Lecciones que aprendemos de los reyes de Israel

1, 2. ¿Qué cuenta la Biblia sobre algunos de los reyes de Israel?

LA Biblia menciona a más de 40 hombres que fueron reyes de Israel y revela con total honestidad detalles de las vidas de algunos de ellos.a Por ejemplo, cuenta que incluso reyes buenos hicieron cosas malas. Hablemos de David. Sabemos que él fue un buen rey, pues Jehová dijo: “Me siguió con todo su corazón haciendo solo lo que está bien a mis ojos” (1 Rey. 14:8). Sin embargo, se acostó con una mujer que estaba casada y se las ingenió para que mataran al esposo de ella en una batalla (2 Sam. 11:4, 14, 15).

² Por otro lado, también hubo reyes malos que hicieron cosas buenas. Veamos el caso de Rehoboam. Sabemos que Jehová lo vio como un rey infiel, pues dijo que “hizo lo que estaba mal” (2 Crón. 12:14). Sin embargo, cuando Jehová le dijo que no peleara contra las 10 tribus de Israel y que dejara que eligieran a su propio rey, él obedeció. Además, reforzó muchas ciudades para proteger a la nación de sus enemigos (1 Rey. 12:21-24; 2 Crón. 11:5-12).

3. ¿Qué es posible que nos preguntemos, y qué veremos en este artículo?

³ Ahora bien, si todos los reyes hacían cosas buenas y cosas malas, ¿por qué Jehová decía que algunos eran fieles y otros no? ¿Cuál era la diferencia? Saber la respuesta a esa pregunta nos ayudará a entender qué es lo que tenemos que hacer para agradar a Jehová. En este artículo veremos que, al juzgar a los reyes de Israel, Jehová por lo visto tenía en cuenta tres cosas: si lo amaban con todo el corazón, si se arrepentían de sus pecados y si practicaban la adoración pura.

AMABAN A JEHOVÁ CON TODO EL CORAZÓN

4. ¿Cuál era una diferencia entre los reyes fieles y los infieles?

⁴ Los reyes que Jehová consideraba fieles lo amaban con todo su corazón.b Por ejemplo, el buen rey Jehosafat “buscó a Jehová con todo su corazón” (2 Crón. 22:9). Hablando de Josías, la Biblia dice: “Antes de él no hubo ningún rey como él, que volviera a Jehová con todo su corazón” (2 Rey. 23:25). Por otro lado estaba Salomón, que al final de su reinado hizo lo que estaba mal y “no sirvió a Jehová su Dios con un corazón completo” (1 Rey. 11:4). Y de Abiyam, otro rey infiel, la Biblia dice exactamente lo mismo: “No sirvió a Jehová su Dios con un corazón completo” (1 Rey. 15:3).

5. ¿Qué significa servir a Jehová con un corazón completo?

⁵ ¿Qué significa servir a Jehová con un corazón completo? Significa adorarlo por puro amor y devoción, y no simplemente por obligación o porque nos parezca lo correcto. También implica mantener vivo ese amor durante toda la vida.

6. ¿Cómo podemos amar a Jehová con todo el corazón? (Proverbios 4:23; Mateo 5:29, 30).

⁶ ¿Cómo podemos ser como los reyes fieles y amar a Jehová con todo el corazón? Debemos evitar cualquier cosa que pueda dividir nuestro corazón y debilitar el amor que tenemos por Jehová, como el entretenimiento perjudicial, la actitud materialista y las malas compañías. Si vemos que algo así nos está empezando a pasar, debemos hacer cambios de inmediato (lea Proverbios 4:23; Mateo 5:29, 30).

7. ¿Por qué debemos tener cuidado con las cosas perjudiciales?

⁷ No dejemos que nuestro corazón acabe dividiéndose. Si no tenemos cuidado, podríamos engañarnos pensando que, mientras estemos participando en muchas actividades espirituales, nada externo puede dañar nuestra relación con Jehová. Para entenderlo mejor, imagínese que estuviera al aire libre en un día que hace muchísimo frío y viento. Al llegar a su casa, probablemente prendería la calefacción. Pero ¿verdad que no dejaría la puerta abierta? Si lo hiciera, enseguida la casa se llenaría de aire frío. Esto nos enseña que, para mantenernos cerca de Jehová, no basta con participar en actividades espirituales. Tenemos que “cerrarles la puerta” a todas las cosas perjudiciales para que el “aire” de este mundo no enfríe nuestra relación con Jehová y divida nuestro corazón (Efes. 2:2).

