BIBLIOTECA EN LÍNEA Watchtower
Watchtower
BIBLIOTECA EN LÍNEA
español
  • BIBLIA
  • PUBLICACIONES
  • REUNIONES
  • g96 22/9 págs. 21-23
  • ¿Cómo puedo divertirme?

No hay ningún video disponible para este elemento seleccionado.

Lo sentimos, hubo un error al cargar el video.

  • ¿Cómo puedo divertirme?
  • ¡Despertad! 1996
  • Subtítulos
  • Información relacionada
  • Participar juntos en actividades
  • Edificantes reuniones sociales
  • Entretenimiento familiar
  • Cuando estás a solas
  • Puedes hallar “disfrute” en el servicio de Jehová
  • ¿Cómo puedo divertirme?
    ¡Despertad! 1986
  • ¿Por qué no puedo divertirme de vez en cuando?
    Lo que los jóvenes preguntan. Respuestas prácticas
  • ¿Por qué no puedo yo divertirme como los demás?
    ¡Despertad! 1996
  • Diversión sana que reconforta
    La Atalaya. Anunciando el Reino de Jehová 2006
Ver más
¡Despertad! 1996
g96 22/9 págs. 21-23

Los jóvenes preguntan...

¿Cómo puedo divertirme?

“Me parece que sí realizamos muchas actividades divertidas. En nuestra congregación hacemos todo lo posible por estar juntos. Nos entretenemos sanamente. La mayoría de los chicos del mundo no puede decir lo mismo.”—Jennifer.

ACTIVIDADES RECREATIVAS. Todos las necesitamos de vez en cuando. Pueden ser “una importante aportación al bienestar físico y psicológico de la persona”. (The World Book Encyclopedia.) No en balde, la propia Biblia indica que hay un “tiempo de reír”, es decir, de tener esparcimiento. (Eclesiastés 3:1, 4.)a

La palabra “recreativo” se deriva de un verbo latino que significa “crear de nuevo; dar nueva vida, devolver la confianza, descansar”. (Breve diccionario etimológico de la lengua española.) Pero, lamentablemente, buena parte de las actividades con las que se “entretienen” los jóvenes, como las fiestas alocadas, el abuso de las drogas y el alcohol, y las relaciones sexuales ilícitas, no infunden nueva vida en las personas, sino que las destruyen. Por ello, pudiera ser difícil encontrar actividades divertidas que, al mismo tiempo, sean sanas. Mas, como señaló Jennifer al inicio del artículo, es posible lograrlo.

Participar juntos en actividades

No hace mucho, ¡Despertad! pidió a varios jóvenes su opinión sobre este particular. La mayoría dijo que les gusta estar con otros jóvenes. ¿Te ocurre a ti igual, aunque suceda que a menudo no te inviten a acompañarlos? Si así es, ¿por qué no tomas la iniciativa? Veamos el ejemplo de Leigh, una joven sudafricana, que dice: “Si me atrae una película, llamo a alguna amiga y nos encargamos de correr la voz entre los demás amigos”. Por lo general van a las primeras sesiones. Luego, los padres recogen al grupo y se van todos juntos a comer a un restaurante de la zona.

Los deportes también brindan la oportunidad de ejercitarse y relacionarse con los demás sanamente. (1 Timoteo 4:8.) Una chica llamada Roelien comenta: “Primero le explico a mi familia dónde quiero ir, y luego invitamos a un grupo a que nos acompañe”. Muchos jóvenes cristianos han visto que hay bastantes deportes sanos para practicar en grupo: patinaje, ciclismo, tenis, béisbol, fútbol (balompié) y voleibol, entre otros.

No, no hay que gastar un dineral ni comprar equipo de primera calidad para pasar un buen rato. “He disfrutado de caminar muchas horas por las montañas y desiertos cercanos con la familia y los amigos —comenta una adolescente cristiana—. Da gusto simplemente estar al aire libre con buenos amigos.”

Edificantes reuniones sociales

Para un buen número de jóvenes, pasar un buen rato significa asistir a reuniones sociales. “Nos gusta invitar a los amigos a comer algo y escuchar música”, comenta la joven Aveda. Las reuniones de carácter social ocupan su debido lugar en la vida del cristiano. El propio Jesucristo asistió a comidas especiales, bodas y otras reuniones sociales. (Lucas 5:27-29; Juan 2:1-10.) Así mismo, los primeros cristianos disfrutaban reuniéndose para comer y tener sana convivencia. (Compáralo con Judas 12.)

Si tus padres te dejan organizar una fiesta en casa, ¿de qué forma evitarás problemas y contribuirás al disfrute de todos? Preparando todo bien. (Proverbios 21:5.) Por ejemplo, es lógico invitar solo a un número de amigos que pueda supervisarse bien. Cuando las reuniones son pequeñas, es menos probable que se conviertan en “diversiones estrepitosas” u “orgías”. (Gálatas 5:21, Nueva Biblia Española.)

A los cristianos del siglo I se les instó a no tener vida social con quienes ‘andaban desordenadamente’. (2 Tesalonicenses 3:11-15.) No hay mejor modo de aguar una fiesta que invitar a jóvenes con fama de alborotadores o ingobernables. Es conveniente seleccionar bien a los invitados, pero sin limitarse siempre al mismo círculo. ‘Ensánchate’ para conocer a más hermanos de la congregación, entre ellos a personas mayores. (2 Corintios 6:13.)

