BIBLIOTECA EN LÍNEA Watchtower
Watchtower
BIBLIOTECA EN LÍNEA
Español
  • BIBLIA
  • PUBLICACIONES
  • REUNIONES
  • g86 8/2 págs. 29-31
  • Observando el mundo

No hay ningún video disponible para este elemento seleccionado.

Lo sentimos, hubo un error al cargar el video.

  • Observando el mundo
  • ¡Despertad! 1986
  • Subtítulos
  • Información relacionada
  • País pequeño, problema grande
  • Una fuerte granizada
  • El cóndor en peligro de extinción
  • Cunde el SIDA
  • Madres adolescentes
  • Nuevas luces de frenos
  • Aniversario frustrado
  • Se necesita un nuevo diseño
  • ‘No es un lugar para los enfermos’
  • ¿Quiénes corren el riesgo?
    ¡Despertad! 1986
  • Portadores del SIDA, ¿cuántos pueden morir?
    ¡Despertad! 1988
  • ¿Corro algún riesgo de contagiarme del sida?
    ¡Despertad! 1993
  • Sida. Un peligro para los adolescentes
    ¡Despertad! 1991
Ver más
¡Despertad! 1986
g86 8/2 págs. 29-31

Observando el mundo

País pequeño, problema grande

El país de Belice tiene una población de menos de 160.000 personas, y sin embargo, de acuerdo con un informe del periódico The New York Times, es “el principal centro del tráfico de narcóticos en América Central y figura en cuarta posición entre los países que más marihuana introducen en los Estados Unidos, después de Colombia, México y Jamaica”. Cada año, aproximadamente 85% de la cosecha de marihuana llega a introducirse en los Estados Unidos, a pesar de los arrestos y los esfuerzos por erradicarla y educar al público respecto a los peligros de traficarla. “Si permitimos que esto continúe, podríamos perder nuestro gobierno... nuestra independencia”, dijo el primer ministro Manuel Esquivel.

Una fuerte granizada

El último día de septiembre de 1985, una extraña granizada cayó tan fuerte sobre un pueblo brasileño que formó en una calle una capa de hielo que medía 30 metros (100 pies) de largo y 1,5 metros (5 pies) de grosor. Piedras de granizo que pesaban casi un kilo (unas 2 libras) cayeron sobre el pueblo de Itabirinha de Mantena, a unos 500 kilómetros (300 millas) al norte de Río de Janeiro, y cubrieron las calles con capas de hielo. La granizada duró solo 15 minutos, pero causó la muerte a 20 personas, hirió a 300 y dejó sin hogar a 4.000 de los 10.000 habitantes del pueblo. Más de 900 casas quedaron sin techo y otras 50 quedaron completamente destruidas. Hubo daño adicional cuando los ríos, llenos de hielo estancado, se desbordaron. El alcalde Clovis D. de Castro describió esta catástrofe como la ‘peor tragedia de la región que se haya registrado en los últimos años’.

El cóndor en peligro de extinción

El cóndor está entre las mayores aves oriundas de América del Norte. Tiene una envergadura de 3 metros (10 pies) y puede pesar hasta 10 kilos (22 libras). Últimamente solo se han visto siete volando en su habitat californiano. Según la revista Science el número total de estas aves ha descendido de 40 en 1967 a 15 en 1984. Seis más murieron entre noviembre de 1984 y abril de 1985. Aunque 20 están en cautividad, se duda que la especie sobreviva. Los cóndors alcanzan la madurez sexual a los seis o siete años de edad y, por lo general, ponen un huevo cada dos años. La lenta multiplicación del cóndor junto con la intrusión del hombre en su habitat y la contaminación de su alimento con plomo y otras sustancias venenosas hacen de él un ave en peligro de extinción.