SE ARREPINTIERON DE SUS PECADOS

8, 9. ¿Cómo reaccionaron los reyes David y Ezequías cuando los corrigieron? (Vea la imagen).

⁸ Como vimos antes, el rey David cometió un pecado muy grave. Pero, cuando Natán se fue a hablar con él sobre lo que había hecho, David fue humilde y se arrepintió (2 Sam. 12:13). Las palabras que escribió en el Salmo 51 demuestran que de veras estaba arrepentido. No fingió estarlo para quedar bien con Natán ni para evitar el castigo (Sal. 51:3, 4, 17, encabezamiento).

⁹ El rey Ezequías también pecó contra Jehová. La Biblia dice que “su corazón se hizo arrogante, provocando que Dios se indignara con él y con Judá y Jerusalén” (2 Crón. 32:25). ¿Por qué se volvió orgulloso? Quizás porque Jehová lo había hecho rico, porque lo había ayudado a vencer a los asirios o porque lo había sanado de una enfermedad mortal. Tal vez fue ese orgullo lo que lo motivó a presumir ante los babilonios de sus riquezas. Como resultado, el profeta Isaías tuvo que corregirlo (2 Rey. 20:12-18). Al igual que David, Ezequías fue humilde y se arrepintió (2 Crón. 32:26). Y Jehová, al hacer un balance de su vida, lo consideró un rey fiel. La Biblia dice: “Hacía lo que estaba bien a los ojos de Jehová” (2 Rey. 18:3).

10. ¿Qué hizo el rey Amasías cuando lo corrigieron?

¹⁰ En cambio, el rey Amasías de Judá hizo lo que estaba bien, “pero no con un corazón completo” (2 Crón. 25:2). ¿En qué falló? Después de que Jehová lo ayudó a vencer a los edomitas, Amasías empezó a adorar a los dioses de ese pueblo.c Luego, cuando un profeta de Jehová fue a corregirlo, el rey se puso terco y se negó a escuchar (2 Crón. 25:14-16).

11. De acuerdo con 2 Corintios 7:9, 11, ¿qué debemos hacer para que Jehová nos perdone? (Vea también las imágenes).

¹¹ ¿Qué aprendemos de esos ejemplos? Que debemos arrepentirnos de nuestros pecados y hacer todo lo posible por no volver a cometerlos. ¿Y si los ancianos nos corrigen, incluso aunque sea por un asunto que nos parece poco importante? No deberíamos pensar que hemos perdido la aprobación de Jehová o que los ancianos nos miran con malos ojos. A fin de cuentas, hasta los reyes buenos de Israel necesitaron que los aconsejaran y los corrigieran (Heb. 12:6). Así que, si nos corrigen, ¿qué debemos hacer? 1) Reaccionar con humildad, 2) hacer los cambios necesarios y 3) seguir sirviendo a Jehová con todo el corazón. Si nos arrepentimos de nuestros pecados, Jehová nos perdonará (lea 2 Corintios 7:9, 11).

PRACTICARON LA ADORACIÓN PURA

12. ¿Cuál era la principal diferencia entre los reyes fieles y los reyes infieles?

¹² Los reyes que Jehová consideraba fieles practicaban la adoración pura y animaban a los demás a hacer lo mismo. Es cierto que a veces se equivocaban, como vimos. Pero adoraban exclusivamente a Jehová y luchaban con todas sus fuerzas por eliminar la idolatría de la nación.d

13. ¿Por qué consideró Jehová que el rey Acab fue infiel?

¹³ ¿Y qué podemos decir de los reyes que Jehová consideraba infieles? Pues es cierto que no solo hacían cosas malas. Incluso el malvado rey Acab hasta cierto punto fue humilde y se sintió mal cuando se enteró de que habían matado a Nabot por su culpa (1 Rey. 21:27-29). Además, construyó ciudades y obtuvo victorias para Israel (1 Rey. 20:21, 29; 22:39). Pero Acab hizo algo muy malo de lo que nunca se arrepintió: influenciado por su esposa, promovió la adoración falsa (1 Rey. 21:25, 26).

14. a) ¿Por qué consideró Jehová que Rehoboam fue un rey infiel? b) ¿Qué hicieron la inmensa mayoría de los reyes infieles?

