La caja de preguntas
◼ ¿Qué precauciones debemos tomar cuando trabajamos en un territorio peligroso?
1 Con mayor frecuencia nos enteramos de situaciones de violencia, asaltos y disturbios, especialmente en zonas urbanas. Aunque nos preocupa la situación, sabemos que hasta en los sitios peligrosos hay personas sinceras que pueden aceptar el mensaje del Reino. Por eso, cuando sea apropiado debemos cobrar valor para continuar predicando, confiando en la protección de Jehová. (Pro. 29:25; 1 Tes. 2:2.)
2 Cuando nos dirigimos a una zona potencialmente peligrosa, Jehová espera que seamos cautelosos y prudentes. Debemos estar alerta. “Sagaz es el que ha visto la calamidad y procede a ocultarse, pero los inexpertos han pasado adelante y tienen que sufrir la pena.” (Pro. 22:3.) Los publicadores de experiencia saben que es prudente trabajar juntos en parejas, o incluso en grupos de varios hermanos, si parece necesario. Eclesiastés 4:9, 12 dice: “Mejores son dos que uno [...]. Si alguien pudiera subyugar a uno solo, dos juntos podrían mantenerse firmes contra él”. Es común que los maleantes agredan a las personas solas, pues son víctimas más fáciles.
3 Cuando entre en edificios de apartamentos y el vestíbulo esté oscuro y las escaleras vacías, tenga mucho cuidado. Tome sus precauciones cuando lo inviten a pasar a una casa o a un apartamento. No discuta con las personas de apariencia peligrosa u hostil. Preséntese rápidamente como testigo de Jehová. Algunos publicadores llevan siempre en la mano la Biblia o una revista Atalaya o ¡Despertad!, para que las personas los identifiquen.
4 Esté alerta a los individuos ociosos que merodean por el lugar. Cuídese de entrar en un ascensor con personas que no parece que vivan en el edificio. No lleve alhajas costosas. Si tiene que salir por la noche, no camine por las calles oscuras y poco transitadas. Si lo asaltan, no oponga resistencia si solo quieren el dinero o cosas de valor; su vida es más importante que cualquier objeto valioso que posea. (Mar. 8:36.)
5 Los hermanos encargados de los grupos deben preocuparse por los publicadores que han ido al territorio y saber dónde están. Por lo general, es preferible mantener el grupo concentrado en una misma zona para que siempre tengan a alguien cerca. Si ocurre un hecho de violencia o un disturbio en el vecindario, el grupo se debe retirar de inmediato.
6 Si somos prudentes y nos mantenemos alerta, podremos seguir llevando el mensaje a las personas que viven en zonas donde abunda la delincuencia y que “están suspirando y gimiendo por todas las cosas detestables que se están haciendo”. (Eze. 9:4.)