De nuestros lectores

“¡Despertad!” ayuda

Últimamente tuve la oportunidad de enseñar religión a 13 grupos de estudiantes de una escuela pública, un total de 52 clases. Gracias a “¡Despertad!” he podido enseñarles muchas cosas provechosas para su desarrollo. Algunos de los temas que utilicé trataban sobre la solución para un mundo en dificultades, el abuso sexual de menores, la fornicación, la homosexualidad, el uso de las drogas y el nombre de Jehová Dios. Me pareció que los estudiantes disfrutaron mucho de la información. Gracias.

O. M., Brasil

¿Cuánto importa la apariencia?

Su artículo “Los jóvenes preguntan... ¿Cuánto importa la apariencia?” (8 de enero de 1986) no es solo para los jóvenes. Tengo 42 años de edad y siempre he tenido problemas con resignarme a mi apariencia, hasta me ha repugnado mirarme en el espejo. Esta situación había empeorado muchísimo en los últimos 14 años, durante los cuales había padecido de depresión severa. La información que ustedes publicaron me ayudó a comprender que sencillamente soy una persona común, ni mejor ni peor que otras. Además tengo otros talentos que compensan por mucho cualesquier limitaciones físicas.

N. H., Indiana, E.U.A.

El Síndrome de Guillain-Barré

Las experiencias personales que salen en su revista siempre son muy alentadoras, pero jamás nos ha afectado una como la de Winston Peacock, “¿Volveré a andar alguna vez?” (8 de enero de 1986). Cuando recibimos este número, hacía cinco semanas que nuestra querida hija, de 23 años de edad, estaba paralizada debido al Síndrome de Guillain-Barré. Hasta ese entonces no sabíamos nada sobre esta enfermedad y nos preguntábamos si ella alguna vez volvería a caminar. Después de leer la experiencia de Winston Peacock y la explicación de lo que encierra este síndrome, nos sentimos muy edificados y animados. Podíamos relacionar casi cada etapa por la que él pasó con las de Sally, y ahora después de nueve semanas ella también camina con la ayuda de un andador, y esperamos que pronto vuelva a casa para atender a su hijita de 17 meses. Estamos muy agradecidos por su información.

C. y P. U., Inglaterra

El perro... ¿es siempre el mejor amigo del hombre?

Soy cartero, y quiero darles las gracias por el artículo “El perro... ¿es siempre el mejor amigo del hombre?” (8 de febrero de 1985). Cuando leí el artículo, entendí que el instinto mueve al perro a seguir cualquier objeto que se mueve. Muchas veces ha sucedido que los perros me han dado un susto, por lo cual he tenido que echarme a correr, y han surgido problemas. Uno mordió mi cartera. Después de haber leído su artículo deseo relatarles la experiencia que tuve con un perro doberman. Cuando tengo una carta certificada, acostumbro usar el intercomunicador para llamar al dueño de la casa. Cierto día toqué y el dueño contestó, pero en eso apareció un perro grande doberman y saltó por encima de la muralla. Ladrando como una fiera, no me dejaba mover. Recordé el artículo y me quedé quieto, pretendiendo que estaba tranquilo. Por fin el dueño hizo que el perro volviera al otro lado de la muralla. Me asusté, pero gracias a la información que publicaron salí ileso de este incidente. Por favor, sigan publicando información interesante que sea útil para todos.

G. T., Italia

Los crucigramas son útiles

Hace poco empecé a estudiar la Biblia con los testigos de Jehová, y al principio me era difícil hallar los diferentes libros de la Biblia y recordar los nombres de estos. Pero los crucigramas de “¡Despertad!” me han ayudado muchísimo al respecto.

S. C., Escocia