Mayo
Sábado 1 de mayo
Explícanos lo que debemos hacer con el niño (Juec. 13:8).
¿Qué pueden hacer los padres para enseñar a sus hijos a amar a Jehová? Pidan en oración la ayuda de Jehová, como hizo Manóah. Además, enseñen con el ejemplo. Lo que les dicen a sus hijos es importante. Pero es probable que influya más en ellos lo que hacen. Podemos estar seguros de que José y María les pusieron un magnífico ejemplo a sus hijos, entre ellos, Jesús. José no solo trabajó duro a fin de mantener a su familia, sino que también la animó a valorar la adoración a Jehová (Deut. 4:9, 10). “Todos los años” llevaba a su familia a Jerusalén para celebrar la Pascua (Luc. 2:41, 42). Puede que algunos padres de su tiempo pensaran que aquel viaje familiar era pesado, largo y caro. Sin embargo, José valoraba los asuntos espirituales y enseñó a sus hijos a hacer lo mismo. María, por su parte, conocía muy bien las Escrituras. Seguro que con sus palabras y acciones enseñó a sus hijos a amar la Palabra de Dios. w19.12 52:9-12
Domingo 2 de mayo
Soy carnal, fui vendido al pecado (Rom. 7:14).
Una prueba del amor que Jehová nos tiene es cómo actuó cuando Adán lo desobedeció. Como consecuencia de este acto, tanto él como sus descendientes dejaron de pertenecer a la feliz familia de Dios (Rom. 5:12). Pero Jehová tomó cartas en el asunto. Aunque castigó a Adán, no dejó sin esperanza a sus descendientes. Prometió de inmediato que los seres humanos obedientes volverían a ser parte de su familia (Gén. 3:15; Rom. 8:20, 21). Lo hizo posible gracias al sacrificio de su amado Hijo, Jesús. Al entregarlo por nosotros, demostró lo mucho que nos ama (Juan 3:16). Es el mejor Padre que podemos tener. Escucha nuestras oraciones y nos da lo necesario en sentido material y espiritual. Nos educa y ayuda. Además, tiene preparadas bendiciones extraordinarias para nosotros. ¿Verdad que nos conmueve saber que nuestro Padre nos ama y nos cuida? w20.02 6:16-17, 20
Lunes 3 de mayo
Cuando las preocupaciones me abrumaban, tú me consolabas y me tranquilizabas (Sal. 94:19).
¿Hemos sentido alguna vez que nos invadía la preocupación? Tal vez el motivo fue que alguien dijo o hizo algo que nos dolió. O puede que lo que nos atormente sea lo que nosotros hemos dicho o hecho. Quizás cometimos un pecado y nos preocupa que Jehová no nos perdone jamás. Además, tal vez pensemos que nos sentimos así porque no tenemos fe, porque somos malas personas. Pero veamos algunos ejemplos de la Biblia. Ana, la madre del profeta Samuel, tenía mucha fe. Aun así, se sentía muy angustiada debido al maltrato que sufría de parte de un miembro de su casa (1 Sam. 1:7). El apóstol Pablo también tenía una fe sólida, pero “la preocupación por todas las congregaciones” lo abrumaba (2 Cor. 11:28). El rey David tenía una fe tan fuerte que Jehová sentía un cariño especial por él (Hech. 13:22). Pese a ello, cometió pecados que lo atormentaron (Sal. 38:4). A todos ellos Jehová los consoló y tranquilizó. w20.02 9:1-2
Martes 4 de mayo
Si alguien quiere ser mi seguidor, que renuncie a sí mismo (Mat. 16:24).
Dedicarse a Jehová es hacerle una oración de todo corazón en la que usted le dice que usará su vida para servirle para siempre. Cuando alguien se dedica a Jehová, renuncia a sí mismo. Desde ese momento, tiene el gran honor de pertenecerle a Jehová (Rom. 14:8). Al dedicarse, le dice que de ahí en adelante lo más importante en su vida será servirle a él, no agradarse a sí mismo. Su dedicación es un voto, es decir, una promesa solemne que le hace a Dios. Jehová no nos obliga a hacerle ese voto. Pero, una vez que lo hacemos, espera que lo cumplamos (Sal. 116:12, 14). La dedicación es personal y privada, algo entre usted y Jehová. En cambio, el bautismo es público, algo que se hace delante de otras personas, por lo general en una asamblea. Al bautizarse, usted les muestra a los demás que ya se ha dedicado a Jehová. En otras palabras, les indica que lo ama con todo su corazón, alma, mente y fuerzas, y que ha decidido servirle para siempre (Mar. 12:30). w20.03 11:4-5
Miércoles 5 de mayo
Que nadie los seduzca (2 Tes. 2:3).
