“Sigan haciendo esto en memoria de mí”
1 Los seres humanos tienden a olvidar con el tiempo la significación de los asuntos importantes; de ahí que Jesús, al instituir “la cena del Señor”, ordenara a sus discípulos: “Sigan haciendo esto en memoria de mí”. Desde entonces, en el aniversario de la muerte de Jesús, los cristianos obedientemente han seguido “proclamando la muerte del Señor, hasta que él llegue” (1 Cor. 11:20, 23-26).
2 Dentro de muy poco, Jesús recibirá en la morada celestial a los últimos miembros del resto del “rebaño pequeño”, cuyo número sigue menguando (Luc. 12:32; Juan 14:2, 3). Este año, tanto el resto de los ungidos como la gran muchedumbre de “otras ovejas”, que va en continuo aumento, tendrán nuevamente el privilegio de observar la Cena del Señor el 11 de abril (Juan 10:16; Rev. 7:9, 10). Nuestra gratitud por el gran amor de Jehová al enviar a su Hijo unigénito a favor de la humanidad se intensificará. Se pondrán de relieve el ejemplo de Jesús, su amor, su fidelidad hasta la muerte al proporcionar el rescate, y su dominio actual como el Rey del Reino establecido de Dios, al igual que las bendiciones que el Reino traerá a la humanidad. ¡Una ocasión digna de conmemorar!
3 Preparémonos desde ahora: Procuremos hacer de la Conmemoración una época de júbilo y gratitud para nosotros y para quienes nos acompañen en su celebración. Podemos preparar el corazón volviendo a leer los pasajes bíblicos de los últimos días del ministerio de Jesús y los hechos que culminaron en su muerte. Varias semanas antes de la Conmemoración podemos dedicar el estudio de familia a repasar los capítulos 112 a 116 del libro El hombre más grande.
4 ¿A cuántas personas conoce usted que tal vez vayan a la Conmemoración si toma la iniciativa de infundirles aprecio por esta ocasión, invitarlas y hacer que se sientan acogidas? Prepare una lista desde ahora y haga lo sumo posible por ayudarlas a estar presentes. Después, ayúdelas a seguir creciendo en sentido espiritual animándolas a acudir regularmente a las reuniones.
5 Durante la época de la Conmemoración se harán planes especiales para que todos tengan más oportunidades de predicar. Si se traza un buen programa, ¿podría ser precursor auxiliar en abril, o en mayo? Una de las mejores maneras de mostrar que recordamos con gratitud todo lo que el sacrificio de Jesús significa para nosotros es hablando acerca de nuestro Dios, Jehová, y de las bendiciones que el Reino traerá mediante su Hijo (Sal. 79:13; 147:1).