro servicio, y por qué?

      17 Es posible que algunos comiencen en el ministerio de casa en casa, particularmente niños, debido a que influyan en ellos la familia o amigos. Se asocian con la congregación local y participan en el servicio sin poner su corazón en ello. Otros quizás crean que ésta es la mejor religión que han hallado y no obstante nunca han estudiado bastante profundamente como para tener un deseo impelente de compartir lo que han aprendido. Quizás unos cuantos gocen de la buena asociación con personas rectas y crean que vale la pena el esfuerzo de cultivarla, mientras otros quizás hasta se asocien por razones egoístas para corromper o destruir la fe de los que encuentren. Pero sea cual sea la razón, Jehová conoce el corazón, y los que sirven con motivo incorrecto jamás recibirán su bendición ni el galardón de la vida. Por eso, nuestro servicio no debe fundarse en temor a las consecuencias que correspondan al no servir, ni por razones personales egoístas, sino, más bien, en un amor verdadero y sincero a nuestro Creador.—2 Cor. 6:1, 2; Jer. 20:9.

      18. ¿Qué actitud debemos tener para con aquellos a quienes servimos?

      18 Hay necesidad de que cada uno edifique y fortalezca su fe, su amor y aprecio a la verdad, y luego practique diligentemente la justicia de Dios que hace acepto nuestro servicio a él. El que participe en el ministerio debe estar profundamente interesado en aquellos a quienes ministra y hacer todo esfuerzo por mejorar su presentación y eficacia para que pueda ayudarles. Esta es la actitud que Jehová mismo expresó en Ezequiel 33:11: “Me deleito, no en la muerte del inicuo, sino en que alguien inicuo se vuelva de su camino y realmente siga viviendo. Vuélvanse, vuélvanse de sus caminos malos, ¿por qué deberías morir?” Ahora nuestro servicio bien puede significar vida para nosotros así como para otros.

      19. ¿Qué les sucederá a los que sirven por motivos egoístas?

      19 Si algunos sirven para complacer a parientes o a personas amadas, ¿qué sucederá cuando este viejo sistema se acerque a su fin y Gog de Magog ataque al pueblo de Jehová? Si nuestra razón para servir a Dios realmente es para agradar a hombres, no estaremos agradando a Dios ni aguantaremos bajo la presión de este ataque total. (Eze. 38:11, 16) Los que sirvan por razones incorrectas o por intereses personales serán entresacados con el tiempo. No solo tendrán oposición de amigos mundanos o hasta de su propia familia como en el caso de Job, sino que no aguantarán bajo los cargos falsos que a menudo se dirigen contra los cristianos. Si los que sirven por falsos motivos no se retiran con el tiempo por sí solos debido a la falta de fe, Jehová mismo por medio de los ángeles cortará a los que no merecen la vida y los destinará a la destrucción en la venidera batalla del Armagedón. (Mat. 24:12; 13:20, 21, 38-41) Es claro que los que tal vez sirvan temporalmente por razones egoístas solo se engañen ellos mismos. Jesús recalcó esto cuando dijo: “No todo el que me dice: ‘Señor, Señor,’ entrará en el reino de los cielos, sino el que hace la voluntad de mi Padre que está en los cielos.”—Mat. 7:21-23.

      20. ¿Cómo podemos fortalecer nuestra posición en el favor de Jehová?

      20 Si esperamos hallarnos entre la multitud de alabadores verdaderos de Jehová que recibirán una corona de vida, entonces no nos debe desviar oposición alguna que pueda venir contra nosotros. Más bien, como el hombre discreto de la ilustración de Jesús, edificaremos nuestra casa sobre la masa de roca de obediencia a Cristo Jesús, estableciendo nuestra fe en él y trabajando para profundizar, ensanchar y fortalecer nuestro conocimiento de la verdad, viviendo en conformidad con él y ayudando a otros a conseguir también un fundamento de obediencia semejantemente sólido que significará la vida. Entonces cuando las tempestades de oposición que las Escrituras predicen desciendan precipitadamente sobre el pueblo de Jehová con dificultad tal como jamás se volverá a ver, nuestra obediencia fiel no será arrasada, sino que se mantendrá firme bajo toda oposición desmenuzadora y nos ayudará a mantenernos firmes a favor de la adoración correcta. (Mat. 7:24-27) No hay nada que podamos dar a Dios para mostrarle nuestro amor y nuestro aprecio a la vida y las futuras bendiciones que él nos ofrece excepto nuestra adoración y servicio; por eso, debemos dar esto de todo corazón.—Heb. 13:15.

      21. ¿Qué bendiciones da Jehová a sus siervos ahora, y qué se requiere de nosotros?

      21 El conocer y servir a Jehová traen bendiciones aun ahora. No tenemos causa para inquietarnos debido a las condiciones inestables del mundo, sino, más bien, tenemos tranquilidad de ánimo y confianza debido a nuestro conocimiento de las Escrituras. Aunque quizás perdamos la amistad de conocidos mundanos o aun de nuestra propia familia, recibimos hermanos y hermanas, padres y madres y hogares en un céntuplo de parte de la familia de Jehová, y, además, la promesa de vida eterna. Podemos confiar en esto, “porque Dios no es injusto para olvidar la obra de ustedes y el amor que mostraron para con su nombre.” Para conseguir esto Pablo aconseja: “Pero deseamos que cada uno de ustedes muestre la misma diligencia a fin de tener la plena seguridad de la esperanza hasta el fin, para que no se hagan indolentes, sino que sean imitadores de los que por medio de fe y paciencia heredan las promesas.”—Heb. 6:10-12; Rom. 8:6; Mar. 10:30.

