Angustia de la Iglesia en América Latina. ¿Por qué la están abandonando millones de personas?
DESDE la frontera norte de México hasta el extremo austral de Chile, es difícil encontrar en Latinoamérica un pueblo en cuya plaza principal no se yerga una iglesia católica. Sin embargo, ‘en Latinoamérica se está produciendo un cambio monumental’, según Joseph E. Davis, director del programa de una institución que fomenta las actividades católicas. Además, admite que América Latina, que durante más de tres siglos vivió bajo la influencia de la Iglesia Católica, está en los umbrales de una profunda transformación.
No es ningún secreto que el predominio de la Iglesia Católica está debilitándose con rapidez. Según cálculos recientes, los católicos practicantes de América Latina son escasamente el 15% de la población. El libro 1991 Britannica Book of the Year (Anuario Britannica para 1991) dijo: “Los obispos católicos y el Papa mismo expresaron su temor de que América Latina, tradicionalmente católica, se esté apartando de modo peligroso de su antigua fe”. ¿Qué está pasando? ¿Por qué abandonan tantas personas el redil católico? ¿Qué les ha sucedido a los que se han apartado?
En busca de una explicación
El clero católico culpa de sus problemas a la proliferación de “las sectas”. Un sacerdote europeo que efectúa su obra en Bolivia se quejó: “La Iglesia es como un árbol al que la mala hierba sectaria le resta vigor”.
En Argentina aparecen 140 nuevas religiones cada año, lo que bien pudiera explicar la gran disminución en el número de católicos, que a mediados de los años setenta constituían el 90% de la población y que hoy solo son el 60 o quizás el 70%. Los 327 grupos religiosos no católicos han conquistado al 10% de los dos millones de residentes de la ciudad de Tijuana (México). La revista Time comentó: “Aunque parezca extraño, es casi seguro que los domingos hay más protestantes que católicos en las iglesias brasileñas”. No es de extrañar que —según un periódico— ‘los cardenales latinoamericanos del consistorio que el Papa convocó en el Vaticano para tratar cuestiones de capital importancia para la Iglesia de hoy’ coincidieran en que uno de estos era “el problema de las sectas”.
Durante una reunión con los obispos de México, el Papa atribuyó los logros de las muchas religiones nuevas “a la tibieza e indiferencia de los hijos de la Iglesia, que no están a la altura de su misión evangelizadora”. ¿A qué se debe la indiferencia de “los hijos de la Iglesia” en lo que respecta a satisfacer las necesidades espirituales de los latinoamericanos, siendo que muchos de ellos respetan la Biblia? El periódico Última Hora, de La Paz (Bolivia), comentó en un artículo de fondo: “Tanto ha entrado la Iglesia en el mundo, que parece estar abandonando cada día más sus propias zonas. No ha de sorprender por eso hallarnos, como sucede, con sacerdotes que son más sociólogos o economistas o comunicadores o políticos que religiosos”.
¿Más políticos que predicadores?
No hay duda de que la intromisión de la Iglesia en la política durante los años setenta y ochenta ha contribuido a la aversión que muchos latinoamericanos sienten hoy por el catolicismo. Un estudio publicado en 1985 hizo la siguiente observación con respecto a la orden Maryknoll, la Asociación Católica de Norteamérica para Misiones en el Extranjero, que patrocina muchas misiones en América Latina: “Maryknoll ha logrado que el público acepte el mensaje marxista-leninista de revolución violenta precisamente porque se le ha permitido funcionar como brazo de la Iglesia Católica. Su mensaje no solo ha llegado al católico practicante de término medio, sino también a los prominentes políticos americanos”.
Piense, además, en la llamada guerra sucia, en la que la asombrosa cantidad de entre diez mil y treinta mil argentinos fueron secuestrados y asesinados a fines de los años setenta sin un juicio de por medio. Un artículo de fondo del National Catholic Reporter titulado “La sangre mancha a la Iglesia de Argentina” mencionó: “La experiencia de Argentina se asemeja mucho al modo de actuar de la Iglesia Católica en la Alemania nazi, lo que de nuevo hace surgir la pregunta en cuanto a si a la Iglesia le importa más el poder que el Evangelio, que es indispensable para ser testigo de la verdad”.
El ansia de poder en los gobiernos mundanos que tiene la Iglesia prueba a todas luces que no es amiga de Dios. La Biblia dice: “¿No saben acaso que haciéndose amigos del mundo se hacen enemigos de Dios? Porque el que quiere ser amigo del mundo se hace enemigo de Dios”. (Santiago 4:4, Levoratti-Trusso.) No sorprende, entonces, que muchas personas ya no crean que la Iglesia Católica pueda darles guía espiritual. Pero ¿qué les ha sucedido a los que han abandonado el redil católico?
Ovejas sin pastor
Su situación es muy parecida a la de las personas del siglo I, a quienes los líderes espirituales del judaísmo desatendieron. La Biblia dice que Jesús “sintió compasión de ellos, porque estaban angustiados y desvalidos, como ovejas que no tienen pastor”. (Mateo 9:36, Versión Popular.) Muchas personas se han salido de la Iglesia Católica para refugiarse en las llamadas religiones evangélicas. ¿Han atendido mejor estas a las ovejas perdidas? ¿Se sienten los protestantes más impulsados a ser como los verdaderos discípulos de Jesús, de quienes él dijo: “Ellos no son parte del mundo, así como yo no soy parte del mundo”? (Juan 17:14.)