Cunde el SIDA

“Muchas comunidades por toda la nación están preocupadas de que el síndrome de inmunodeficiencia adquirida tal vez cunda más fácilmente de lo que las autoridades médicas ahora creen —dice la revista U.S.News & World Report—. Cada 12 meses se duplica la cantidad de casos, y los expertos opinan que quizás más de un millón de personas hayan sido expuestas al virus del SIDA.” Aunque la mayoría de estas no hayan desarrollado una forma mortífera de la enfermedad, pueden pasar la infección a otros. Nuevas investigaciones también indican que el ser expuesto varias veces al virus del SIDA, o aun a otros virus, puede hacer que la enfermedad se manifieste de lleno en la persona. Hay muchos que son huéspedes del virus del SIDA y ni siquiera lo saben, pues los síntomas tal vez no se manifiesten sino hasta cinco o seis años después que la persona haya estado expuesta al virus. En los Estados Unidos, ya han muerto más de 7.000 víctimas del SIDA. La enfermedad se transmite por el contacto sexual, las transfusiones de sangre y el uso en común de agujas hipodérmicas en el caso de los usuarios de drogas. Los niños también pueden nacer con la enfermedad si la madre es portadora de ella.

Debido al carácter mortífero del SIDA, se ha relegado a segundo plano el herpes genital, que en un tiempo causó temor por todas partes, y se han tomado medidas sin precedente. El alcalde de San Antonio, Texas, instó a las víctimas del SIDA a que “fueran más allá de sus derechos individuales”, mientras que el Departamento Municipal de Sanidad les advirtió que el participar en relaciones sexuales o el donar sangre podría resultar en cargos de delitos graves. En algunas iglesias se ha abandonado la práctica de utilizar una copa en común para la comunión. Las divisiones militares estadounidenses ahora someten a todos los reclutas a pruebas del SIDA. Padres preocupados han boicoteado las escuelas a las que han sido admitidos niños que tienen la enfermedad. Además, después de las noticias de que el actor Rock Hudson murió del SIDA, el gremio de actores de cine ahora exige que se notifique por anticipado a los actores si van a tener que participar en escenas en que se requiere el besarse en la boca.

Madres adolescentes

Los embarazos de menores, resultados de la promiscuidad sexual entre los niños, es “la cuestión más apremiante de nuestra sociedad actual”, dice el Dr. Charl Roux, director de planificación familiar del departamento de ginecología del hospital Tygerberg de Ciudad del Cabo, África del Sur. En 1984, el 20% de todos los partos registrados en el hospital fueron de madres adolescentes, dos de ellas de 19 años de edad y con su noveno embarazo. El Dr. Roux dice que por no enseñar a sus hijos las realidades de la vida y por no darles un buen ejemplo, los adultos son responsables de gran parte de los problemas sociales resultantes. También agrega: “Los padres tienen la responsabilidad de crear en el hogar un ambiente que evite la posibilidad de que el niño tenga miedo o se sienta cohibido de considerar con ellos asuntos de esta índole”.

Nuevas luces de frenos

Se opina que las luces de los frenos de los automóviles que se sitúan a un nivel alto en el cristal trasero del vehículo son mucho más visibles que las que se colocan a menos altura. Usadas además de las luces de freno corrientes, se dice que reducen en un 53% la posibilidad de colisión trasera. Este nuevo tipo de luces será obligatorio en todos los automóviles fabricados en los Estados Unidos en 1986. Se pueden instalar por poco dinero en automóviles de otros años. La revista Prevention informa que “la Administración Nacional para la Seguridad del Tráfico en las Carreteras calcula que el nuevo sistema de luces evitará un número de colisiones que, de acontecer, supondrían un gasto público de $394.000.000 (E.U.A.) cada año”.