Satanás oscurece la identidad de Jehová. Tras la muerte de los apóstoles de Jesús, algunos supuestos cristianos empezaron a difundir enseñanzas falsas (Hech. 20:29, 30). Estos apóstatas comenzaron a oscurecer la identidad del único Dios verdadero. Por ejemplo, dejaron de usar el nombre divino en la Biblia y lo sustituyeron por “Señor” o por otros títulos. Debido a ello, al lector de la Biblia se le hacía difícil distinguir a Jehová de los demás “señores” que se mencionan en las Santas Escrituras (1 Cor. 8:5). Utilizaron el mismo término, “Señor”, para referirse tanto a Jehová como a Jesús, lo que dificultó entender que Dios y su Hijo son personas diferentes con posiciones distintas (Juan 17:3). Esta confusión contribuyó al desarrollo de la trinidad, una doctrina que la Biblia no enseña. Como consecuencia, muchos consideran que a Dios no se le puede conocer y que su identidad es un misterio. ¡Qué gran mentira! (Hech. 17:27). w19.06 23:11
Jueves 6 de mayo
Efectúa tu ministerio plenamente (2 Tim. 4:5).
Una forma de cumplir más plenamente con nuestro ministerio es mejorando nuestras aptitudes como maestros (Prov. 1:5; 1 Tim. 4:13, 15). Qué gran honor es que Jehová nos permita ser sus “colaboradores” (1 Cor. 3:9). Cuando nos aseguramos de “las cosas más importantes” y nos centramos en el ministerio cristiano, servimos “a Jehová con regocijo” (Filip. 1:10; Sal. 100:2). Los ministros de Dios tenemos la certeza de que él nos dará el poder que necesitemos para cumplir con nuestro ministerio sin importar cuáles sean nuestros problemas y limitaciones (2 Cor. 4:1, 7; 6:4). Sea que nuestras circunstancias nos permitan predicar mucho o poco, servir a Dios con toda el alma nos da motivos para sentirnos alegres (Gál. 6:4). Al cumplir plenamente con nuestro ministerio, demostramos nuestro amor a Jehová y al prójimo. ¿Con qué resultado? La Biblia dice: “Haciendo esto te salvarás a ti mismo y también a los que te escuchan” (1 Tim. 4:16). w19.04 14:15, 17
Viernes 7 de mayo
Satanás está extraviando a toda la tierra habitada (Rev. 12:9).
Para engañar a la gente, uno de los medios principales que Satanás y los demonios utilizan es el ocultismo. Quienes lo practican afirman que conocen o controlan cosas que el resto de la gente no puede conocer ni controlar. Por ejemplo, algunos aseguran que son capaces de predecir el futuro mediante la adivinación o la astrología. Otros quizás hagan como si hablaran con los muertos. Y hay quienes practican la brujería o la magia, y tal vez hagan conjuros para hechizar a otras personas. En un estudio que se realizó en 18 países de Latinoamérica y el Caribe, alrededor de un tercio de los encuestados creía en la magia, la brujería o la hechicería, y casi la misma cantidad pensaba que es posible comunicarse con los espíritus. En otro estudio, que se realizó en 18 países de África, más de la mitad de los encuestados creía en la brujería. Por supuesto, no importa dónde vivamos, no podemos bajar la guardia. w19.04 17:3-4
Sábado 8 de mayo
Que no haya ningún fornicador (Heb. 12:16).
Jehová odia todo tipo de maldad (Sal. 5:4-6). Así que detesta el abuso sexual de menores, un acto especialmente malvado y repugnante. Igual que él, sus Testigos aborrecemos el abuso de menores y no lo toleramos en la congregación (Rom. 12:9). El abuso de menores está totalmente en contra de “la ley del Cristo”, esto es, todo lo que Jesús enseñó con sus palabras y acciones (Gál. 6:2). La ley del Cristo se basa en el amor y fomenta la justicia. Como los cristianos verdaderos seguimos esa ley, tratamos a los niños de manera que se sientan seguros y queridos de verdad. Pero el abuso de un menor es un acto egoísta y malvado que resulta en que el niño se sienta inseguro y piense que nadie lo ama. Por desgracia, esto también ha afectado a los cristianos verdaderos. ¿Por qué? Porque en nuestros días hay muchos “hombres inicuos e impostores”, y algunos de ellos quizás intenten entrar en la congregación (2 Tim. 3:13). Además, algunos que afirman ser parte de la congregación se han dejado llevar por deseos pervertidos y han abusado sexualmente de niños. w19.05 19:1-3
Domingo 9 de mayo
El ruego del hombre justo tiene mucho vigor (Sant. 5:16).
