BIBLIOTECA EN LÍNEA Watchtower
Watchtower
BIBLIOTECA EN LÍNEA
español
  • BIBLIA
  • PUBLICACIONES
  • REUNIONES
  • w53 15/3 págs. 185-188
  • La actividad ministerial de los testigos de Jehová

No hay ningún video disponible para este elemento seleccionado.

Lo sentimos, hubo un error al cargar el video.

  • La actividad ministerial de los testigos de Jehová
  • La Atalaya. Anunciando el Reino de Jehová 1953
  • Subtítulos
  • COSTA RICA
  • CUBA
La Atalaya. Anunciando el Reino de Jehová 1953
w53 15/3 págs. 185-188

La actividad ministerial de los testigos de Jehová

Informe tomado del “Yearbook” para 1953 (en inglés)

COSTA RICA

Una gran multitud de personas que en un tiempo eran presos de la organización de Satanás ahora está disfrutando de la libertad que viene mediante la organización de Jehová. Ciertamente hace regocijar el corazón de todos los siervos de Jehová en todo el mundo ver el aumento constante de la obra en Costa Rica, un país pequeño en la América Central. Hubo 1,583 publicadores participando regularmente en el servicio del campo, un aumento de 14 por ciento sobre el año anterior. Además, tuvieron un nuevo número máximo de 1,720 publicadores. El siervo de sucursal incluyó en su informe varias experiencias que les serán de verdadero interés a los lectores. Estas manifiestan que la adoración limpia es una cosa necesaria en la organización. Prueban que es necesario continuar reuniéndose con el pueblo de Jehová y seguir adquiriendo conocimiento. Este es el noveno informe anual de la sucursal costarricense, y todos nosotros nos sentimos felices con los hermanos al gozar ellos de dar la verdad a la gente de esa nación.

“Mientras más y más se llena de conocimiento la mente entendemos lo que significa ser testigos de Jehová y vivir en conformidad con el nombre. Muchas veces significa cambiar y arreglar nuestra vida personal de acuerdo con los requisitos de Dios. En una de las asambleas de circuito en febrero el siervo de distrito supo que dos de los asistentes, quienes habían estudiado con los hermanos por algún tiempo, iban a aprovecharse de su viaje a la sede de la provincia para casarse. Habían estado ansiosos de arreglar sus asuntos por algún tiempo para poder ser testigos y habían hecho arreglos para legalizar su matrimonio en la casa del gobernador la tarde del sábado de la asamblea. Sin embargo, para beneficio de los otros hermanos, se hicieron arreglos rápidamente para que la ceremonia se efectuara en el salón de asamblea. Después del programa de la tarde al tiempo señalado, el gobernador llegó con su secretario y toda la asamblea pudo presenciar el matrimonio. Fué una ocasión gozosa así como un ejemplo y amonestación a otros que todavía no han dado este paso teocrático. Fué especialmente efectivo el ejemplo cuando se hizo saber que esta pareja se hallaba en el crepúsculo de la vida, ambos siendo sexagenarios y habiendo vivido juntos sin casarse por más de treinta años. ¡Qué mayor testimonio podía haber para el nombre de Jehová y la obra que sus testigos están efectuando para ayudar a la gente a ser cristianos verdaderos que el que esta pareja anciana tuviera a sus nietos presentes, como siervos de Jehová, presenciando su matrimonio! Quizás estos hermanos estén avanzados en años y sufran impedimentos físicos, pero sus acciones obedientes muestran que han salido de la ‘cárcel’ de tinieblas del viejo mundo y están ansiosos de que otros vean sus ‘obras correctas’—1 Ped. 2:12, NM.

“La celebración del Memorial este año fué una ocasión gozosa y tuvo una concurrencia de 2,357 personas, 193 más que el año pasado. Un siervo de circuito escribió acerca de la celebración del Memorial en la pequeña compañía que visitó durante ese tiempo, llamada Pital de San Carlos, compuesta de unos 25 publicadores. Allí el Salón del Reino es pequeño y, confiando en llenarlo, los hermanos trabajaron concienzuda y celosamente en anunciar la reunión. Poco después de las 18 horas empezó a llover, lo cual generalmente significa que habrá pocos concurrentes, especialmente en lugares montañosos donde el viajar es difícil. Pero a pesar de la lluvia, los hermanos y las personas de buena voluntad comenzaron a llegar, algunos habiendo caminado de ocho a diez horas para llegar allí, otros llegando a caballo y todavía otros en botes pequeños por el río. Cuando la reunión comenzó el pequeño salón estaba atestado y muchos estaban de pie afuera en la lluvia, y cuando se sacó la cuenta final se supo que 133 personas habían oído el discurso y habían presenciado los emblemas pasar, sin que participara persona alguna, lo que manifestó que todos entendieron que eran de las otras ovejas de Jesús. Una maestra de escuela, que en un tiempo había sido la directora de la escuela y había prohibido que los niños concurrieran a las reuniones, había sido invitada por algunos hermanos y aceptó la invitación. Después de la reunión ella admitió francamente que los testigos de Jehová estaban enseñando la verdad, y ahora ella está estudiando con ellos. No importa cuán aislado sea el lugar o cuán esparcidos y pocos sean los habitantes, los que buscan la libertad están saliendo y manifestándose.

