Ponderando las noticias

Agitación de conciencias

● Los testigos de Jehová están siendo sometidos a brutal persecución —palizas, violaciones, hasta asesinatos— en la nación de Malawi en el África sudeste. ¿Por qué? Solo porque mantienen la neutralidad cristiana y por consiguiente rehúsan comprar tarjetas políticas que harían de ellos miembros del Partido del Congreso de Malawi. (Juan 15:19; 18:36) Pero la brutalidad que han sufrido ha agitado las conciencias en todas partes.

De hecho, estas atrocidades suscitaron una prolongada consideración del asunto en la Cámara de Diputados del Parlamento Alemán en Bonn en marzo de 1976. Por ejemplo, respondiendo a una pregunta, el ministro Wischnewski dijo, en parte: “El gobierno federal ha tomado los informes de la persecución de los testigos de Jehová en Malawi como ocasión para hacer que el embajador exprese la opinión alemana al gobierno de Malawi.”

Los testigos de Jehová no están pidiendo a los gobiernos mundanos que obren a favor de ellos. Pero saben que a las personas pensadoras les aterran tales atrocidades debido a la conciencia que Dios les dio, que no puede sancionar la maldad nefanda. En armonía con ello, el apóstol Pablo dijo que cuando personas que no poseían la ley de Dios “hacen por naturaleza las cosas de la ley,” “demuestran tener la sustancia de la ley escrita en su corazón, mientras su conciencia da testimonio con ellos y, entre sus propios pensamientos, están siendo acusados o hasta excusados.” (Rom. 2:14, 15) ¿Cuándo sentirán los funcionarios públicos de Malawi su conciencia tan herida que le pongan fin a la persecución brutal de los testigos de Jehová?

Más personas abandonan las iglesias

● Ya por algún tiempo, clérigos de Alemania Occidental han visto sus iglesias medio vacías. En los últimos años, la gente de ese país ha encontrado otra razón para hacerse parte de un ejército creciente de no creyentes oficiales. Toda persona de Alemania Occidental que está alistada oficialmente como miembro de alguna iglesia tiene que dar un impuesto eclesiástico que se colecta de su paga. Pero cuando dejan oficialmente la iglesia, ya no tienen que dar ese impuesto.

Entre 1969 y 1974 más de un millón de protestantes y 360.000 católicos se ‘desregistraron,’ y 1975 fue otro año que estableció marca en esto. Pero no debe sorprender el que la gente se rebele contra las contribuciones eclesiásticas obligatorias. Jesucristo, el fundador del cristianismo, mostró que el dar bajo compulsión no es el camino que Dios señala. Dijo: “Recibieron gratis, den gratis.” (Mat. 10:8) El apóstol Pablo también declaró: “Que cada uno haga así como lo ha resuelto en su corazón, no de mala gana ni como obligado.” (2 Cor. 9:7) Por pasar por alto la Palabra de Dios, el clero está pagando la pena.

¿Por qué el fracaso?

● Por siglos Italia ha sido un país predominantemente católico. Pero George Armstrong escribió en “The Guardian Weekly,” Inglaterra, del 4 de abril de 1976: “De las 20 regiones de Italia, Roma ha llegado a ser la sexta en llegar a estar bajo el control de los comunistas y los socialistas. Las regiones controladas por los comunistas se extienden ahora desde Génova hasta Roma.” Uno bien pudiera preguntarse: ¿Por qué debería hacerse terreno tan fértil para el comunismo un país católico?

Sin duda el fracaso religioso ha sido una causa principal de esto.

Los comunistas no creen en Dios. Sin embargo las Escrituras dicen: “Dice en su corazón el insensato: ‘¡No hay Dios!’” (Sal. 14:1, “Biblia de Jerusalén,” católica) Evidentemente, pues, la Iglesia Católica Romana no ha inculcado verdadera creencia en Dios en el corazón de todos sus miembros.

La Iglesia tampoco ha enseñado que los cristianos tienen que mantenerse neutrales en cuanto a los asuntos políticos. Jesucristo dijo de sus seguidores: “Ellos no son parte del mundo, así como yo no soy parte del mundo.” (Juan 17:16) Jesús también enseñó a sus discípulos a orar por el reino de Dios. (Mat. 6:9-13) Obviamente, la Iglesia Católica no ha enseñado a la gente que la verdadera esperanza del hombre para buen gobierno no depende de ningún sistema político humano, sino del reino establecido de Dios.

El punto de vista cristiano

● Según “The Times” de Londres, un informe reciente de la comisión doctrinal de la Iglesia Anglicana declara: “Decir que la Biblia es ‘la Palabra de Dios’ o la ‘Palabra de Dios puesta en las palabras de los hombres’ es un juicio de fe tanto como lo es el decir que algún acontecimiento histórico es ‘obra de Dios’. No es una proposición que se pueda demostrar. Hay muchos cristianos que desean seguir hablando así cuando hablan de la Biblia; a otros no se les hace fácil esto.”

Por consiguiente, “The Times” dice que “plena aceptación personal de todas las declaraciones en la Biblia . . . no se espera de los miembros de la Iglesia Anglicana,” según el informe de la comisión. Superficialmente, quizás parezca que la comisión doctrinal de la Iglesia simplemente está desplegando criterio amplio y que de los cristianos no se requiere la aceptación plena de la Biblia como la Palabra inspirada de Dios.

Sin embargo, Jesucristo repetidas veces citó de las Escrituras que ya habían sida escritas para cuando él estuvo en la Tierra. Ciertamente Jesús no excluyó ninguno de aquellos escritos cuando dijo: “Tu palabra es la verdad.”—Juan 17:17.

El apóstol cristiano Pablo declaró: “Toda Escritura es inspirada de Dios.” (2 Tim. 3:16, 17) Además, dijo a los cristianos de Tesalónica: “Nosotros también incesantemente damos gracias a Dios, porque cuando ustedes recibieron la palabra de Dios, que oyeron de parte de nosotros, la aceptaron, no como palabra de hombres, sino, como lo que verdaderamente es, como palabra de Dios.”—1 Tes. 2:13.