Haga que su testificación en las calles sea productiva
1 La testificación en las calles no es algo nuevo. A Jeremías se le instruyó que proclamara su mensaje “en las calles de Jerusalén” (Jer. 11:6). Jesucristo enseñaba en los “caminos anchos” de las ciudades y aldeas que visitaba (Luc. 13:22, 26). Aunque el visitar de casa en casa es el método principal que usan los testigos de Jehová del día moderno para ponerse en contacto con las personas, la testificación en las calles sigue siendo una manera eficaz de dar publicidad al mensaje del Reino.
2 Sea que usted testifique en las calles sólo de vez en cuando o dedique una cantidad considerable de tiempo a este rasgo del ministerio, usted querrá que cada hora de su testificación en las calles sea tan productiva y provechosa como sea posible. ¿Cómo? ¿Qué se puede hacer? Primero, tenga presente que su objetivo es ponerse en contacto personal con cuantas personas pueda, para compartir con ellas las buenas nuevas. Teniendo presente esa meta, escoja los sitios por donde pasen regularmente muchas personas. Algunos hallan que las zonas comerciales, los lugares cerca de las paradas de autobuses o del metro, o subterráneo, o parques concurridos son buenos sitios. También, durante las horas de la mañana cuando las personas van al trabajo y al atardecer cuando vuelven de él, la testificación en las calles puede ser muy eficaz. Puede encontrarse con las personas a medida que ellas entran en los edificios de vivienda que tienen muchas medidas de seguridad, o en otros lugares donde es difícil entrar, o cuando salgan de éstos.
CÓMO HACERLO
3 ¿Qué se puede decir con relación a nuestra manera de testificar en las calles? Si uno no está impedido, así que puede moverse libremente, por lo general es más eficaz abordar a los transeúntes, en vez de esperar que ellos lo aborden a uno. Al hacerlo, escoja a quiénes abordar, sea discernidor y considerado. Es sabio evitar a personas que parece que pueden causar problemas. Ante todo, sea amigable, cordial, atento y digno en su manera de abordar. Procure mirar a la persona a los ojos. Esfuércese por hacer preguntas directas y que hagan pensar, a fin de despertar el interés de la persona en las revistas. Si alguien muestra interés en el mensaje, discretamente pídale el nombre y la dirección para que se le pueda revisitar. En algunos territorios tal vez sea mejor trabajar con otros publicadores; no obstante, para lograr el máximo, trabajen separados, pero suficientemente cerca para ayudarse unos a otros.
4 El testificar regularmente en un mismo lugar a horas específicas puede mejorar la eficacia de su testificación en las calles. Los que así lo han hecho han descubierto que las personas los llegan a conocer y se hacen amigables. En una congregación una hermana de mayor edad hizo esto. A veces, si debido a enfermedad ella no estaba donde las personas acostumbraban verla, hasta escribían a la congregación preguntando por qué no estaba allí.
5 En su territorio, ¿encuentra usted muchos hogares en los que no hay nadie? Eso le sucedió a una pareja, así que decidieron trabajar en una calle cercana. En una hora cada uno colocó 17 revistas en manos de las personas. Varias de las personas con quienes hablaron indicaron que vivían precisamente en el territorio que los publicadores acababan de trabajar esa mañana.
6 No hay duda que la testificación en las calles puede producir, y de hecho produce, resultados excelentes. Nuestra mismísima presencia en los lugares públicos recomienda el mensaje que llevamos. Un periódico canadiense comentó: “Debe requerir valor estar parados allí y ofrecer estas revistas a los transeúntes. Los testigos de Jehová que lo hacen no parecen sentirse avergonzados ni cohibidos, y obviamente están orgullosos de la publicación”. A cierto reportero de un periódico de Quebec, Canadá, le impresionó el servicio celoso que rendía en toda clase de tiempo una joven testigo de Jehová que regularmente testificaba en cierta intersección de calles. Se entrevistó con ella para su periódico, y esto resultó en un excelente testimonio. (Vea ¡Despertad! del 22 de junio de 1977, páginas 9-11.)
7 Usted, también, puede testificar en las calles y ser productivo. Sin falta, Jehová bendecirá sus esfuerzos sinceros por valerse de este rasgo del servicio para comunicar la verdad del Reino a las personas de su territorio.