De nuestros lectores

¿Tan solo un simple enamoramiento?

Deseo expresarles mi agradecimiento por los artículos que escribieron en la sección “Los jóvenes preguntan...” con los títulos: “¿Tan solo un simple enamoramiento?” y “¿Cómo puedo sobreponerme a un enamoramiento caprichoso?” (8 de enero y 22 de enero de 1987). He tenido este problema durante varios años, pues estuve “enamorado” de una muchacha que es mayor que yo. Muchas personas trataron de persuadirme de que la olvidara, pero sin resultado. Después de leer los dos artículos me di cuenta de que había alguien que verdaderamente me comprendía y podía ofrecerme buenos consejos, de modo que he decidido dejar las cosas tal como están y emprender de nuevo una vida normal.

G. T., Italia

¿Evolución o creación?

He ejercido durante veinte años de profesor de física y química en una universidad. Después de leer el tema “¿Accidentes de evolución, u obras de creación?”, de su revista del 8 de febrero de 1982, no he podido por menos que enviarles algunas observaciones. El artículo me impresionó y entusiasmó mucho. Cada vez la razón me convence más de que es imposible que todo haya llegado a existir por casualidad. Tiene que haber un propósito bien definido. Me gustaría que la revista ¡Despertad! considerase de nuevo este tema en números futuros y que se fomentase la consideración de este tema en las escuelas brasileñas.

R. R., Brasil

Sírvase leer nuestro número del 22 de enero de 1987 y el libro “La vida... ¿cómo se presentó aquí? ¿Por evolución, o por creación?”. Dichas publicaciones puede conseguirlas de los editores de esta revista o de los testigos de Jehová de su localidad.—La dirección.

El mundo desde 1914

Me gusta mucho la serie de artículos titulada “El mundo desde 1914” (del 8 de marzo al 22 de junio de 1987). Hay muchos datos históricos y otros detalles que muestran el cambio rápido que se ha producido en el mundo y que va a conducir a la “gran tribulación”. (Mateo 24:21.) Sin esta clase de información estaríamos verdaderamente desorientados. El comportamiento mundano propio de este sistema es efectivamente antidios y solamente puede terminar en destrucción. Ciertamente agradezco la excelente información que ayuda a todas las personas pensadoras a darse cuenta de que el hombre tiene que acudir a Jehová para salvarse y aceptar sus provisiones para vida eterna.

P. H., Inglaterra

Sobre el acné

Les escribo con respecto a su artículo tan negativo de la sección “Los jóvenes preguntan... ¿Qué puedo hacer contra el acné?” (22 de febrero de 1987). Una nutrición adecuada, basada en una dieta equilibrada junto con la complementación apropiada, a menudo produce resultados sorprendentes, además de permitir a esos jóvenes ayudarse a sí mismos.

M. B., Inglaterra

Deseo agradecerles el artículo que publicaron acerca del acné. Tengo treinta años y comencé a tener acné hace cuatro años. Ahora puedo entender a los jóvenes, puesto que comparto los mismos sentimientos, como la sensación de incomodidad cuando alguien me invita a salir con un grupo para ir a la playa. Incluso limita la ropa que puedo llevar. No puedo ponerme un vestido que deje la espalda al descubierto, y esto es especialmente difícil en verano. ¡Cuánto ánimo y contentamiento me ha dado su consejo, puesto que estoy resuelta a cultivar una personalidad mejor y más positiva!

L. L., Canadá