Preguntas de los lectores
● En 1 Reyes 7:23 y 2 Crónicas 4:2 se nos dice que el mar fundido circular que estaba en el patio del templo de Salomón medía diez codos de orilla a orilla y que “se necesitaba una línea de treinta codos para rodearlo.” ¿No es esto incorrecto, en vista de que es imposible lograr un círculo con estos dos valores?—H. S., EE. UU.
No hay razón para concluir que los escritores fueron culpables de error serio. Jeremías, quien escribió Primero de Reyes, y Esdras, quien escribió Segundo de Crónicas, fueron hombres confiables que escribieron estos relatos bajo inspiración divina. Hoy en día, en los cálculos matemáticos, se acostumbra usar pi, que denota la proporción de la circunferencia de un círculo con su diámetro. Según la práctica general, es una cantidad que equivale a 3,1416. Sin embargo, en tiempos antiguos, las personas no llevaban los decimales hasta la última fracción. Por eso, pi misma no solo es 3,1416. Las personas que insisten en exactitud escrupulosa y consideran equivocada la Biblia al dar las medidas del mar fundido harían bien en comprender que, para ser más exactas ellas mismas, sería apropiado llevar pi a por lo menos ocho cifras decimales, lo cual sería 3,14159265, aunque hasta una cifra excesiva de 3,1415926535 se podría usar.
El comentador bíblico Cristóbal Wordsworth cita a cierto Rennie, quien hizo esta interesante observación en cuanto a las medidas del mar fundido: “Hasta el tiempo de Arquímides [tercer siglo a. de la E.C.], la circunferencia de un círculo siempre se medía con líneas directas por el radio; e Hiram naturalmente describiría el mar como de treinta codos de circunferencia, midiéndolo, como entonces era invariablemente la práctica, por su radio, o semidiámetro, de cinco codos, que aplicándose seis veces alrededor del perímetro, u ‘orilla,’ daría los treinta codos que se expresan. Evidentemente no se intentaba en el pasaje sino dar las dimensiones del mar, en el idioma acostumbrado que todos entenderían, midiendo la circunferencia de la manera en que todos los obreros hábiles, como Hiram, medían los círculos en aquel tiempo. Él, por supuesto, sin embargo debe haber conocido perfectamente bien, que como el hexágono poligonal inscrito así por el radio medía treinta codos, la verdadera circunferencia curva mediría algo más.”
Según 1 Reyes 7:23 y 2 Crónicas 4:2, el mar fundido medía diez codos, ó 4,57 metros, de diámetro y se necesitaba una línea de treinta codos, ó 13,72 metros, para circundarlo. Eso es una proporción de uno a tres, que, con propósitos prácticos, era bastante adecuada por causa de un registro. Por lo tanto, Jeremías y Esdras, dieron cifras aproximadas, que, por supuesto, satisfacen a los estudiantes bíblicos pensadores.