BIBLIOTECA EN LÍNEA Watchtower
Watchtower
BIBLIOTECA EN LÍNEA
español
  • BIBLIA
  • PUBLICACIONES
  • REUNIONES
  • g86 22/10 pág. 28
  • De nuestros lectores

No hay ningún video disponible para este elemento seleccionado.

Lo sentimos, hubo un error al cargar el video.

  • De nuestros lectores
  • ¡Despertad! 1986
  • Subtítulos
  • Información relacionada
  • Niños que no han nacido
  • Carta de una madre cuyo niño no nació
    ¡Despertad! 1986
  • ¿Qué dice la Biblia sobre el aborto?
    Preguntas sobre la Biblia
  • El aborto
    ¡Despertad! 2017
  • De nuestros lectores
    ¡Despertad! 1987
Ver más
¡Despertad! 1986
g86 22/10 pág. 28

De nuestros lectores

Niños que no han nacido

Tengo cuatro hermosos hijos. Nunca me ha conmovido tanto un artículo como el que se titula “Carta de una madre cuyo niño no nació” (22 de julio de 1986). Yo he quitado la vida a dos inocentes a quienes nadie conocerá. Además, el saber que Jehová era su único amigo me duele tanto que casi no puedo soportarlo. Actualmente estudio con un testigo de Jehová y sinceramente estoy tratando de aplicar lo que he aprendido. Esta carta me ha hecho comprender el acto atroz que cometí. Deseo hacer saber a esa madre que su carta me ha dado el valor y la determinación sinceros para enseñar a mis hijos que viven todo lo que yo aprenda acerca de Jehová, para que puedan salvar sus vidas. Ahora comprendo el sentido de la escritura que dice ‘recibiendo en sí mismo la recompensa completa’. (Romanos 1:27.) Muchísimas gracias.

T. S., Estados Unidos

Acabo de leer la “Carta de una madre cuyo niño no nació”, y me ha perturbado muchísimo. Me ha perturbado porque yo, también, soy madre de un niño que no nació. Yo también tengo tres hijos hermosos, y cuando los veo me pregunto cómo podía haber cometido un acto tan horrible. Aunque no conocía la verdad cuando me sometí a un aborto, todavía me remordía la conciencia. Ahora que conozco a nuestro maravilloso Creador, Jehová, me atormenta aun más el que yo haya cometido este acto terrible contra una de sus criaturas. Yo también desearía repetir lo que la madre dijo en su carta. Si hay alguien que esté contemplando someterse a un aborto, por favor no lo haga. El recuerdo verdaderamente persigue a uno el resto de la vida. Que busque a Jehová y sus caminos justos y confíe en que él la ayudará. Por favor, no cometa el mismo error que nosotras cometimos.

Otra madre apesadumbrada, Estados Unidos

Deseo darles las gracias por la “Carta de una madre cuyo niño no nació”. A mí también me atormenta esta culpabilidad que constantemente siento. Diferente a la señora del artículo que tiene tres hijos hermosos, ahora yo no puedo tener hijos. Tengo un remordimiento que no me deja olvidar que yo también asesiné a mi propio hijo. He aprendido la verdad ahora y mi confianza en Jehová me ayuda a sobrellevar esta carga. Lo lamento mucho.

C. D., Estados Unidos

No entiendo por qué tuvieron que publicar la “Carta de una madre cuyo niño no nació”. Comprendo que fue con la intención de evitar futuros abortos, con lo cual yo estoy totalmente de acuerdo. No obstante, muchos entre nosotros hemos llegado a conocer la verdad y hemos abandonado los modos de vivir que permitían tal práctica. Cuando llegamos a conocer a Jehová y su tierno amor misericordioso, contamos con que él nos perdonaría este terrible pecado. El artículo me hizo sentir como si debería llevar conmigo esta carga de culpabilidad toda la vida.

De alguien que procura servir a Jehová con una conciencia limpia, Estados Unidos

La carta fue una expresión de los sentimientos de la autora y no tenía la intención de agobiar a nadie con sus sentimientos de culpabilidad. Ciertamente podemos confiar en que si confesamos nuestros pecados a Dios y corregimos nuestro proceder, Dios no solo perdonará nuestros pecados, sino que también nos limpiará de toda injusticia. (1 Juan 1:9.) Aunque el perdón de Dios es genuino, este presente sistema de cosas no quita todas las consecuencias físicas y emocionales que resultan de nuestras acciones. Pero se nos asegura que en el nuevo sistema de Dios, las cosas anteriores no serán recordadas ni subirán al corazón. (Isaías 65:17.) La carta se publicó para mostrar las tristes consecuencias que resultan de quitar una vida humana.—La dirección.

    Publicaciones en español (1950-2025)
    Cerrar sesión
    Iniciar sesión
    • español
    • Compartir
    • Configuración
    • Copyright © 2025 Watch Tower Bible and Tract Society of Pennsylvania
    • Condiciones de uso
    • Política de privacidad
    • Configuración de privacidad
    • JW.ORG
    • Iniciar sesión
    Compartir