‘Pastor’ honrado cambia la dieta a rebaño coreano
ALGUNOS meses antes de principiar el conflicto coreano, un moksa (pastor) de una pequeña iglesia de la secta “Iglesia de Cristo” en Seúl permitió a un amigo que se refugiara en su edificio eclesiástico. Su amigo recientemente había cruzado el paralelo 38 para huir de la opresión comunista del norte. El moksa tuvo muchas diferentes discusiones con su amigo sobre la Biblia.
Un día su amigo trajo a un joven a la iglesia para hablar con el moksa. El joven era ministro de tiempo cabal de los testigos de Jehová y tenía una ‘extraña versión’ del cristianismo. El moksa y su amigo escucharon e hicieron al joven muchas preguntas. Estaban seguros de que el joven estaba equivocado, y el moksa animó a su amigo a aceptar la invitación que le ofrecía el testigo de tener otra discusión unos cuantos días después. El moksa le dijo a su amigo, el Sr. Nam, que era su deber el tratar de mostrar a este joven testigo de Jehová sus errores. El Sr. Nam convino y confió en que podría hacerlo.
Cuando regresó de la discusión, el moksa le preguntó cómo le fué. El Sr. Nam le dijo que el testigo había llamado su atención a muchas cosas en la Biblia que él no sabía y le había hecho muchas preguntas acerca de las creencias de la iglesia que él no pudo contestar. Y estaba muy molesto. Pronto las discusiones entre el Sr. Nam y el testigo se celebraron debido a que el Sr. Nam quería honradamente saber la verdad. Cada vez él discutía las cosas que aprendía con el moksa. Leían y discutían las publicaciones de la Sociedad Wátchtower.
No le sorprendió al moksa cuando su amigo, el Sr. Nam, se hizo testigo de Jehová. Después asistió a una reunión de los testigos de Jehová en la casa misionera de Seúl y expresó su sorpresa de que hubiera misioneros de la Wátchtower en Corea. Empezó a pensar seriamente. Luego llegó la guerra. El moksa y el Sr. Nam dejaron de verse. El moksa, después logró alejarse al sur del lugar de lucha a un pueblo pequeño llamado Yakmok, donde él mismo vino a ser un refugiado. Mientras estuvo allí tuvo mucho tiempo para pensar y estudiar y se convenció de que los testigos de Jehová tienen la verdad. Mientras estuvo en la pequeña comunidad rural organizó otra “iglesia”, pero les enseñó la verdad acerca del justo nuevo mundo de Dios con su provisión de la tierra paradisíaca. Luego regresó a Seúl y comenzó a predicar esta verdad a lo que quedaba de su congregación anterior.
Luego, en la primavera de 1952, cuando la compañía de Seúl comenzó a reunirse de nuevo en la casa misionera averiada él volvió a encontrarse con los testigos. Él habló con el siervo de compañía acerca de algunas preguntas que todavía le inquietaban y preguntó dónde estaba el hermano Nam. Cuando supo que su amigo ahora era precursor en Taegu tomó un tren para ir a hablar con él. En Taegu sus preguntas finales quedaron contestadas y pidió al hermano Nam que lo bautizara. Luego (mayo de 1952) él y el hermano Nam fueron a visitar el grupo pequeño en Yakmok. Encontraron al grupito continuando en el camino de la verdad. El hermano Nam y el anterior moksa, ahora conocido simplemente como el hermano Lee, bautizaron a seis de ellos y los animaron a continuar sus reuniones y llevar a cabo sus deberes de servicio. Después durante el mes de julio de 1952 el misionero de la Sociedad visitó a Yakmok y encontró a siete publicadores trabajando allí.
El hermano Lee regresó a Seúl y a su congregación de antes. Pidió que lo acompañaran todos los de su rebaño que estuvieran interesados en ir al Salón del Reino a donde él iba. Él renunció a su iglesia, haciendo una declaración larga de sus razones. Él dijo que no tenía nada de qué criticar a la iglesia de Cristo salvo sobre doctrina, y luego procedió a dar, punto por punto, los principales puntos de las creencias de la iglesia que le parecían contrarias a la enseñanza y significado de la Biblia. Él sacó copias en mimeógrafo de su declaración y las distribuyó entre todos los demás moksas y miembros que él conocía de la iglesia a que antes pertenecía.
Al tiempo de escribir esto diez miembros de la que antes era su congregación han sido bautizados y otros están estudiando y examinando el asunto cuidadosamente. En cuanto al que antes era moksa durante el mes de junio presentó informe de 140 horas en el servicio del campo. Su esposa e hijo son publicadores del Reino ahora, también.