La persona deprimida tal vez no se sienta digna de dirigirse a Jehová en oración. Si deseamos ayudarla, oremos con ella utilizando su nombre. Digámosle a Jehová lo mucho que la queremos, tanto nosotros como la congregación. Y roguémosle que calme el dolor de su valiosa ovejita. Este tipo de oraciones pueden ser una fuente de mucho consuelo. Pensemos antes de hablar. Las palabras irreflexivas hieren, pero las amables curan las heridas (Prov. 12:18). Así pues, pidámosle a Jehová que nos ayude a encontrar palabras cariñosas que tranquilicen y sanen a quien se siente herido. Recordemos que las palabras con mayor poder son las que se encuentran en la Biblia, pues provienen de Jehová (Heb. 4:12). Cuando consolamos a otras personas, les recordamos que Jehová es un Dios de amor. Y nunca debemos olvidar que también es un Dios de justicia. Ningún abuso queda oculto a sus ojos. Él lo ve todo, y se asegurará de dar su merecido a los abusadores que no se arrepientan (Núm. 14:18). w19.05 20:18-19, 21
Lunes 10 de mayo
Cuidado: quizás haya alguien que se los lleve como presa suya mediante la filosofía y el vano engaño según la tradición de los hombres (Col. 2:8).
Satanás quiere que le demos la espalda a Jehová. Para lograrlo, trata de influir en nuestra manera de pensar. En realidad, intenta controlar nuestra mente para que pensemos como él quiere. Utiliza nuestros deseos a fin de engañarnos y convencernos de que lo sigamos a él (Col. 2:4). ¿De verdad es grave el peligro de que Satanás nos engañe? Por supuesto que sí. Recordemos que Pablo no escribió la advertencia de Colosenses 2:8 a quienes no eran cristianos, sino a cristianos ungidos con espíritu santo (Col. 1:2, 5). Ellos estaban en peligro entonces, y nosotros lo estamos aún más hoy día (1 Cor. 10:12). ¿Por qué? Porque Satanás fue arrojado a la Tierra y su objetivo es extraviar a los siervos leales de Dios (Rev. 12:9, 12, 17). Además, vivimos en un tiempo en el que los hombres malvados e impostores van “de mal en peor” (2 Tim. 3:1, 13). w19.06 23:1-2
Martes 11 de mayo
¡Basta! Ahora, oh Jehová, quítame el alma (1 Rey. 19:4).
Elías sintió miedo cuando la reina Jezabel amenazó con matarlo. Así que huyó a Beer-seba. Estaba tan desanimado que pidió morir. ¿Por qué se sintió así? Porque era un hombre imperfecto, “de sentimientos semejantes a los nuestros” (Sant. 5:17). Tal vez la tensión y el agotamiento físico lo agobiaron. Al parecer, pensaba que todo lo que había hecho a favor de la adoración pura había sido en vano, que en Israel no había mejorado nada y que él era el único que aún servía a Jehová (1 Rey. 18:3, 4, 13; 19:10, 14). Jehová comprendía a Elías y no lo reprendió por expresar cómo se sentía, sino que lo ayudó a recuperar las fuerzas (1 Rey. 19:5-7). Después, lo corrigió con cariño demostrándole su extraordinario poder. Además, le reveló que quedaban 7.000 israelitas que no habían adorado a Baal (1 Rey. 19:11-18). Jehová le mostró a Elías de maneras prácticas que lo amaba. w19.06 25:5-6
Miércoles 12 de mayo
Estén en sujeción a los hombres de más edad. Cíñanse con humildad mental los unos para con los otros, porque Dios se opone a los altivos (1 Ped. 5:5).