Muchas religiones no católicas tratan de aparentar que obedecen la Biblia en lugar de seguir tradiciones religiosas. Con frecuencia esto es solo un disfraz. Las doctrinas principales de las iglesias protestantes son tan similares a las de la Iglesia Católica, que muchos observadores bien podrían aplicarles el dicho andino: “Es la misma cholita con otra pollera”.
Por ejemplo, casi todos los grupos protestantes enseñan que Dios es una Trinidad, aunque esta no es una doctrina bíblica. The Encyclopedia of Religion reconoce: “Hoy exégetas y teólogos concuerdan en que la Biblia hebrea no contiene ninguna doctrina de la Trinidad [...] El Nuevo Testamento tampoco contiene la doctrina de la Trinidad de una manera explícita”.a
Los protestantes están tan vinculados a este mundo y a sus políticos como los católicos. La Encyclopedia of Latin America afirma: “El protestantismo de Latinoamérica también se ha conformado a [...] las políticas electorales populistas. Los pastores autóctonos con frecuencia se hacen clientes de patronos políticos y consiguen votos a cambio de favores del gobierno para sus iglesias”. La revista Latin American Research Review dice: “En cuanto llegó a Guatemala, el protestantismo se desposó con la política”. Luego añade: “Ha sido, a la vez, una religión y un vehículo para conseguir fines políticos”.
La participación de los protestantes en la política con frecuencia los ha llevado a tomar parte en las guerras. El difunto Harry Emerson Fosdick, considerado como uno de los clérigos protestantes más influyentes de la historia de América, admitió: “La historia del mundo occidental ha estado jalonada por la guerra. Hemos engendrado hombres para la guerra y les hemos enseñado a guerrear; hemos glorificado la guerra, y el guerrero se ha convertido en nuestro héroe; hasta en nuestras iglesias hemos puesto el estandarte de la guerra [...] Con la misma boca que hemos aclamado al Príncipe de Paz, hemos glorificado la guerra”.
¿Qué hará usted?
Después de presentar a la religión falsa como una prostituta simbólica que fornica con los gobernantes de la Tierra, el libro bíblico de Revelación, o Apocalipsis, dice: “Salid de ella, pueblo mío, para que no seáis sus compañeros de pecado y os toque parte de sus calamidades”. (Apocalipsis 18:4, Agustín Magaña.)
Muchas personas ven la corrupción de la Iglesia Romana, pero titubean en cuanto a salirse de ella porque es muy antigua. No obstante, cabe recordar que el sistema judío también era muy antiguo; sin embargo, cuando los judíos se hicieron apóstatas y abandonaron las verdaderas enseñanzas de Dios, él los rechazó y dejó de considerarlos pueblo suyo. Los siervos fieles de Dios se apartaron del judaísmo cuando se dieron cuenta de que él estaba utilizando entonces a la congregación cristiana. ¿Cómo puede identificar usted a la verdadera congregación cristiana de nuestros días?
En las dos últimas décadas, casi un millón de latinoamericanos se han hecho testigos de Jehová. ¿Por qué han cambiado? Un periódico de Martínez de la Torre (Veracruz, México) examinó esta cuestión. Dijo: “Los estudiantes de la Biblia están integrados casi en un 100% por antiguos militantes de religiones varias —católicos, principalmente—, quienes han advertido las serias derivaciones de la religión hacia la política y la aceptación de prácticas que resultan antibíblicas, como la aprobación de la unión de fes, la inmoralidad y la violencia. [...] Para ellos ha sido una fuente de satisfacción conformar su conducta a las Escrituras, sin recurrir a fetichismos y tradiciones de oscuro origen, lo que les ha provisto de una uniformidad de criterio digna de encomio y que parece distinguirles en todas partes”.
Otro periódico de América Latina lo expresó de esta manera: “Los testigos de Jehová son trabajadores diligentes, honrados y temerosos de Dios. Son conservadores y aman la tradición, y su religión se basa en las enseñanzas de la Biblia”. Lo invitamos a estudiar la Biblia con los testigos de Jehová dondequiera que usted viva. Podrá constatar que ellos basan en la Biblia su esperanza y todo aspecto de su vida. Sí, aprenderá a adorar a Dios “con espíritu y con verdad”. (Juan 4:23, 24.)
[Nota a pie de página]
a Véase el folleto ¿Debería creer usted en la Trinidad?, publicado por Watchtower Bible and Tract Society of New York, Inc.
[Tabla en la página 21]
LOS TESTIGOS DE JEHOVÁ EN ALGUNOS PAÍSES DE AMÉRICA LATINA
1971 1992
País Publicadores Publicadores
Argentina 20.750 96.780
Bolivia 1.276 8.868
Brasil 72.269 335.039
Chile 8.231 44.067
Colombia 8.275 55.215
Costa Rica 3.271 14.018
República
Dominicana 4.106 15.418
Ecuador 3.323 22.763
El Salvador 2.181 20.374
Guadalupe 1.705 6.830
Guatemala 2.604 13.479
Honduras 1.432 6.583
México 54.384 354.023
Panamá 2.013 7.732
Paraguay 901 4.115
Perú 5.384 43.429
Puerto Rico 8.511 25.315
Uruguay 3.370 8.683
Venezuela 8.170 60.444
TOTAL 212.156 1.143.175