Una iglesia dividida, ¿hasta qué grado?
“SON como una familia numerosa que, presa del pánico, no deja de discutir en casi todos los cuartos de una vetusta y destartalada casa cuya fachada acaba de desplomarse; a golpe de pandereta, los ‘Niños de Jesús’ vociferan contra los elegantes homosexuales anglocatólicos que lucen trajes de seda negra.” (The Sunday Times, Londres, 11 de abril de 1993.)
La familia es la Iglesia Anglicana, y el tema que discuten, la ordenación sacerdotal de mujeres. Esta descripción gráfica de desunión profunda puede aplicarse por igual a toda la cristiandad. Según cierto informe, el que los patriarcas de la Iglesia Ortodoxa y el Papa hayan condenado la decisión de admitir a las mujeres en el sacerdocio, ha resultado finalmente en que “el sueño de la reunificación con el resto de la cristiandad esté más lejos que nunca”.
¿Cuánta división hay en la Iglesia?
Como leemos en Mateo 7:21, Jesucristo dijo que muchos profesarían fe en él como Señor, pero, aun así, no ‘harían la voluntad de su Padre’. La revista Maclean’s observa: “A los lectores de Mateo que buscan la salvación se les perdona que estén confusos respecto a qué es exactamente la voluntad de Dios, en vista de que los cristianos y las iglesias difieren tanto en esta cuestión”. Basándose en una encuesta efectuada en Canadá, concluyó que hay “una tremenda diversidad en las creencias y las prácticas de los cristianos canadienses; en realidad, hay más diversidad entre los miembros de cualquier confesión dada que entre las confesiones mismas”.
Según esta encuesta, el 91% de los católicos está a favor del control de la natalidad con métodos artificiales, aunque su Iglesia lo condene; el 78% piensa que se debería permitir la ordenación sacerdotal de mujeres, y el 41% acepta el aborto “en determinadas circunstancias”. Maclean’s afirma que la discrepancia que existe entre las diferentes confesiones sobre “una infinidad de cuestiones teológicas, destaca las divisiones que están provocando la desintegración de las iglesias principales”.
Diferentes conjuntos de normas
Existen diferentes conjuntos de normas y puntos de vista antagónicos con relación a la moralidad. Mientras que algunos afirman que se rigen por los principios de la Biblia, otros se burlan de estos. ¿Fue, por ejemplo, la ceremonia de “matrimonio” de dos lesbianas, celebrada en la Iglesia Metropolitana de Toronto, algo que estuviese en conformidad con la voluntad de Dios? Las contrayentes, por supuesto, creían que sí. “Deseamos celebrar nuestro amor públicamente y delante de Dios”, expresaron.
Un columnista preguntó cómo era posible que ‘un arzobispo católico que había recibido una queja tras otra transfiriera a sacerdotes pederastas a otras iglesias, donde hallarían nuevos grupos de monaguillos’. El sacerdote Andrew Greeley calcula que de dos mil a cuatro mil sacerdotes han abusado sexualmente de unos cien mil menores, y con frecuencia se hace muy poco al respecto.
Una Iglesia desunida produce un pueblo fragmentado. En los Balcanes, los “cristianos” serbios y croatas por igual creen que Cristo apoya su lado de la guerra “justa”. Muchos de los que van al campo de batalla llevan consigo sus crucifijos, y se informa de un combatiente que “siempre sostenía un crucifijo en la boca en lo más encarnizado de la batalla”.
“Que no haya divisiones entre ustedes”
Es cierto que la Biblia deja algunos asuntos a la conciencia de cada persona, pero eso no da lugar a que se formen las divisiones que hemos mencionado. El apóstol Pablo dice muy claramente: “Que todos hablen [y actúen] de acuerdo, y que no haya divisiones entre ustedes”. (1 Corintios 1:10; Efesios 4:15, 16.)
Un examen honrado del “cristianismo”, unos dos mil años después de que el apóstol Pablo escribió estas palabras, hace surgir serias interrogantes. ¿Por qué se encuentran tan divididos los “cristianos”? ¿Puede subsistir una Iglesia dividida? ¿Existirá algún día una cristiandad unida? El siguiente artículo contesta estas preguntas.
[Fotografía en la página 3]
Manifestación de sacerdotes en contra del aborto
[Reconocimiento]
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