No desobedezcamos las instrucciones. Si hacemos lo que nos dicen los hermanos responsables y confiables, nos libraremos de problemas. Veamos un ejemplo. En un país donde la obra está proscrita, los hermanos recibieron la instrucción de no dejar publicaciones en la predicación. Pero un precursor creyó que sabía hacer las cosas mejor y no hizo caso. ¿Qué sucedió? Un día, tras predicar informalmente, la policía los interrogó a él y a otros hermanos. Al parecer, agentes del gobierno los habían seguido y habían conseguido todas las publicaciones que habían dejado. ¿Qué aprendemos? Que tenemos que obedecer las instrucciones aunque creamos que sabemos hacer las cosas mejor. Jehová nos bendecirá siempre si colaboramos con los hermanos a los que ha nombrado para dirigirnos (Heb. 13:7, 17). w19.07 28:17
Jueves 13 de mayo
Todos los que desean vivir con devoción piadosa en asociación con Cristo Jesús también serán perseguidos (2 Tim. 3:12).
La noche antes de morir, el Señor Jesús dijo que el mundo odiaría a todos los que decidieran ser sus discípulos (Juan 17:14). Desde entonces, los que se oponen a la adoración verdadera han perseguido a los cristianos fieles. Y esperamos que la oposición se intensifique al acercarnos al fin de este mundo (Mat. 24:9). ¿Cómo prepararnos ahora para la persecución? No tenemos que imaginarnos todo lo que pueda sucedernos. Si lo hiciéramos, esos pensamientos podrían llevarnos a dejar de servir a Jehová incluso antes de pasar por una prueba real, pues el temor y la ansiedad podrían vencernos (Prov. 12:25; 17:22). El temor es un arma poderosa que emplea contra nosotros nuestro “adversario, el Diablo” (1 Ped. 5:8, 9). Por tanto, es muy importante que hagamos desde ahora que nuestra amistad con Jehová sea más sólida. w19.07 27:1-3
Viernes 14 de mayo
Vayan, por lo tanto, y hagan discípulos de gente de todas las naciones (Mat. 28:19).
Los apóstoles debían estar muy emocionados cuando se reunieron en la ladera de una montaña. Jesús les había pedido después de su resurrección que se encontraran con él allí (Mat. 28:16). Quizás esa fue la ocasión en la que “se apareció a más de quinientos hermanos de una vez” (1 Cor. 15:6). ¿Por qué organizó Jesús esta reunión? Para darles a sus seguidores este emocionante trabajo: “Vayan, por lo tanto, y hagan discípulos de gente de todas las naciones” (Mat. 28:18-20). Quienes escucharon las palabras de Jesús llegaron a formar parte de la congregación cristiana del siglo primero. Su misión principal era hacer más discípulos de Cristo. En nuestros días, por toda la Tierra hay decenas de miles de congregaciones de cristianos verdaderos. Y siguen realizando esa misma labor fundamental. w19.07 29:1-2
Sábado 15 de mayo
La tierra subsiste aun hasta tiempo indefinido (Ecl. 1:4).
Un superintendente viajante de Noruega dice que quienes no quieren hablar de Dios a menudo están dispuestos a conversar sobre las condiciones mundiales. Después de saludar a una persona, le pregunta: “¿Le parece que las cosas mejorarán en el futuro? ¿De quién cree que depende? ¿De los políticos, de los científicos o de alguien más?”. Tras escuchar con atención, lee o cita algún texto que hable de un futuro maravilloso. A algunos les llama la atención la promesa bíblica de que la Tierra no será destruida y de que los buenos vivirán para siempre en ella (Sal. 37:29). Hacemos bien en utilizar diferentes enfoques para iniciar nuestras conversaciones. Lo que atrae a una persona pudiera alejar a otra. Hay quienes están dispuestos a conversar sobre Dios o la Biblia, pero otros responden mejor si hablamos primero de otros temas. Sea como sea, debemos aprovechar la oportunidad para hablar a todo tipo de personas (Rom. 1:14-16). Y es Jehová quien hace crecer la verdad en el corazón de los que aman la justicia (1 Cor. 3:6, 7). w19.07 30:10-11
Domingo 16 de mayo
Si Dios nos amó así a nosotros, entonces nosotros mismos estamos obligados a amarnos unos a otros (1 Juan 4:11).