¿Vas a servir refrigerios? De ser así, no tienen que ser ni espléndidos ni caros para que los invitados gocen de la ocasión. (Lucas 10:38-42.) “Algunas noches nos reunimos para cenar pizza”, señala Sanchia, una joven sudafricana. A menudo, los invitados se ofrecen a aportar alimentos.

¿Qué actividades pueden realizarse en una reunión además de ver la televisión, escuchar música o conversar? “Por lo general planeamos la velada de antemano —agrega Sanchia—. A veces hemos organizado algún juego, o alguien toca el piano y todos cantamos juntos.” Una chica africana llamada Masene comenta: “En ocasiones jugamos a las cartas, a las damas y al ajedrez”.

Jennifer, de quien se citó antes, dijo a ¡Despertad!: “En la congregación hay un anciano que nos invita a su casa a participar en juegos bíblicos. Para no jugar mal hay que conocer bien la Biblia”. El representante de ¡Despertad! preguntó luego a otros jóvenes: “¿No les parece que los juegos bíblicos están fuera de lugar?”. Casi a coro, contestaron: “¡No!”.

“Te ponen a prueba”, dijo una adolescente. “Son muy divertidos”, comentó otra. Cuando se hacen solo para divertirse, y no se exagera la competitividad, son agradables y educativos. (Consulta el artículo “Haciendo las reuniones agradables, pero provechosas” en ¡Despertad! del 22 de septiembre de 1972.)

Entretenimiento familiar

En tiempos bíblicos era común que la familia se divirtiera junta. (Lucas 15:25.) Sin embargo, los jóvenes escritores de The Kids’ Book About Parents (El libro de los hijos sobre los padres) comentan que “en estos días padres e hijos están tan ocupados que ninguno tiene tiempo de programar actividades [...]. Creemos que es importante que padres e hijos pasen tiempo juntos cada semana en actividades puramente recreativas”.

“El viernes es nuestro día de familia —dice una joven africana llamada Paki—. Por lo general jugamos juntos.” Y no hay que olvidar a los hermanos menores. Una joven llamada Bronwyn señala: “Me gusta dibujar y practicar otras artes con mi hermana menor”. ¿Podrías tomar la iniciativa y proponer pasatiempos para toda tu familia?

Cuando estás a solas

¿Qué puedes hacer si no tienes compañía? No por eso vas a quedarte aburrido y solitario. Hay muchas maneras divertidas y provechosas de llenar las horas; por ejemplo, los pasatiempos. Ya en tiempos bíblicos, hombres y mujeres vieron que estudiar música enriquece la vida. (Génesis 4:21; 1 Samuel 16:16, 18.) “Toco el piano —explica Raquel—. Es algo que puedo hacer cuando estoy aburrida.” Si no te atrae la música, tal vez te guste la costura, la jardinería, la filatelia o el aprendizaje de algún idioma. Una ventaja adicional de tales aficiones es que quizás adquieras destrezas que te resulten útiles en el futuro.

La Biblia nos dice que algunos hombres de fe, como Isaac, se retiraban a veces para meditar. (Génesis 24:63.) Un joven austríaco llamado Hans explica: “De vez en cuando me siento en un rincón tranquilo del jardín a contemplar la puesta de sol. Me hace sentir un gran gozo y me acerca más a Jehová, mi Dios”.

Puedes hallar “disfrute” en el servicio de Jehová

La Biblia profetizó que Cristo hallaría “disfrute” en el servicio a Jehová Dios. (Isaías 11:3.) Y aunque el servicio sagrado a Dios no entra en la categoría de diversión, puede ser una actividad grata que brinde refrigerio. (Mateo 11:28-30.)

Hans, a quien ya mencionamos, recuerda otra anécdota grata: “A mis amigos y a mí nos gusta recordar los fines de semana que pasamos en la construcción de un Salón de Asambleas [dedicado al culto]. Aprendimos a trabajar en equipo y ahora nos conocemos mejor. Al pensar en aquellos días, nos sentimos contentos de haber hecho algo útil y divertido”.

El testimonio de estos jóvenes cristianos deja bien claro este hecho: No tienes que privarte de pasar buenos ratos. Sigue los principios bíblicos. Sé imaginativo. Ten buenas iniciativas. Sabrás gozar de la vida de forma sana, y no autodestructiva.

[Nota]

a Consulta el artículo “Los jóvenes preguntan... ¿Por qué no puedo yo divertirme como los demás?”, de nuestro número del 22 de julio de 1996.

[Comentario de la página 22]

“Da gusto simplemente estar al aire libre con buenos amigos”

[Ilustración de la página 23]

No hay que gastar mucho para pasar un buen rato con los amigos

    Publicaciones en español (1950-2025)
    Cerrar sesión
    Iniciar sesión
    • español
    • Compartir
    • Configuración
    • Copyright © 2025 Watch Tower Bible and Tract Society of Pennsylvania
    • Condiciones de uso
    • Política de privacidad
    • Configuración de privacidad
    • JW.ORG
    • Iniciar sesión
    Compartir