¹⁴ Hablemos de otro rey infiel: Rehoboam. Como vimos antes, hizo muchas cosas buenas. Pero, cuando su reinado se consolidó, dejó la Ley de Jehová y empezó a practicar la adoración falsa (2 Crón. 12:1). A partir de ahí, a veces adoró a Jehová y otras veces a ídolos (1 Rey. 14:21-24). Rehoboam y Acab no fueron los únicos reyes que se alejaron de la religión verdadera. De hecho, la inmensa mayoría de los reyes infieles apoyaron de alguna manera la religión falsa. Está claro que un factor clave para que Jehová determinara si un rey era bueno o malo era si practicaba la adoración pura.

15. ¿Por qué le da Jehová tanta importancia a la adoración pura?

¹⁵ ¿Por qué le daba tanta importancia Jehová a la adoración? Por un lado, porque los reyes eran los responsables de ayudar al pueblo a adorar a Dios de la manera correcta. Por otro lado, cuando practicaban la adoración falsa, acababan cometiendo injusticias y otros pecados graves (Os. 4:1, 2). Además, los reyes y los israelitas eran siervos dedicados de Jehová. Por eso, cuando adoraban a los dioses falsos, la Biblia dice que era como si estuvieran cometiendo adulterio (Jer. 3:8, 9). Una persona que comete adulterio literal peca contra su esposo o su esposa de la manera más directa y personal posible. Igualmente, alguien que se dedica a Jehová pero luego practica la adoración falsa peca contra él de manera directa y personal (Deut. 4:23, 24).e

16. ¿Cuál es para Jehová la principal diferencia entre alguien justo y alguien malvado?

¹⁶ ¿Qué lecciones sacamos? Pues que debemos evitar por completo la adoración falsa. Y no solo eso; tenemos que practicar la adoración pura y mantenernos activos en ella. El profeta Malaquías dijo sin rodeos cuál es para Jehová la diferencia entre una persona buena y una mala: “Ustedes de nuevo verán la diferencia entre alguien justo y alguien malvado, entre el que sirve a Dios y el que no le sirve” (Mal. 3:18). Por eso, no permitamos que nada —ni siquiera nuestras propias imperfecciones y errores— nos desanime hasta el extremo de que dejemos de servir a Dios. Abandonar a Jehová es en sí mismo un pecado grave.

17. ¿Por qué debemos tener cuidado al elegir la persona con la que nos vamos a casar?

¹⁷ ¿Estás soltero y estás pensando en casarte? Las palabras de Malaquías te pueden ayudar a escoger bien. Piensa en esto: una persona puede tener muy buenas cualidades; pero, si no está sirviendo a Jehová, ¿crees que en estos momentos él la considera una persona justa? (2 Cor. 6:14). Si te casaras con ella, ¿sería una buena influencia en sentido espiritual para ti? Recuerda que, aunque las esposas extranjeras del rey Salomón quizás tenían bonitas cualidades, el caso es que no servían a Jehová. Y, poco a poco, desviaron su corazón para que siguiera a otros dioses (1 Rey. 11:1, 4).

18. ¿Qué deben enseñarles los padres a sus hijos?

¹⁸ Padres, pueden usar los relatos de los reyes para ayudar a sus hijos a sentir el deseo de servir a Jehová. Es importante que ellos entiendan que Jehová consideraba que un rey era bueno o malo dependiendo sobre todo de si promovía la adoración pura o no. Enséñenles con sus palabras y su ejemplo que las actividades espirituales —tales como leer la Biblia, ir a las reuniones y participar en la predicación— son lo primero en la vida (Mat. 6:33). Si no, sus hijos podrían concluir que el único motivo para ser testigo de Jehová es que sus padres también lo son. Y, con el tiempo, puede que acaben poniendo a Jehová en segundo lugar o incluso dejando la verdad.

19. ¿Está todo perdido para alguien que ha dejado de servir a Jehová? (Vea también el recuadro “Usted puede volver a Jehová”).

¹⁹ ¿Está todo perdido para alguien que ha dejado de servir a Jehová? No, porque puede arrepentirse y volver a ser amigo de Dios. Claro está, quizás tenga que tragarse su orgullo y aceptar que los ancianos lo ayuden (Sant. 5:14). Cualquier sacrificio vale la pena con tal de recuperar la aprobación de Jehová.

20. Si imitamos a los reyes fieles, ¿cómo nos verá Jehová?

²⁰ Entonces, ¿qué lecciones hemos aprendido de los reyes de Israel? Podemos ser como los reyes fieles si amamos a Jehová con todo nuestro corazón. Aprendamos de nuestros errores, arrepintámonos y hagamos los cambios necesarios. Además, recordemos que es muy muy importante que solo adoremos al único Dios verdadero. Si usted le es fiel a Jehová, él también dirá que usted es una persona justa a sus ojos.