El gran amor que Dios nos tiene nos motivará a amar a los hermanos (1 Juan 4:20, 21). Quizás pensemos que ese amor surgirá de manera natural. Al fin y al cabo, servimos a Jehová y tratamos de copiar sus cualidades. Además, seguimos el ejemplo de Jesús, que nos amó tanto que dio su vida por nosotros. Pero lo cierto es que a veces nos cuesta obedecer el mandato de amarnos unos a otros. Evodia y Síntique eran dos entusiastas hermanas que habían servido “lado a lado” con el apóstol Pablo. Pero tal vez dejaron que las diferencias personales las separaran. Pablo las mencionó por nombre en su carta y les dio consejo directo. Les dijo que tenían que ser “de la misma mente” (Filip. 4:2, 3). El apóstol también vio necesario decir a la entera congregación: “Sigan haciendo todas las cosas libres de murmuraciones y discusiones” (Filip. 2:14). w19.08 32:6-7
Lunes 17 de mayo
Sigan llevando las cargas los unos de los otros (Gál. 6:2).
Hay muchas congregaciones, así como muchos hermanos a título individual, que hacen todo lo que está en su mano para que los siervos de tiempo completo sigan en su asignación. Por ejemplo, los animan a continuar en ella, les dan dinero u otras cosas materiales que necesitan, o cuidan de sus familiares. Todos estos esfuerzos son dignos de elogio. ¿Qué podemos hacer si llega a nuestra congregación alguno de estos siervos de tiempo completo? No pensemos que el cambio se debe a que no cumplió bien con su labor o a que hizo algo malo. Más bien, facilitémosle el cambio. Recibámoslo con cariño y felicitémoslo por todo lo que hizo, aunque ahora su mala salud no le permita hacer tanto como antes. Esforcémonos por conocerlo. Aprendamos de todo su conocimiento, preparación y experiencia. Al principio, puede que el hermano necesite ayuda para conseguir vivienda, transporte, trabajo u otras cosas básicas. w19.08 34:12-13
Martes 18 de mayo
Me santificaré en ti delante de sus ojos, oh Gog (Ezeq. 38:16).
Gog confiará en su “brazo de carne”, es decir, su fuerza militar (2 Crón. 32:8). Pero nosotros confiaremos en nuestro Dios, Jehová. Esto les parecerá absurdo a las naciones. Después de todo, Babilonia la Grande era poderosa, pero sus dioses no la salvaron de “la bestia salvaje” y de sus “diez cuernos” (Rev. 17:16). Así que Gog creerá que la victoria será fácil. Como nubes que cubren el país, atacará al pueblo de Jehová. Pero enseguida se percatará de que ha caído en una trampa. Como le sucedió al faraón en el mar Rojo, se dará cuenta de que está luchando contra Jehová (Éx. 14:1-4; Ezeq. 38:3, 4, 18, 21-23). Cristo y sus ejércitos celestiales defenderán a los siervos de Dios y aplastarán a las hordas de Gog (Rev. 19:11, 14, 15). ¿Y qué le pasará al enemigo principal de Jehová, Satanás, que con su propaganda mentirosa llevó a las naciones a Armagedón? Jesús los arrojará a él y a los demonios a un abismo, donde estarán encerrados durante mil años (Rev. 20:1-3). w19.09 36:14-15
Miércoles 19 de mayo
Manténte en expectación de ella; porque sin falta se realizará (Hab. 2:3).
Es natural que deseemos que se hagan realidad las maravillosas promesas de Dios. No obstante, nuestro entusiasmo puede enfriarse si tenemos la sensación de que nuestras expectativas tardan en cumplirse. Puede que hasta nos desanimemos (Prov. 13:12). Eso es lo que ocurrió a principios del siglo veinte. En aquel tiempo, muchos cristianos ungidos esperaban ir al cielo en 1914. ¿Qué hicieron los fieles cuando no se cumplieron sus expectativas? No abandonaron la carrera por la vida porque estaban centrados en servir fieles a Dios, no en obtener un galardón. Estaban resueltos a correr la carrera con aguante. No hay duda de que deseamos ver que Jehová vindique su nombre y su soberanía, y que cumpla todas sus promesas. Podemos estar seguros de que todo esto ocurrirá en el momento que él ha determinado. Hasta entonces, sigamos ocupados en el servicio a Dios y no permitamos nunca que nos desanime o nos haga bajar el ritmo ver que nuestras expectativas tardan en cumplirse. w19.08 31:9-10
Jueves 20 de mayo
Soy de genio apacible y humilde de corazón (Mat. 11:29).
