La actividad ministerial de los testigos de Jehová

Informe tomado del “Yearbook” para 1953 (en inglés)

PERÚ

En el país de habla hispana del Perú la obra ha avanzado mucho. Aquí, también, encontramos a muchas personas inclinándose a Jehová en la hermosura de la santidad. El aumento en el número de los asociados con el pueblo de Jehová ha traído verdadero gozo al corazón de todos. Doscientos sesenta publicadores participaron en el servicio del campo cada mes. Esto representa un aumento de 29 por ciento sobre el año anterior. Sólo hay nueve compañías organizadas a través del país, pero hay muchas personas esparcidas aquí y allá que están leyendo y estudiando y que pronto serán publicadores. El trabajo en territorio no asignado se empezó, pero casi todo el Perú es territorio no asignado. Los hermanos se regocijaron mucho durante la campaña de tres meses, saliendo de su territorio local a territorio nuevo. Los hermanos tuvieron algunas experiencias interesantes, y el siervo de sucursal da a conocer algunas.

“Nuestro precursor especial en Chosica cuenta cómo ha podido establecer cinco estudios en Casapalca aceptando la invitación de uno de los publicadores de visitar algunas ‘ovejas’ que había encontrado en esta pequeña población minera. Este publicador, guardafrenos del ferrocarril, halló el interés testificando a otros empleados por unos cuantos minutos cada vez que se encontraba con ellos al pasar por esta estación. Una pareja ahora se mudó a Callao, donde la esposa es una publicadora activa.

“De Arequipa un misionero informa que un sacerdote se dirigió a él y le exigió que saliera de su parroquia inmediatamente. Fracasando en esto, pronto regresó con un policía. El misionero explicó la obra al policía, pero éste lo llevó a la jefatura de policía. Allí él explicó de nuevo nuestra obra, aunque el sacerdote continuaba interrumpiendo. Por fin el jefe le dijo al sacerdote que se callara, y terminó encomiando nuestra obra, contribuyendo por un libro y un folleto, y ofreciendo ayudar si surgiera más dificultad. Desde Ica se recibieron informes de una victoria semejante, con un civil como el querelloso en vez de un sacerdote.

“No encontrando en casa a la familia con quien tenía un estudio bíblico, una misionera tomó la iniciativa de testificar a otras personas que estaban cuidando la casa. El señor mostró interés, y un estudio se empezó.

“Mucho nos alegramos al tener la ayuda de seis más graduados de Galaad este año. Uno de ellos cuenta lo siguiente: ‘Esta pareja escuchó tan atentamente que ofrecí volver la siguiente semana para estudiar La Atalaya con ellos. Consintieron gozosamente. Cada semana la concurrencia aumentó hasta que seis o siete concurrían regularmente. Entonces una persona que concurría me preguntó si me sería posible visitarlos en su casa para provecho de sus hijos. Ahora tenemos de cuatro a diez personas asistiendo a su estudio. Hace como dos semanas una persona de esta familia preguntó: “¿Podría usted ir conmigo a otra casa? La familia está angustiada; necesita un estudio bíblico.” Esto resultó en otra familia de cinco estudiando.’

“De sólo el nombre y la dirección de una persona de buena voluntad resultó una experiencia excelente. Él era un católico que jamás había leído la Biblia, pero le había gustado el testimonio que por casualidad había oído. Como no teníamos ninguna literatura, empezamos a estudiar con el tratado ¿Qué creen los testigos de Jehová? Quedó impresionado. En la segunda visita estudiamos ¡Despierten del sueño! y con eso quiso su propia Biblia y un estudio en el libro ‘Sea Dios Veraz’. En su segunda visita al Salón del Reino trajo a uno de sus discípulos de música.

“El sistema valioso de concentrar el servicio en los grupos de estudio de libro de compañía ha sido puesto en uso más pleno, se ha hecho más definida la distinción entre personas de buena voluntad que incidentalmente hablan del mensaje y los que participan activamente en la obra de puerta en puerta cuando están físicamente capacitados, y más de los deberes de la compañía han sido colocados en los hombros de los hermanos locales. Cuarenta y cinco simbolizaron su dedicación mediante bautismo. Pero nos damos cuenta de que todavía tenemos mucho que hacer en la obra en el Perú; de modo que al principio de este nuevo año de servicio estamos determinados a trabajar aun más concienzudamente para lograr la madurez, que es tan esencial para el aumento.”