“Esto se manifestó en la experiencia de otro siervo de circuito que trabajaba con un precursor local en Puerto Cortez. Estaban haciendo esfuerzos para organizar una compañía pequeña y estaban buscando personas de buena voluntad que estuvieran anuentes a publicar. Trabajaron cuatro días, colocando literatura y comenzando estudios. Entonces en el quinto día, mientras trabajaban una de las haciendas, fueron dirigidos a la casa de un joven de quien decían los vecinos que era un testigo de Jehová. Después de encontrarlo se supo que este joven y un grupo de cinco más, todos hombres solteros, habían estado reuniéndose una vez a la semana para tener un estudio bíblico, en el cual leían y discutían diversas publicaciones de la Sociedad con sus Biblias. Todos los domingos antes de estudiar iban de casa en casa e invitaban a todos los vecinos a estudiar con ellos. Ellos dijeron que no había nadie allí que les mostrara cómo hacer la obra, de modo que ellos hacían lo mejor que podían y oraban a Jehová que enviara un siervo más capaz para ayudarlos. Pronto se estableció una compañía allí y estas ‘ovejas’ ahora están trabajando de manera organizada, librando a otros de la esclavitud.

“Parece que en las solitarias regiones montañosas es donde se tienen las mejores experiencias del campo. La verdad llegó a una de estas secciones aisladas llamada La Maravilla de Nicoya de una manera muy interesante. Un publicador de otra parte del país fué allá a visitar a su hermano carnal y contó cómo había llegado a ser testigo de Jehová. El hombre, que era todavía católico, se enfureció y ellos empezaron a discutir. La discusión comenzó a la hora de cenar y continuó hasta poco antes del amanecer, pero los dos terminaron de acuerdo. Los dos ahora eran testigos de Jehová y comenzaron a predicar en esa población, resultando en que un año después se tuviera una nueva organización de compañía.

“El mismo siervo de circuito, visitando otra compañía pequeña, trabajó toda la semana con unos cuantos publicadores invitando a personas al discurso público del domingo, pero sólo encontró a gente opuesta y descortés. No obstante, el domingo, aun cuando los caminos estaban mojados y lodosos y no se prestaban para caminar, comenzaron a llegar personas en grandes grupos. Doscientos sesenta y dos concurrieron al discurso público y todos salvo cinco se quedaron para el discurso de servicio que se pronunció después. Más de la mitad de los concurrentes jamás había asistido a una reunión de los testigos de Jehová. Sólo Jehová conoce a los que están buscando la libertad, y está usando a su Rey para dirigirlos a su organización.

“Los esfuerzos unidos de los siervos de Jehová en Costa Rica están dirigidos hacia el restablecimiento de la adoración pura de Jehová, y ellos están determinados a encontrar, alimentar, educar y equipar para el ministerio a las personas de buena voluntad a quienes el Rey ahora está llamando de las tinieblas. Damos gracias a Jehová por este privilegio tan bendito.”

CUBA

Los testigos de Jehová en Cuba siempre han rendido un informe excelente, y de nuevo encontramos a un grupo excelente de testigos de Jehová predicando las buenas nuevas cada mes. Ellos tuvieron un aumento de 6 por ciento, lo que quiere decir que un total de 8,634 publicadores rinde informes regularmente. Siendo éste un año para traer a todos los publicadores a la madurez, los cubanos también hicieron un gran esfuerzo en este respecto. No aumentaron mucho en publicadores nuevos, pero ciertamente tuvieron la oportunidad de ayudar a los que ya están en la verdad. Esto no quiso decir que no hubo nuevos que comenzaran en el servicio, porque 678 fueron bautizados durante el año, y éstos también necesitaron ayuda. Como los publicadores de otros países, los cubanos estaban deseosos de participar en la obra de territorio no asignado; por eso fueron a campos que no habían sido tocados muy a menudo en tiempos pasados. En otros lugares sucedió que no tenían ningún territorio aislado. El informe del siervo de sucursal es muy interesante. Manifiesta lo que los cubanos han hecho para ayudar a los presos a salir.