      22. ¿Qué resulta en una posición correcta con Jehová? ¿Qué provecho hay en que uno sirva a Dios?

      22 Así, aunque la mayoría escoja una carrera debido a deseos personales de prestigio o una buena recompensa financiera, éstos no son los que ganan el favor de Dios. Pero el que uno sirva por los motivos bíblicos de amor a Dios y al prójimo y con aprecio a las bendiciones y esperanza que Jehová ofrece sí resulta en una posición correcta con Dios. Así como hay mucho que hacer ahora en la obra de Jehová y en compartir la verdad con hombres que buscan a Dios, así habrá mucho que efectuar en hermosear y poblar la Tierra durante el reinado de mil años de Cristo. El motivo para servir entonces continuará siendo nuestro amor a Jehová. Si usted desea vivir en ese tiempo feliz, entonces muéstrelo por medio de servicio fiel. Recuerde que el libro de memoria de Jehová se está escribiendo ahora. Como registra su Palabra: “‘Y ciertamente llegarán a ser míos,’ ha dicho Jehová de los ejércitos, ‘en el día en que estoy produciendo una propiedad especial. Y les mostraré compasión, tal como un hombre muestra compasión a su hijo que le está sirviendo. Y ustedes otra vez ciertamente verán la distinción entre un justo y un inicuo, entre uno que sirve a Dios y uno que no le ha servido.’”—Mal. 3:17,18.

  • Respondiendo a la verdad de Dios
    La Atalaya 1964 | 15 de octubre
    • Respondiendo a la verdad de Dios

      ✔ Una testigo de Jehová de Míchigan informó esta experiencia: “Otra Testigo y yo visitamos a una señora que estaba muy abatida, al grado que amenazaba suicidarse. El único motivo por el cual nos dejó pasar fue porque tiene una sobrina que es testigo de Jehová. Apreciaba lo mucho que se había ayudado a su sobrina a resolver muchos problemas por el estudio de la Biblia.

      “Cuando la encontramos, estaba en tal estado que no tenía suficiente ánimo para peinarse. Hasta las sencillas tareas domésticas le parecían montañas. Su ministro había empeorado las cosas diciéndole que ella solamente se imaginaba esta condición. Como resultado, estaba tratando de ahogar sus problemas usando bebidas alcohólicas. Creía que nada podía ayudarla, pero de cualquier modo me dejó pasar. El primer tópico que consideramos de la Biblia fue: ¿Quién es el responsable por los problemas del mundo? Aprendió lo que la Palabra de Dios dice acerca de Satanás el Diablo. Se enteró de que es posible rehacer la mente y revestirse de una ‘nueva personalidad.’ Quería beber del ‘agua de vida.’—Rev. 22:17.

      “Entonces empezó a hablarles a otros de la Biblia, porque apreciaba mucho la ayuda que le había dado la verdad de Dios. Algunos le decían: ‘¿Quién es usted para hablar de la Biblia? ¡Mire el estado en que está!’ Ella respondía: ‘Son los enfermos los que necesitan el médico; los testigos de Jehová me están ayudando a mejorar.’ Poco después que comenzó a estudiar la Biblia, pudo ayudar a un hombre que estaba muy desanimado. Él le dijo que llevaba un revólver en su coche, esperando el momento apropiado para usarlo en sí mismo. De inmediato ella le contó que ella se había sentido así, pero que los testigos de Jehová la habían ayudado. Él ahora está estudiando con un Testigo. En cuanto a la señora que estaba tan abatida, es ahora una persona muy feliz. En lugar de usar bebidas alcohólicas para tratar de ser feliz, está bebiendo del ‘agua de vida,’ las verdades de Dios.”

  • La verdad purifica
    La Atalaya 1964 | 15 de octubre
    • La verdad purifica

      ● Una señora de Olinda, Brasil, quien había sido criada como católica, se convirtió al espiritismo cuando se casó. Ella fumaba y jugaba por dinero. En una ocasión, prevenida por los demonios mientras jugaba, ganó. Entonces asistió a la iglesia bautista y a otras iglesias protestantes, pero no ingresó en ninguna de éstas debido a que le parecía que la salvación por el solo levantar la mano era demasiado fácil. Un día la visitaron los testigos de Jehová. Comenzó a estudiar la Biblia con ellos y a asistir a las reuniones en el Salón del Reino pero continuó fumando y jugando por dinero. En una ocasión, su hija le dijo: “Mamá, ¿por qué no dejas esa religión? No dejas de fumar y jugar; solo te estás engañando a ti misma.” Recobró sus sentidos y, orándole encarecidamente a Jehová por ayuda, decidió no volver a fumar ni jugar jamás. De modo que hizo su dedicación a Jehová y ahora es una publicadora activa de las buenas nuevas del Reino.

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