Aniversario frustrado

El final de la celebración del 40 aniversario de la ONU fue caracterizado por la desilusión, ya que las naciones miembros no pudieron concordar en una declaración de propósito. Más de 200 dignatarios pronunciaron más de un millón de palabras durante la sesión de seis semanas de la Asamblea General y no resolvieron ninguno de los conflictos ni concordaron en lo que habría de ser una “Declaración por motivo del cuadragésimo aniversario”. ¿Por qué? “Varias naciones usaron la declaración como un ejercicio para ganar puntos —admitió el delegado estadounidense Harvey Feldman—. Las reuniones quedaron caracterizadas por las tensiones entre Oriente y Occidente, y Norte y Sur, y especialmente por las cuestiones relacionadas con el Oriente Medio.” El primer ministro de la India, Rajiv Gandhi, resumió el asunto diciendo: “Ciertos países no están dispuestos a colaborar para producir un resultado que sea aceptable a todos”.

El Shah Mohammad Dost, Ministro de Relaciones Exteriores de Afganistán, expresó las preocupaciones de muchos líderes del mundo al declarar: “Es lamentable que estemos celebrando el cuadragésimo aniversario del establecimiento de esta organización cuando [...] el mundo está precariamente tambaleando al borde del abismo de una catástrofe nuclear que amenaza no solo a la entera civilización, sino también a la mismísima existencia de toda forma de vida en la Tierra. Nada podría estar más lejos de los sueños e ideales de los autores y firmantes de los estatutos de las Naciones Unidas”. Sin embargo, la Asamblea General concluyó su sesión declarando el año 1986 como el “Año [internacional] de la Paz”.

Se necesita un nuevo diseño

“Los cinturones de seguridad de los automóviles deberían ser diseñados de otra manera a fin de impedir que el chofer se golpee la cabeza contra el volante, y para impedir heridas del esternón, el abdomen y la espina dorsal inferior”, dice el periódico The Times, de Londres. En un estudio patrocinado por el gobierno, que se llevó a cabo en 15 hospitales, se analizaron las heridas que sufrieron unas 14.000 personas el año anterior y el año después de instituirse la ley que hizo obligatorio el usar los cinturones de seguridad. En general, hubo una disminución en la cantidad de muertes y lesionados. Sin embargo, aunque la cantidad de heridos disminuyó un 20% en el caso de los choferes y un 24% en el caso de los pasajeros que ocupaban el asiento delantero, no hubo ninguna indicación de que hubiera disminuido el promedio de heridas graves. Sí hubo un cambio en cuanto a dónde en el cuerpo se infligieron las heridas. Aumentaron las heridas del pecho, cuello y abdomen, mientras que disminuyeron las de los riñones y las fracturas de brazos y piernas. Las fracturas del cráneo disminuyeron dramáticamente en el caso de los pasajeros que ocupaban el asiento delantero, pero aumentaron en el caso de los choferes. A esto se debe el que se haya hecho una petición para que se cambie el diseño de los cinturones de seguridad.

‘No es un lugar para los enfermos’

Una cantidad sorprendente de pacientes hospitalizados está contrayendo infecciones ajenas a las enfermedades que motivaron su ingreso. Un informe publicado recientemente en la revista Discover calcula que 2.000.000 de estadounidenses contraen infecciones durante su estancia en el hospital, lo cual supone un costo anual de $2.000 millones (E.U.A.). Tales enfermedades obligan al paciente a permanecer en el hospital un promedio de cuatro días más, lo que ocasiona un gasto adicional de $800 (E.U.A.). Unos 300.000 pacientes mueren al año por esas infecciones. Sin embargo, tales cifras no incluyen otros incidentes, como los errores de anestesia y medicamentos que afectan anualmente a millones de pacientes. El Dr. Lowell Levin, profesor de salud pública de la Universidad de Yale dice: “Parecerá que bromeo, pero el hospital no es un lugar para los enfermos”.

    Publicaciones en español (1950-2025)
    Cerrar sesión
    Iniciar sesión
    • Español
    • Compartir
    • Configuración
    • Copyright © 2025 Watch Tower Bible and Tract Society of Pennsylvania
    • Condiciones de uso
    • Política de privacidad
    • Configuración de privacidad
    • JW.ORG
    • Iniciar sesión
    Compartir