El desempleo... todavía un problema mundial
EL DESEMPLEO es un problema que tiene que ver con más que el simplemente no tener trabajo. “Gradualmente se va perdiendo la dignidad, el sentido de identidad y el contacto con el mundo de afuera”, respondió un ex profesor. Otro desempleado dijo: “Me siento muerto por dentro”. Algunos que se han quedado sin trabajo han llegado a tal grado de desesperación que han amenazado de muerte a asesores de empleo.
Pero la complejidad del problema se está haciendo más evidente a medida que la cantidad de personas desempleadas aumenta alrededor del mundo. “En el Tercer Mundo, más de 500.000.000 de personas están desempleadas o tienen empleo parcial, de acuerdo con la Organización Internacional del Trabajo”, informó el periódico The Toronto Star. “En Europa y Norteamérica otros 50.000.000 de personas están desempleadas”, agregó la misma fuente, indicando el alcance de la situación. En Canadá se repartieron $6.800 millones en subsidios de paro durante un período de diez meses, cantidad que es aproximadamente 72 por 100 mayor que la del mismo período del año anterior. Además, en Canadá aumentó recientemente el porcentaje de personas desempleadas a 13,5 por 100, en comparación con el porcentaje anterior de 11,2 por 100.
Aunque en los Estados Unidos el porcentaje de desempleo ha bajado a 8 por 100 en 1984, en algunos estados el porcentaje ha alcanzado hasta 14,9 por 100.
“Para los más de 10.000.000 de estadounidenses que desesperadamente necesitan y quieren hallar empleo, el recobro ni siquiera está a la vista”, informó para la revista U.S.News & World Report Lane Kirkland, presidente de un sindicato laboral.
Las perspectivas de trabajo en Gran Bretaña son poco prometedoras también. Un informe emitido por el Grupo Económico de Cambridge predice que para fines de esta década la cantidad de desempleados podría aumentar a más de cuatro millones de personas.
En el Japón y en ocho países de Europa hay más personas desempleadas que las que hubo el año pasado, dice The Economist del 18 de febrero de 1984. En el pasado invierno la República Federal de Alemania tuvo las cifras de desempleo más altas de la historia posbélica del país.
En Yugoslavia, “hasta 15 por 100 de los trabajadores de la nación —aproximadamente 900.000 personas— están sin empleo, y todavía siguen aumentando las filas de los desempleados”, informa la revista U.S.News & World Report.
En Costa de Marfil, uno de cada cinco trabajadores está sin empleo, calcula la revista Time.
Las consecuencias
Muchas personas no se dan cuenta de las consecuencias sicológicas, físicas y sociales que experimentan las personas desempleadas y sus familias. Tampoco se dan cuenta de cómo las perspectivas de trabajo poco prometedoras contribuyen a las frustraciones de los que están sin empleo. El estar sin trabajo “puede tener efectos devastadores en los empleados y sus familias”, dijo un informe sobre el desempleo. Éste explicó: “Se ha documentado bien la afirmación de que la falta de dignidad, el insomnio, la tirantez en las relaciones familiares, la violencia doméstica, la depresión, el abuso de las bebidas alcohólicas y hasta el suicidio son resultados de la pérdida del empleo”. Los titulares de algunos periódicos afirman: “El suicidio y el delito se relacionan con el desempleo”.
Hay quienes ponen en tela de juicio la relación entre el suicidio y la economía, pero investigadores estadounidenses indican que en los Estados Unidos los suicidios han aumentado en 13 por 100 durante un período de tres meses, durante el cual el “aumento correspondiente del índice de desempleo fue de 28 por 100”. De acuerdo con el análisis que hicieron éstos, “un aumento del índice anual de desempleo en una parte decimal de porcentaje resulta en 320 suicidios adicionales por año en el caso de los hombres”.
Los efectos sicológicos negativos son graves. “El desempleo es un asesino”, dijo otro titular. El artículo decía que resultaba en aumento de las enfermedades cardiovasculares y los homicidios. Hugh Drummond, doctor en medicina y periodista, dijo que el desempleo era “una de las mayores amenazas que haya habido contra la salud”. Cierto ministro declaró: “He enterrado a hombres que, según creo, han muerto debido al desempleo”.
Si usted está sin empleo, ¿puede hacer algo para enfrentarse a los estragos del desempleo? ¿Hay maneras de arreglárselas hasta que uno vuelva a tener empleo? ¿Hay maneras de crear empleos, o de hallar otro tipo de empleo? ¿Qué se puede hacer respecto al estado de ánimo, el cual es esencial para mantener el equilibrio?
[Tabla en la página 3]
ÍNDICE DE DESEMPLEO
Australia 9,5% Bélgica 14,8%
Canadá 11,2% Francia 9,8%
Rep. Fed. de Holanda 17,8%
Alemania 8,8% Japón 2,6%
Italia 12,6% Suiza 1,0%
Suecia 3,7% E.U.A 8,0%
Reino Unido 12,5%
(Fuente: The Economist, 18 de febrero de 1984)