El excepcional teleférico de Utah

EL “TELEFÉRICO más empinado del mundo”. Así se anuncia el Skytram en la cascada Velo de Novia, en el cañón del Provo (Utah, E.U.A.). “¿Cómo puede ser eso?”, me pregunté. Recuerdo que hace unos quince años subí en un teleférico de Cataluña (España) para visitar las montañas de Montserrat, y a mí me pareció más empinado. ¿Por qué dicen, entonces, que el más empinado es este de aquí, en la cascada Velo de Novia? Porque salva un desnivel de 374 metros en un trayecto de 534 metros, lo que significa que describe un ángulo que sobrepasa por término medio los 45 grados. Cuando la cabina se acerca a la estación superior, a una altitud de 1.900 metros, ¡el ángulo llega a ser de 62 grados!

Estos no son más que datos técnicos. Cabe decir, no obstante, que el trayecto en sí, hecho en una cabina de seis plazas, es verdaderamente hermoso. Al ascender desde la carretera, a una velocidad media de ocho kilómetros por hora, dejamos a la izquierda la cascada Velo de Novia y enseguida nos vemos rodeados de escarpadas montañas: detrás de nosotros, el monte Timpanogos —de unos 3.600 metros de altitud—, y delante, el que estamos subiendo: el monte Cascade. La cascada, de 180 metros de altura, forma un escalón, y termina rompiendo en el río Provo. Parte del agua se canaliza hacia una central hidroeléctrica situada a seis kilómetros de distancia.

Este teleférico, de fabricación suiza, se inauguró en 1962 y ha transportado a más de un millón y medio de personas sin un solo accidente grave. En caso de que le dé un poco de miedo subir en un teleférico, un folleto informativo afirma: “Los teleféricos, como este Skytram, son, histórica y estadísticamente, el medio más seguro de viajar entre dos puntos”. La próxima vez que vaya en teleférico, ¿por qué no averigua si es más empinado que este de Utah?

[Reconocimiento en la página 31]

Cortesía de Mountainland Travel Region