Preguntémonos: “¿Se me conoce como una persona apacible y humilde? ¿Estoy dispuesto a hacer tareas de poca importancia para servir a los demás? ¿Trato a la gente con amabilidad?”. Jesús creó un entorno pacífico y acogedor para sus seguidores, y disfrutó capacitándolos (Luc. 10:1, 19-21). Los animó a hacerle preguntas y se interesó en conocer su opinión (Mat. 16:13-16). Las plantas que se cultivan en un invernadero florecen y dan fruto. De modo parecido, en el entorno que creó Jesús, sus discípulos aprendieron las lecciones que les enseñó y produjeron buenas obras. Si tenemos cierta autoridad, preguntémonos: “¿Qué clase de entorno creo en el trabajo o en el hogar? ¿Fomento la paz? ¿Animo a los demás a hacerme preguntas? Y ¿me intereso por conocer su opinión?”. Nunca nos parezcamos a los fariseos, que se molestaban con los que les hacían preguntas y perseguían a los que daban una opinión contraria a la suya (Mar. 3:1-6; Juan 9:29-34). w19.09 38:1, 9-11
Viernes 21 de mayo
Cuando ellos estén diciendo “¡Paz y seguridad!”, entonces vendrá sobre ellos destrucción repentina (1 Tes. 5:3).
Los líderes mundiales a veces utilizan expresiones similares cuando hablan sobre mejorar las relaciones internacionales. Pero el anuncio que menciona la Biblia será diferente. ¿Por qué? Porque, cuando se dé ese anuncio, mucha gente creerá que los gobernantes mundiales han conseguido que el mundo sea un lugar más seguro. Sin embargo, la realidad será que estallará “una gran tribulación” que terminará en “destrucción repentina” (Mat. 24:21). Desconocemos qué llevará a las naciones a hacer ese anuncio y cómo lo harán. Tampoco sabemos si se tratará de una sola declaración o de una serie de anuncios. Sea como sea, hay algo que sí sabemos: que no debemos dejarnos engañar y creer que los líderes de las naciones traerán la paz mundial. Al contrario, esta es la señal de que “el día de Jehová” está a punto de comenzar (1 Tes. 5:2). w19.10 40:3-4
Sábado 22 de mayo
Durante ese tiempo se salvará tu pueblo (Dan. 12:1).
La guerra de Armagedón pondrá el punto final a la conclusión de este mundo. Sin embargo, no tenemos nada que temer porque esta será la guerra de Dios (Prov. 1:33; Ezeq. 38:18-20; Zac. 14:3). Cuando Jehová dé la señal, Jesucristo encabezará el ataque. A su lado estarán los ungidos resucitados y miríadas de ángeles. Todos juntos, lucharán contra Satanás, los demonios y sus ejércitos terrestres (Apoc. 6:2; 17:14). Jehová nos ha dado esta garantía: “Ningún arma que fabriquen contra ti dará resultado” (Is. 54:17). “Una gran muchedumbre” de siervos fieles saldrá “de la gran tribulación” con vida y continuará dándole servicio sagrado a Dios (Apoc. 7:9, 13-17). ¿No es cierto que la Biblia nos da muchas razones para tener confianza respecto al futuro? Sabemos que “Jehová protege al fiel” (Sal. 31:23). Todos los que amamos y honramos a Jehová seremos muy felices cuando vindique su santo nombre (Ezeq. 38:23). w19.10 41:17-18
Domingo 23 de mayo
El verdadero amigo ama en todo momento (Prov. 17:17).
Al acercarnos a la parte final de “los últimos días”, es posible que suframos graves adversidades (2 Tim. 3:1). Por ejemplo, después de una campaña electoral, la violencia y los disturbios desgarraron un país de África occidental. Durante más de seis meses, nuestros hermanos que estaban atrapados en la zona de conflicto corrieron peligro. ¿Qué los ayudó en esta situación tan complicada? Algunos se refugiaron en los hogares de otros cristianos que vivían en un lugar más seguro. Un hermano explicó: “En aquellos momentos, me sentí feliz de contar con amigos. Nos dábamos ánimo entre todos”. Cuando estalle “la gran tribulación”, daremos gracias de tener amigos que nos quieran (Apoc. 7:14). Por eso es tan importante que hagamos amistades fuertes ahora (1 Ped. 4:7, 8). ¿Por qué? Porque nuestros enemigos tratarán de separarnos con sus mentiras e información errónea. Intentarán hacer que dejemos de apoyarnos y de confiar unos en otros. Pero fracasarán. No podrán romper los lazos de amor que nos unen. w19.11 44:1-2, 19
Lunes 24 de mayo
Podrán apagar todas las flechas encendidas del Maligno (Efes. 6:16).
