¿Puede este libro ayudarle a tener éxito en la vida?
NADIE en la Tierra puede saber con certeza cuántos libros se han producido a través de la historia humana. De hecho, un hombre sabio dijo una vez: “El hacer muchos libros no tiene fin, y el aplicarse mucho a ellos le es fatigoso a la carne.” (Ecl. 12:12) ¡Qué cierto es eso!
No obstante, hay un libro que es singular entre los demás. En sus versiones comunes, está compuesto de 66 libros individuales. Tiene 1.189 capítulos. Y, en muchas traducciones, contiene 31.102 versículos.
Si usted se pusiera a leer y a meditar sobre solamente un versículo al día, le tomaría más de 85 años terminar el libro. Esto es más de la expectativa de vida normal de la gente hoy día. De hecho, este mismísimo libro del cual estamos pensando dice de los humanos: “En sí mismos los días de nuestros años son setenta años; y si debido a poderío especial son ochenta años, sin embargo en lo que insisten es en penoso afán y cosas perjudiciales; porque tiene que pasar rápidamente, y volamos.”—Sal. 90:10.
Este libro es la Biblia. Y el estudiar este libro de la manera debida requeriría más tiempo que la vida normal de un ser humano.
SE LE TIENE EN ALTA ESTIMA
Abraham Lincoln, el decimosexto presidente de los Estados Unidos, una vez declaró: “Creo que la Biblia es la mejor dádiva de Dios al hombre.” Verdaderamente, millones de personas tienen la Biblia en alta estima. Por ejemplo, el autor Henry van Dyke declaró:
“Nacida en el Oriente y llevando el estilo y apariencia oriental, la Biblia transita las sendas de todo el mundo con pies que son familiares y entra en país tras país y en todo lugar halla el respeto que merece. Ha aprendido a hablar en centenares de idiomas al corazón del hombre. Los niños escuchan sus relatos con admiración y deleite, y los sabios reflexionan en ellos como parábolas de la vida. Los inicuos y los orgullosos tiemblan ante sus advertencias, pero para los heridos y los contritos tiene la voz de una madre. Se ha entretejido en nuestros sueños más acariciados; de modo que el Amor, la Amistad, la Compasión, la Devoción, el Recuerdo, la Esperanza, se ponen las hermosas prendas de vestir de su habla atesorada. Ningún hombre es pobre ni se halla desolado si tiene este tesoro como suyo.”
Algunas personas, debido a los puntos de vista religiosos que abrigan, tal vez se sientan impelidas a hacer declaraciones laudatorias en cuanto a la Biblia. El decir algo bueno respecto a ella pudiera parecerles ‘lo apropiado.’ Sin embargo, aparentemente mucha gente ha buscado con gran seriedad conocimiento de las Santas Escrituras. Por ejemplo, John Quincy Adams declaró: “Por muchos años he tenido la costumbre de leer la Biblia entera cada año.”
¿Qué sucedería si usted optara por leer la Biblia entera cada año? Supongamos que usted hiciera esto, no apresuradamente, sino detenidamente, dándose tiempo para meditar. ¿Habría mejora en la calidad de su vida? Usted tendría derecho a pensar así si el estadista británico W. E. Gladstone tuviera razón en algo que dijo. Él declaró: “La Biblia se distingue por un Origen especial, y la distancia que la separa de todos sus rivales es inmensurable.”
Por lo tanto, esencialmente usted tiene derecho a preguntar: ¿Realmente me beneficiaría el aumentar mi conocimiento de la Biblia? ¿Puedo esperar que este libro, que generalmente se asocia con el cristianismo, me ayude a tener éxito en la vida?