“Durante el año pasado un gran testimonio se dió en los hospitales por la cuestión de transfusiones de sangre. Los testigos de Jehová se enferman aún y algunos tienen que ir a los hospitales para ser operados. Casi todos los hospitales exigen que se dé sangre para el operado. Naturalmente, los hermanos rehusaron y esto resultó en una oportunidad para que ellos dieran un buen testimonio concerniente a los propósitos de Dios. A veces habría hasta quince o veinte doctores y enfermeras congregados, escuchando la evidencia bíblica presentada por los hermanos. Durante el año pasado varios testigos de Jehová han sido operados sin recibir transfusiones de sangre y todos han tenido restablecimiento rápido, sorprendiendo y consternando a los doctores.

“Muchos recordarán a 1952 como el año de trabajar los rincones. El ir a los lugares lejanos y difíciles de alcanzar para dar el testimonio y encontrar a las personas semejantes a ovejas fué un desafío a los hermanos. ¿Podrían hacerlo? Aquí no es tan fácil ir a estos lugares aislados. Casi todos tienen que ir mediante transporte público, ya sea por autobús, barco, tren o avión. Una unidad de La Habana escogió la isla de Pinos, localizada a unas 100 millas de la costa meridional de Cuba. Dos veces hicieron el viaje. La primera vez 26 hermanos fueron por tren y barco a un costo de $430. La segunda vez 13 fueron por avión a un costo de $200. La colocación de literatura fué sorprendente y las experiencias de los hermanos fueron conmovedoras. En el primer viaje colocaron 127 libros, 364 folletos, 390 revistas y 7 suscripciones; esto a pesar de lluvias fuertes. En su segundo viaje presentaron tres discursos públicos, uno en la cárcel nacional para hombres, otro en un teatro y el tercero en un parque público, con una concurrencia combinada de 349. Los hermanos de esta unidad hicieron sacrificios, salvaron obstáculos y llevaron a los moradores de Pinos las buenas nuevas del Reino.

“La unidad Central de La Habana alquiló un autobús para casi todos los fines de semana de la campaña en territorio no asignado, a un costo de cientos de dólares para los hermanos. ¿Qué resultado se notó? Varios pueblos con su territorio rural circundante fueron trabajados completamente, se colocó mucha literatura, cientos de nombres de personas de buena voluntad fueron entregados a la Sociedad, y nuevo celo se les infundió a los hermanos. Las horas por publicador subieron a 16.7 y la concurrencia a las reuniones aumentó.

“Se reciben experiencias de todas partes de la república, contando de los trabajos que se aguantaron y los sacrificios que se hicieron para llegar al territorio no asignado. Los hermanos de la compañía de Pinar del Río, quienes tenían que viajar lejos a su territorio, hicieron planes para permanecer en el territorio tres días. Ellos llevaron alimento y utensilios de cocina. Encontraron tanta buena voluntad que a las hermanas se les proporcionaron camas para dormir en las casas de personas de buena voluntad, y a los hermanos se les proporcionó una casa vacía donde pudieron colgar sus hamacas. Muchos formularios informando de personas de buena voluntad fueron enviados a la Sociedad de ese lugar.

“No todas las compañías pudieron trabajar territorios no asignados, porque no había territorio no asignado cerca de algunas de ellas. La compañía de Cueva de Agua, que tiene 78 publicadores asociados, sólo tiene 600 casas que visitar.

“Ya se está viendo la reacción a las cartas enviadas a la gente que vive en territorio no asignado. Un marinero que vive en la isla de Pinos escribió: ‘Tengo en mi poder dos cartas que me fueron enviadas, en las que veo el humanitarismo de esta Sociedad, al interesarse en el mejoramiento de la humanidad,’ etc. Otra carta dice: ‘Ruego que me perdonen el no haber contestado más pronto sus muy estimadas cartas, con las que me han honrado en cumplimiento de su servicio misionero,’ etc.

“Durante el pasado año de servicio siete hermanos cubanos se graduaron de Galaad y cinco de ellos ya están en su nueva asignación en Nicaragua. Otros dos están sirviendo como siervos de circuito, esperando el tiempo cuando puedan llegar a su nueva asignación también.

“El año pasado fué otro año bendito para todos los verdaderos siervos de Jehová. Vieron a muchos presos salir de la organización babilónica y se han regocijado de haber participado en su liberación.

“Todos continuaremos uniendo nuestra voz en la invitación a los presos a ‘salir’, hasta que nadie más haya de salir.”

    Publicaciones en español (1950-2025)
    Cerrar sesión
    Iniciar sesión
    • español
    • Compartir
    • Configuración
    • Copyright © 2025 Watch Tower Bible and Tract Society of Pennsylvania
    • Condiciones de uso
    • Política de privacidad
    • Configuración de privacidad
    • JW.ORG
    • Iniciar sesión
    Compartir