Satanás, “el padre de la mentira”, utiliza a quienes tiene bajo su control para difundir mentiras sobre Jehová y sobre nuestros hermanos (Juan 8:44). Por ejemplo, los apóstatas mienten y distorsionan la verdad sobre la organización de Jehová en Internet, la televisión u otros medios de comunicación. Estas mentiras forman parte de las “flechas encendidas” que emplea Satanás. ¿Qué debemos hacer si alguien nos habla de esas mentiras? Rechazarlas. ¿Por qué? Porque tenemos fe en Jehová y confiamos en nuestros hermanos. De hecho, evitamos todo contacto con los apóstatas. No permitimos que nada ni nadie debilite nuestra fe o nos lleve a discutir con ellos, ni siquiera la curiosidad. ¿Nos hemos negado a escuchar las mentiras de los apóstatas y a discutir con ellos? Entonces, merecemos que se nos felicite. Pero debemos mantener la guardia, porque Satanás tiene otras armas contra nosotros. w19.11 46:8, 11
Martes 25 de mayo
Jehová examina las motivaciones (Prov. 16:2).
Cuando tomemos decisiones, analicemos los motivos. Jehová espera que seamos honrados en todo. Por tanto, tenemos que ser honrados con nosotros y con los demás cuando tomamos una decisión. Si no lo somos por completo, es probable que nos cueste terminar lo que empezamos. Supongamos que un joven decide ser precursor, pero al cabo de un tiempo no consigue llegar a las horas y no se siente feliz en el ministerio. Quizás pensó que su motivo principal para ser precursor era agradar a Jehová. Sin embargo, ¿pudiera ser que en realidad lo hiciera para agradar a sus padres o a alguien a quien admira? Veamos otro caso. Un estudiante de la Biblia se resuelve a dejar de fumar. Al principio, se esfuerza mucho y no fuma durante una o dos semanas, pero recae. Al final, lo consigue. Su amor por Jehová y su deseo de agradarle lo han ayudado a vencer el vicio (Col. 1:10; 3:23). w19.11 48:9-10
Miércoles 26 de mayo
Compórtense como ciudadanos de una manera digna de las buenas nuevas acerca del Cristo (Filip. 1:27, nota).
El apóstol Pablo estaba convencido de que terminaría la carrera y alcanzaría la meta. Como era un cristiano ungido, esperaba recibir el premio de la llamada celestial. Pero sabía que tenía que seguir adelante para conseguirlo (Filip. 3:14). A fin de ayudar a los filipenses a no perder de vista la meta, les puso una interesante comparación. Les recordó a los filipenses que tenían su ciudadanía en los cielos (Filip. 3:20). ¿Por qué era importante que no lo olvidaran? En aquellos días, se valoraba mucho la ciudadanía romana. Sin embargo, los cristianos ungidos tenían una ciudadanía mucho mejor, pues les permitiría disfrutar de mayores ventajas. En comparación, la ciudadanía romana apenas tenía valor. Hoy día, los cristianos ungidos son un magnífico ejemplo, pues siguen adelante para alcanzar la meta de la vida eterna en los cielos. w19.08 31:14-15
Jueves 27 de mayo
Si el Hijo los libera, serán libres de verdad (Juan 8:36).
Esa libertad era sin duda mayor que la que podían conseguir los israelitas durante el año del Jubileo (Lev. 25:8-12). Por ejemplo, una persona que obtenía la libertad en el Jubileo podía volver a ser esclavo. Además, acabaría muriendo. El día de Pentecostés del año 33, Jehová ungió con espíritu santo a los apóstoles y a otras personas fieles. Los adoptó como sus hijos, de modo que con el tiempo los resucitaría para reinar con Jesús en el cielo (Rom. 8:2, 15-17). Estos fueron los primeros en beneficiarse de la libertad que anunció Jesús en la sinagoga de Nazaret (Lucas 4:16-19, 21). Ya no eran esclavos de las enseñanzas falsas y las costumbres de los líderes religiosos judíos contrarias a las Escrituras. Dios también los consideraba libres de los efectos mortales del pecado. El Jubileo cristiano, que comenzó con el ungimiento de los seguidores de Cristo en el año 33, terminará al final del Reinado de Mil Años de Jesús. w19.12 50:11-12
Viernes 28 de mayo
Las malas compañías echan a perder las buenas costumbres (1 Cor. 15:33).
