Una planta versátil
Por el corresponsal de “¡Despertad!” en Australia
¿QUÉ tal le parecería si pudiera plantar una hortaliza que le supliera algún alimento a usted y su familia por hasta 20 años? ¿Qué hay si la planta produjera así sin tener usted que replantarla o cultivarla mucho? ¿No le parecería aún más atractiva si la planta tuviera el hábito de producir cuando otras hortalizas rinden poco? ¡Bueno, esa planta versátil es el espárrago! Y para ese largo surtido, una familia de cinco solo necesita unas 12 cepas.
¿Se pregunta usted acerca de su valor nutritivo? Bueno, el espárrago contiene cantidades variantes de calcio, fósforo, sodio, potasio y hierro, así como también de las vitaminas A, B1, B2, C y niacina... todos necesarios para una dieta saludable. ¡Eso en sí mismo es buena razón para incluir el espárrago en la era de su huertezuela hogareña!
Este pariente sabroso del lirio regio ha estado haciendo más interesantes las minutas desde que lo cultivaron los antiguos egipcios. Para el año 200 a. de la E.C. los romanos estaban registrando información acerca de su cultivo.
Muchas personas consideran el espárrago una hortaliza común, pero otras lo clasifican como un lujo delicioso. Aunque por lo general se vende en latas, los turiones frescos también tienen un sabor deleitable. Tanto el espárrago blanco como el verde se cultivan comercialmente, posiblemente el verde es mejor para el hortelano casero porque combina mayor valor alimenticio con un sabor mejor.
En el cultivo del espárrago blanco, se plantan las cepas en zanjas y se construyen montecillos por encima de ellas para descolorar los turiones antes que sobresalgan del terreno. Para conseguir el espárrago verde, no se cubren con tierra. Se cortan los tallos o turiones cuando tienen de 18 a 23 centímetros de altura.
El cultivo del espárrago
Se puede cultivar el espárrago de semillas o se pueden comprar las cepas en un semillero. Es interesante que las plantas machos producen una cosecha mucho más abundante que las plantas hembras. Se puede ver la diferencia entre las dos plantas durante la segunda temporada cuando las hembras producen semillas. El espárrago no está limitado a terreno de un solo tipo. Sin embargo, hay que drenar bien el terreno (especialmente si es pesado) y regarlo bien si es arenoso.
La preparación del terreno debe incluir el cavar en él estiércol de animales o materia orgánica podrida. Las cepas deben plantarse a unos 76 centímetros unas de otras en un pequeño montón de terreno en una zanja de 20 centímetros de profundidad y 30 centímetros de ancho. (Previamente se debe haber aplicado un abono completo a la era.) Entonces se deben cubrir las cepas con cinco centímetros de tierra, y la era debe mantenerse bien cultivada hasta que aparezcan los primeros brotes. A medida que se desarrollan las plantas, se debe llenar la zanja gradualmente de tierra. En el caso del espárrago blanco, se deben elevar los montículos a una altura de 33 a 30 centímetros.
Cuando se fertiliza bien el terreno, las plantas producen lo que se parece a helecho por encima del suelo y cepas fuertes y vigorosas por debajo de la superficie. Durante la preparación, el eliminar de la era las hierbas malas perennes es un factor muy importante como también lo es el escardar durante toda la temporada de crecimiento. Sin embargo, el uso de herbicidas puede resultar en daño, si se usan más de una vez durante cada temporada.
La cosecha
Una vez que haya establecido su esparragal, la paciencia es esencial. No se deben cosechar los turiones durante la primera temporada. Más bien, deje que las cepas se fortalezcan. La recolección solo debe hacerse de modo ligero —a lo más durante dos semanas— durante la segunda temporada. Pero cuando el esparragal ha sido establecido por tres años, ya no tiene que detenerse y puede gozar de los frutos de sus labores.
Durante la cosecha debe examinar su esparragal todos los días. El crecimiento es rápido en ese tiempo y si los turiones se dejan demasiado tiempo sus extremos más gruesos se ponen duros. Para cortar el espárrago blanco se mete un cuchillo en el montículo a unos 20 ó 23 centímetros debajo de la parte superior del tallo en cuanto éste sobresalga del suelo. El espárrago verde se corta un poco debajo de la superficie cuando la parte superior del tallo está de 18 a 23 centímetros por encima del suelo y antes que empiecen a abrirse las escamas en el extremo superior.
En un esparragal maduro, la cosecha dura tres meses, y al fin de ese tiempo se notará un cambio en el crecimiento de los turiones. En esta etapa parecen atrofiados, y ésta es la señal para que deje de cosechar el producto y permita que el esparragal complete su ciclo de crecimiento. Esto resultará en un crecimiento parecido a helecho que no tiene valor nutritivo, y éste debe cortarse a fines del otoño o temprano en el invierno, justamente antes que la semilla llegue a su pleno estado de madurez. Esta parte que se corta puede quemarse o usarse para hacer abono. Este último período de crecimiento le da al sistema de raíces tiempo para fortalecerse para el crecimiento de la siguiente temporada.
Preparación para la mesa
“¿Qué comeremos?” Tal vez esta planta versátil sea precisamente lo que se necesita para contestar esa pregunta familiar. Sea que la ocasión pida un bocadillo rápido o un tazón de sopa caliente, el espárrago bien puede ser de su agrado. Simplemente cuézalo al vapor lentamente en una pequeña cantidad de agua salada a la cual ha agregado un poco de vinagre. Esto produce un espárrago delicioso que se puede comer solo o se puede servir sobre pan tostado caliente o con una ensalada. Para que la hortaliza luzca más grata a la vista, no se deben quebrar los puntos de los tallos. Se puede evitar quebrarlos si se cuecen con cuidado. Quizás prefiera cocer los turiones en una vasija que les permita estar rectos, con las cabezuelas apuntando hacia arriba, puesto que los extremos más gruesos tienen que cocerse por más tiempo.
¿Es un día frío? En tal caso, un tazón de sopa caliente sin duda será más apetitoso que una comida fría. Se puede preparar una sopa muy nutritiva usando 227 gramos de espárrago hervido en 3⁄4 de litro de agua con cebolla, apio y nabo bien picados, si se desean. Cuando las hortalizas están tiernas (en unos 30 minutos), páselas por una coladera o lícuelas en una mezcladora. Entonces debe espesar esto con 43 gramos de harina y 58 gramos de mantequilla mezclados con 1⁄2 litro de leche y debe hervirlo por cinco minutos. Añada sal y pimienta a gusto. Entonces sirva la sopa caliente, aderezada con perejil picado muy fino.
Así, la próxima vez que oiga la pregunta: “¿Qué comeremos?” pudiera considerar el espárrago. Entonces puede que esta planta versátil llegue a ser una adición nutritiva y sabrosa a su minuta.