Padres, ayuden a sus hijos a tener buenos amigos. El padre y la madre tienen que saber con quién se juntan sus hijos y qué hacen. También deben saber con quién hablan a través de las redes sociales y por teléfono. Estas amistades pueden influir en su manera de pensar y actuar. Muchos padres hacen todo lo posible para que sus hijos pasen tiempo con quienes son un buen ejemplo en el servicio a Jehová. Eso es lo que hicieron N’Déni y Bomine, un matrimonio de Costa de Marfil. Tenían la costumbre de invitar al superintendente de circuito a quedarse en su casa. N’Déni dice: “Esto tuvo un efecto muy bueno en nuestro hijo. Se hizo precursor y ahora es superintendente de circuito sustituto”. Cuanto antes empiecen a educar a sus hijos, mejor (Prov. 22:6). Pensemos en el caso de Timoteo. Su madre, Eunice, y su abuela Loida le enseñaron de Jehová desde que nació (2 Tim. 1:5; 3:15). w19.12 52:14, 16-17
Sábado 29 de mayo
Hay un amigo que se apega más que un hermano (Prov. 18:24).
¿Cómo podemos ser amigos confiables? Una manera es dando la ayuda que hemos prometido (Mat. 5:37; Luc. 16:10). Quienes necesitan ayuda se sienten muy aliviados cuando saben que pueden confiar en nosotros. Una hermana dice cuál es el motivo: “Estás tranquila porque sabes que la persona hará a tiempo lo que te prometió”. Los que pasan por una prueba o sufren una desilusión encuentran alivio cuando se sinceran con un amigo en el que confían. Pero debemos cultivar paciencia para ser amigos confiables. A Zhanna la abandonó su esposo. ¿Qué la aliviaba en esa triste situación? Hablar de sus sentimientos con sus amigos cercanos. Dice: “Aunque probablemente repetía lo mismo una y otra vez, ellos me escuchaban con paciencia”. Nosotros también seremos buenos amigos si sabemos escuchar. w20.01 2:9-11
Domingo 30 de mayo
Ya desde antes de nacer, estará lleno de espíritu santo (Luc. 1:15).
La Biblia contiene muchos casos de hombres fieles que recibieron espíritu santo pero que no tenían la esperanza de ir al cielo. Por ejemplo, David fue dirigido por el espíritu santo (1 Sam. 16:13). Este lo ayudó a entender cosas profundas sobre Jehová y lo guio para que escribiera varias secciones de la Biblia (Mar. 12:36). Aun así, el apóstol Pedro dijo que David “no subió a los cielos” (Hech. 2:34). Por otro lado, Juan el Bautista estaba “lleno de espíritu santo” (Luc. 1:13-16). Y el propio Jesús afirmó: “Entre los seres humanos, no ha habido nadie mayor que Juan el Bautista”. Aun así, explicó que Juan no formaría parte del Reino de los cielos (Mat. 11:10, 11). Jehová usó su espíritu santo para darles a estos hombres el poder de hacer cosas impresionantes, pero no lo usó para elegirlos para ir al cielo. ¿Significa eso que fueron menos fieles? No, solo significa que Jehová les devolverá la vida en el Paraíso, en la Tierra (Juan 5:28, 29; Hech. 24:15). w20.01 4:15
Lunes 31 de mayo
Nosotros amamos porque él nos amó primero (1 Juan 4:19).
Jehová desea que formemos parte de su familia. Esta se compone de personas que le han dedicado su vida y que tienen fe en el sacrificio de su Hijo. Y somos una familia feliz. Nuestra vida actual tiene sentido, y nos alegra abrigar la esperanza de disfrutar de una vida sin fin, sea en el cielo o en el Paraíso en la Tierra. Por amor, Jehová hizo un enorme sacrificio a fin de darnos la oportunidad de pertenecer a su familia (Juan 3:16). La Biblia dice que “se pagó un precio” por nosotros (1 Cor. 6:20). Gracias al rescate, Dios hizo posible que tuviéramos una relación estrecha con él. Disfrutamos del honor de llamar Padre a la persona más importante del universo. Y él es el mejor Padre que podemos tener. Tal vez nos hagamos la misma pregunta que se hizo un escritor de la Biblia cuando dijo: “¿Cómo le pagaré a Jehová todo el bien que me ha hecho?” (Sal. 116:12). La respuesta es que no tenemos nada con qué pagar a nuestro Padre celestial. No obstante, su amor hace que sintamos la necesidad de amarlo. w20.02 7:1-3